Te invitó hoy a tener ya una pelea de kick boxing (por favor: ¡imaginaria!)…
Y empiezo con un golpe (es decir: ¡una pregunta!):
¿Es muy conocido que desde hace unos 50 años en Cuba no es solo cosa de películas..?
Pero no le fue nada fácil a sus protagonistas de casa impulsar su afición, pues tuvieron que transitar un camino lleno de espinas: al principio, incluidas nuestras autoridades deportivas, lo veían como “peleas callejeras” (sin tener en cuenta su historia y reglamento).
Vamos a seguir con una explicación obligada:
“El kick boxing es un grupo de deportes de combate de pie y una forma de boxeo, basados en patadas y puñetazos. El combate se desarrolla en un ring de boxeo, normalmente con guantes de boxeo, protectores bucales, pantalones cortos y pies descalzos para favorecer el uso de patadas. El kick boxing se practica para la defensa personal, la aptitud general o como deporte de contacto”, se refleja en el sitio Wikipedia.
Algo más (para conocer o recordar): los combates se realizan a tres asaltos de dos minutos cada uno, con 60 segundos de descanso intermedio, y pueden acabar antes por nocao. Surgió en Japón y combina elementos del boxeo, el kárate y el taekwondo.
SEGUIMOS
No hay que tener una bola de cristal para llegar a lo que parece una verdad. La ya cercana presencia de dos cubanos en el Campeonato Panamericano debe seguro enlazarse con una noticia del 21 de julio del año pasado. El kick boxing fue aceptado como uno de los de los deportes olímpicos. No hará su debut en los Juegos de París 2024, pero sí es posible (repito: posible) que lo haga en Los Ángeles 2028. Ello es del interés de su Comité Organizador.
Y con tales prometedores aires soplando Lennier Romero (división de los 67 kilogramos) y Albert Zamora (81) pelearán en el Campeonato Panamericano, a celebrarse en el municipio brasileño de Cascavel, ya casi… ¡del 16 al 20 de noviembre!
Quedó claro que son nuestros dos mejores representantes, y competirán en low kick (patadas bajas) y K-1 (modalidad olímpica en la cual se permite golpes de puño en giro y con la rodilla), esta última con grandes posibilidades de ver la luz en Los Ángeles.
Hay algo más de importancia en juego:
“Ellos buscarán clasificarse para el Campeonato Mundial del año próximo, en Riad, la capital de Arabia Saudita”, dijo Armando Quintana Parra, presidente de la Academia Nacional de Kick boxing, para los lectores de Cubahora.
CALENTANDO
Entonces siguió este combate periodístico…
–Al principio este deporte no era aceptado.
“Sí, es verdad, siempre se vio al kick boxing como algo callejero, no solo en Cuba, también en la Europa oriental”.
–¿Nos puede dar alguna explicación inicial?
“El kick boxing americano, o boxeo americano conocido como Full Contac se basa en boxeo, karate y taekwondo.
“El kick boxing oriental (japonés) también posee técnicas de Muay Thai o boxeo tailandés, la ejecución técnica de las patadas es diferente y el reglamento y zonas donde golpear varia, así como las partes del cuerpo y técnicas permitidas, en K-1 se permite golpes de puño en giro y con la rodilla”.
–¿Cuándo llegó a nuestro país?
“En Cuba ya en los primeros años de la década 80-90 se practicaba kick boxing americano (semi contact y full contact), influidos por Chuck Norris , Bill Wallace… Los maestros Félix de la Cruz y Lázaro Villarejo tenían su escuela y practicaban estas modalidades. El kick oriental entró a inicios de los 90, a través del español José Vicente Eguzkiza, campeón mundial”.
¡GONG..! Se acabó el primer asalto. Pero la pelea no ha terminado. Queda mucho bueno. Volveremos con más…
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.