Liga Élite: ¿A Caracas en coche o en barco?

Destinada a romper varios récords ofensivos y dejar marcas negativas en cuanto a picheo, la final de la primera Liga Élite del Béisbol Cubano (LEBC) se decidirá en esta urbe oriental, sede del equipo más estable del campeonato, pero ahora mismo contra las cuerdas.

Después de no dejarse ahogar en el quinto partido en los predios de Portuarios, sin dudas el plantel de mejores resultados desde el el último tercio de la fase preliminar, Agricultores saldrá este sábado a emparejar el match y estirarlo al límite, única opción que tiene para alzar el trofeo.

Se despidieron de San José de las Lajas con un ataque brutal de su artillería pesada: siete jonrones, la mitad de todos los que ha sacudido en esta serie de playoffs.

Con esa andanada de palos de vuelta entera no dejaron margen a las constantes emboscadas de los estibadores, acostumbrados a voltear marcadores en la postemporada.

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Entre los bambinazos hubo dos de Rafael Viñales, quien llegó y rebasó rápido el centenar de cuadrangulares en campeonatos nacionales. No salió a buscarlos, pero sus contactos de calidad fueron tan sólidos que la bola premió su enfoque volándose la barda par de veces. Cuando vi tantos jonrones, le dije a mis compañeros: falta el mío para asegurar el regreso a Granma, comentó después el slugger tunero, miembro de la preseleccion cubana para el Clásico Mundial.

Esa cifra iguala una marca para un equipo en un juego de finales y sumados los dos de Portuarios  también integran la lista de los partidos en esta instancia donde se han ligado nueve cuadrangulares.

Ya van 24 palazos entre ambos conjuntos desde el sábado, récord para una discusión del título, y están a seis del tope absoluto para una serie de postemporada, la semifinal entre Villa Clara y Santiago de Cuba de 1996, según los datos del excelso estadístico Benigno Daquinta.

No tuvo el pícher César García una apertura fina, pero con semejante respaldo ofensiva pudo caminar cinco innings con holgura, ganó su sexto partido en la liga sin derrotas.

Era eso lo que más necesita su equipo en aras de preservar lo mejor del bullpen para las batallas conclusivas en el Mártires de Barbados.

Ha sido el picheo lo menos "élite" de esta final. Salvo en el segundo juego, cuando se marcaron solo siete anotaciones entre los dos conjuntos, en todos los demás se han facturado más de diez anotaciones y en par de ocasiones la suma de vueltas dio 24.

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Y esos marcadores no prestigian un torneo llamado a ser el más importante de la temporada nacional. Ha sido el playoff de los relevistas, obligados a trabajar más de lo deseado y en todos los casos, excepto en el duelo de jueves, cuando los mentores tuvieron alguno que aguantara a la tanda rival salieron airosos.

Sucedió con Pedro Álvarez, el primer día; Andy Vargas, el segundo; Yoel Mojena, el tercero; y Marcos Ortega, en el cuarto. En el otro choque no hizo falta, los bates fueron los dueños del juego.

La serie está 3-2 a favor de Portuarios. La tuvieron 3-1 y con esa ventaja nunca se ha perdido una final, pero en esta historia los números no se pueden leer fríamente.

Por muy arriba que esté el ánimo de los estibadores y aunque lo nieguen públicamente, saben que en un séptimo juego las oportunidades de Agricultores para ganar la liga son mucho mayores.

Yadián Martínez tratará este sábado de caminar todo lo más que pueda para que aseguren atrás Andy Vargas y Marlon Vega, y alzar la corona.

Tendrá enfrente al tunero Carlos Juan Viera, quien regresó hace poco de México, donde jugó en la Liga Arco, la más fuerte del circuito invernal.

Viera es la carta ideal para la aplanadora verde, que reservaría entonces al experimentado zurdo Leandro Martínez para un séptimo compromiso.

Esperemos que este sábado no suceda como el pasado, cuando el partido fue sellado por oscuridad y empate a 11 carreras. La LEBC no se merece situaciones así en su epílogo.