“Diez Millones me ha dejado preocupado”

Desde que se estrenó Diez Millones en la pequeña salita de Argos Teatro en abril del 2016, ha sido como un rio que ha arrastrado a los actores y al propio Carlos Celdrán, director del grupo y escritor de la obra.

Así me lo confesó él días atrás, cuando reconoció que nunca imaginaron la inmensa repercusión que ha tenido la puesta en escena que, luego de cuatro temporadas, sigue teniendo la sala llena.

“No puedo explicar cómo se ha multiplicado la experiencia. El crecimiento de los actores, la retroalimentación con el público… Diez Millones me ha dejado como mudo”.

—¿Por qué?

—Estoy en un estado en el que me da miedo todo lo que tiene que ver con el teatro. Yo no sabía cómo hacer ese texto, ese hibrido que hilvana la narración y el diálogo. Tuve muchas dudas en los ensayos, premedite que el proceso de ensayo sería muy largo y al mes tuve que adelantarlo todo porque estaba casi lista. Se nos fue revelando todo poco a poco, los actores se entregaron con pasión, y se levantó la obra en poco tiempo…

“Me costó mucho trabajo elegir a los actores, en particular a Caleb Casas, porque él asume el personaje de mi padre. Cuando empecé a revisar las fotos de mi padre me di cuenta que tenia la misma edad que Caleb tiene ahora, lo que sucede es que varían las perspectivas con el tiempo.

”La obra tiene un carácter universal y eso me complace mucho. No solo la han visto cubanos, y todos se han conectado y emocionado con la historia de manera impresionante. En nuestra sala siempre hay extranjeros en el público, y me ha impactado ver sus reacciones, aun cuando la barrera del lenguaje exista”.

—¿Te estás tomando un descanso?

—Esta obra me ha dejado preocupado, no estéril ni en crisis, pero sí pensativo. ¿Qué hacer ahora? Es la pregunta, porque lograr la misma intensidad es imposible, esto es cosa de una sola vez. Estoy dándome un tiempo para creer en otras propuestas.

“Tal vez el público esté esperando que yo supere Diez Millones pero, repito, eso es solo una vez en la vida, y no pretendo hacerlo. Ya estoy necesitando un nuevo proyecto, pero no quiero tener a Diez Millones como punto de partida. Debo dejarla descansar un tiempo también, porque para empezar otra obra tengo que dejarla reposar, porque de lo contrario mi mente está en función de ella. De todos modos se retomará en festivales internacionales a los que estamos invitados”.

Aprovecho la ocasión y converso con el actor cubano Caleb Casas...

“Es una obra que Celdrán trajo a la luz después de mucho tiempo. Es un texto muy personal que además refleja todo lo que ha leído y aprendido en su vida. Cuando nos mostró el guión nos sorprendió porque es una responsabilidad muy grande la que tuvimos que asumir, porque se trata de su vida, y de la vida de otras personas.

”Yo no había nacido en esa época en la que transcurre la obra. Asumí un personaje que sería mi padre, y tuve que investigar mucho y nutrirme de muchas referencias. Mi personaje sufre mucho, solo se alegra cuando tiene cerca a su hijo. Le rodea mucha soledad y aprende poco a poco a vivir con ella en medio de tanta lejanía de emociones.

”Todavía se sigue llenando la sala y es un placer inmenso para Argos Teatro después de cuatro temporadas. También vivimos la experiencia de presentar la obra en Estados Unidos, en Miami y Nueva York, y fue similar porque muchos de los que estuvieron allá en el público recordaron sus vivencias.

”Le agradezco a Celdrán, que es mi amigo y mi mentor, por incluirme en Diez Millones. Estuve mucho tiempo trabajando en Colombia en televisión y volver a mi familia teatral en Argos Teatro ha sido maravilloso…”.

—De tus proyectos más recientes…

—Estoy en el elenco de la más reciente película de Arturo Soto, Nido de mantis. Es difícil, no solo por asumir la historia de amor con tres vértices, sino también porque la película transita por varias épocas, y eso conlleva cambio de vestuario, de maquillaje, de escenografía… hacerlo creíble fue un reto, porque actualmente no se puede mentir mucho con las nuevas tecnologías.