“Ahora estamos preparando una versión en 3D” —me dijo un hombre flaco, desgarbado, que cinta métrica en mano medía ventanales, escalones y barandas del ruinoso Presidio Modelo en la Isla de la Juventud.
De vez en vez soltaba la tira numerada; de un bolsillo del pantalón sacaba libreta y lápiz y escribía largamente, concentrado, sus labios moldeaban cifras sin emitir sonidos.
Salir del Pabellón de Buen Comportamiento era volver a espirar. Adentro, excrementos minaban el suelo. Cíclicos, temporales, casi acostumbrados, los ríos de orine han dejado marcas en las esquinas.
Los deficientes artistas de la localidad han aprovechado las amplísimas paredes para expeler escenas, frases y palabras que solo caben, quizá, en lo peor del reguetón.
A no ser por las pañoletas lejanas de los estudiantes primarios, el sitio recuerda un campo de batalla olvidado por los hombres. Un pueblo fantasmal a merced de seres monstruosos.
El técnico de la cinta métrica se toma unos segundos para descansar, me cuenta que los Joven Club de Computación de Gerona y Chacón —la comunidad aledaña al Presidio— están haciendo la maqueta digital para colgarla en Internet. “Ya se han finalizado las representaciones de dos de los 34 edificios que conforman el complejo carcelario más famoso de Cuba. La próxima fase —me comenta el técnico mientras se seca el sudor— será la de los emblemáticos pabellones circulares”.
Cuando el proyecto en tercera dimensión llegue a su fin, desde cualquier lugar los interesados podrán visitar el sitio que inspiró los tétricos cuentos de Pablo de la Torriente, y donde los presos políticos más famosos del siglo XX cubano —los asaltantes del Cuartel Moncada, por supuesto— fueron confinados.
Los visitantes de la Web, claro está, se ahorrarán la fetidez, el mal rato de esperar una cosa y encontrar otra. Los diseñadores, dibujantes y demás especialistas se esmerarán por cubrir con su arte lo que la ausencia de recursos, de interés y quién sabe cuántas otras faltas son incapaces de hacer con las octogenarias edificaciones, paradójicamente declaradas Monumento Nacional desde 1978.
Pero, ¿qué queda para los que cruzamos el mar o enfrentamos la crítica situación del transporte en la Isla de la Juventud por llegar al Presidio? ¿No merecemos nosotros 400 000 metros cuidados? ¿Y si lo digital, por muy sofisticado y bonito que se vea, no es suficiente y necesitáramos tocar un poco de la historia?
ramses
15/5/15 13:59
Hace un año y medio hice mi uno de mis sueños realidad, depsues de sortear todas las dificultades para gestionar los pasajes logre cruzar el Golfo de Batabanó para visitar la hermosa Isla de la Juventud. Pero el dolor me estrujo el pecho cuando fui al Presidio Modelo, es inaceptable e increible ver como se desgaja nuestra historia. Unas construcciones tan impresionantes que incluso se divisan desde el mar a la entrada de la isla en el catamaran aun cuando no has todcado puerto en Gerona esten a merced del olvido, la destrucción y la indolencia. Aqui hubo historia, en ese lugar se fraguó y gestó parte de nuestras luchas de independencia, desde ahí Fidel escribió su alegato La Historia me Absolverá, en le presidio se hizo Revolución. No entiendo ni con la mas increible justificacion el porqué puedaestar así. Solo se conserva en buen estado la nave de los moncadistas, pues las circulares y el resto de las construcciones parecen haber pasado por un campo de batalla de la II Guerra Mundial. Autoridades de la Isla de la Juventud y de Cuba, Ministerio de Cultura y todos los implicados por favor tomen cartas en el asunto, este lugar que todo cubano que llega a la isla sin dudas visita merece por su historia y legado ser salvado por le bien de la histora y de las futuras generaciones que tienen que seguir conociendo de su historica e importante existencia.
Elio Antonio
29/4/15 14:17
Creo que el asunto no es de hacer llamados a autoridades; como si las autoridades no tuvieran la responsabilidad mayor en él y solo, hubiese que acudir a ellas como último reducto por la salvación.En estos días se publicó en la web cubana similar pero sobre el Parque Lenin. Luego los comentaristas dejaron en claro que no solo el Lenin, padece la desidia en Cuba.Soy de la opinión que mezclar los asuntos culturales con los artísticos en un ministerio, es un craso error. Porque creo que los asuntos artísticos –que forman parte de la cultura como todos los demás asuntos-- son a los que más interés se les presta; mientras que a los monumentos y museos, entre otros muchos elementos de identidad cultural, son tirados al abandono, son presa de la mediocridad artística y arquitectónica para su construcción y desdichados por el insuficiente presupuesto e indolente personal asignado para su conservación. Somos una sociedad mediocre que descubrió que desde hace muchos años, estamos inmersos en un proceso de desvalorización moral. No obstante, espero que algún día con el dolor de lo ya perdido, para entonces, se revierta la desidia sobre nuestro patrimonio cultural.
Lourdes
24/4/15 11:59
Yo vivo aquí en la Isla y me da mucha tristesa en las condiciones que se encuentran las circulares y las demás construcciones. Unos años atras fueron utilizadas como almacenes por varias empresas y estaban mejor cuidadas, pero ahora es lamentable verdaderamente que una joya arquitectónica de esta embergadura la dejen perder, seguro cuando ya no queden ni los muros, entonces la van a querer restaurar,
Angelita
24/4/15 11:40
Mal llamado presidio modelo, ciertamente esta muy deteriorado,es necesario llamar a la reflexion las autoridades locales y nacionales al respecto al mantenimiento de una instalacion a la que hay que hecharle unos cuatos miles de pesos para su restauracion, pero en la Isla hoy se acomenten inversiones muy importante que son para el veneficio de la poblacion, necesario, si, urgente No
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