Infancia feliz en Cuba

“A todos las niñas y niños de mi país los exhorto a estudiar, a superarse y a hacer lo que Martí siempre quiso para ellos y es: no se cansen de amar nunca”, destacó en esta capital el doctor Eusebio Leal Spengler, en contacto exclusivo con Cubahora durante la presentación de la Edición del 2012 del Informe “El Estado Mundial de la Infancia”, que analiza la situación de las niñas y niños que crecen en un mundo urbano.

Durante su intervención, en la sede de la Asociación Cubana de Naciones Unidas (ACNU), el Historiador de la Ciudad subrayó que “hemos contribuido al concepto que la UNICEF tiene sobre la infancia, al haber sido capaces de generar un respeto social para el niño basado en el principio martiano de que ellos son la esperanza del mundo, porque ellos son los que saben amar (…) el hecho de que en la curva declinante —aparecida en un momento de las estadísticas de este Informe—, nuestro país se aleje de los primeros lugares que son los menos favorecidos y se acerque (en posición) a los que tienen el más bajo nivel de mortalidad infantil por cada mil nacidos vivos, o el hecho de que el nivel de vacunación o de escolaridad sea el que las estadísticas aquí refieren, está mucho más allá de toda cuantificación económica. (…) He tenido la suerte de recorrer el continente americano y entrar en lugares apartadísimos (…) y en todas partes los niños son iguales. Sienten el mismo apego, a veces a aquello que los mayores no entendemos. Y es que, a veces, para los niños es más importante un pequeño juguete, una pequeña muñeca, que un pan. Pero nosotros sí sabemos acerca de la importancia del pan. Y éste tiene que ser precedido por la justicia; si no hay justicia y equidad, el pan se convierte también en una limosna (…) Contra todo ello hay remedios, y es por lo que me enorgullece pensar que miles de jóvenes de Centroamérica vinieron a Cuba desde poblaciones indígenas a estudiar, a formarse en nuestro país (…) Este es el principio, entonces, de la utopía y de la justicia”.

En el análisis de dicho informe realizado por el doctor José Juan Ortiz, representante permanente de la UNICEF, se destaca que en un mundo donde más de la mitad de sus siete mil millones de habitantes habitan en zonas urbanas “los derechos a la supervivencia, salud, nutrición, educación y protección de los niños y niñas son ampliamente vulnerados en los entornos urbanos. Aunque las grandes y pequeñas ciudades ofrecen mejores oportunidades y accesos a la educación, la salud o la recreación, aquellos más desfavorecidos —incluidos los que viven en barrios marginales y en asentamientos informales, niños migrantes que viven o trabajan en las calles—, no pueden beneficiarse de estas oportunidades (…) Por tanto, las políticas públicas se tienen que basar en equidad, o en invertir más en quienes más necesitan y generar transformaciones inmediatas. Todo ello revela que la incidencia del desarrollo humano radica, ante todo, en la voluntad política”.

El Representante de la UNICEF, que próximamente cesará su misión de trabajo en nuestro país, afirmó en contacto exclusivo para Cubahora: “Deseo a los niños y niñas de esta bella Isla que continúen disfrutando del acceso a la Cultura universal que tienen en Cuba, el acceso a su calidad cultural, porque es un tesoro que no tiene la inmensa mayoría de los niños del mundo de poder compartir su cultura con otros niños. Les deseo también que continúen elevando su nivel cultural. Un pueblo culto es un pueblo libre, y esta es la esencia de la cubanía”.