Hace pocos días, aquí en Cubahora, publicamos un comentario titulado “Luchadores con el pie derecho” (por lo bien que dos de ellos le habían entrado al primer mes de este nuevo año). Y ahora lo parafraseamos: “Las judocas… también con el pie derecho”. Es algo muy esperanzador a la espera de una súper competencia.
- Consulte además: Luchadores con el pie derecho (+Video)
Bueno… no vamos a dejar a la espera a los lectores, no vamos a abusar de su paciencia: la súper competencia a la que nos referimos, a efectuarse durante el sábado y domingo próximos, es el Grand Slam de París, el cual suele considerarse un mundialito.
¿Cómo le podrá ir a los representantes de Cuba ya en una competencia más exigente?
Ahhhhh… si tuviera una bola de cristal al lado de mi computadora lo escribiría ahora mismo.
Una vez hecha toda la precisión anterior vamos a detenernos en la idea del título, en lo de “Las judocas… también con el pie derecho”: ellas tuvieron ahora un desempeño notable en el torneo de L’Aisne, también en Francia, a la espera ahí del Grand Slam.
Y se trató de su primer compromiso en lo que va de 2023.
Una fiesta
Las chicas alcanzaron 10 medallas, y, para mayor felicidad, tres de ellas fueron incluso de oro.
Y hasta nos han llevado a recordar el título de una novela de Ernest Hemingway: París era una fiesta.
En esta fiesta de las judocas cubanas en París se observó con la mayor de las sonrisas en el podio a las fogueadas Arnaes Odelín (división de los 57 kilogramos) y Maylín del Toro (63), a las cuales se unió una figura a seguir de cerca: Nairelis Fuentes (70).
Las de plata quedaron en los cuellos de Blanca Cabrera (52), Yuinisleidys Hernández (57), Santa Romero (78) y Dayle Ojeda (+78 kg), en tanto las de bronce las alcanzaron Zamarit Gregorio Vasconcelo (48), Lutmary García (63) e Idelannis Gómez (70).
Se debe escribir también que el Grand Slam de París será la primera competencia de real jerarquía en el nuevo almanaque que ya tenemos colgado en nuestras paredes.
Y debemos teclear, para seguir tratando de calentar los motores, y despertar el interés de los lectores de Cubahora, que en el Grand Slam de París vestirán sus judoguis cinco de nuestras diez medallistas.
Cinco hombres
¿Quiénes son esas cinco que el fin de semana, llenas de optimismo, tratarán de vencer los escollos y al menos avanzar lo más posible en ese difícil camino hacia el podio?
Se trata de Zamarit Gregorio Vasconcelo (48), Blanca Cabrera (52), Arnaes Odelín (57), Maylín del Toro (63) e Idelannis Gómez (70), según declaró el presidente de la Federación Cubana de Judo, Rafael Manso, al colega Raúl Hernández Lima, de Jit, el sitio oficial de nuestro organismo deportivo.
Nos hemos concentrado hoy en las chicas, claro, por lo de las diez medallas de hace pocas horas, pero no podemos dejar de recordar que en el Grand Slam de París debemos tener representación masculina (también con cinco figuras).
La comitiva de los hombres la integrarían Orlando Polanco (66), Magdiel Estrada (73), Jorge Martínez (81), Iván Silva (90) y Liéster Cardona (100).
No lo hemos dicho todo: aunque, como es lógico, las cifras pueden cambiar, se espera que se encuentren combatiendo 467 judocas (281 hombres y 186 mujeres) de 68 países de los cinco continentes.
¡Muy difícil!
Unos apuntes más…
No queremos ser ave de mal agüero, pero las reglas del periodismo aconsejan recordar cuál resultó el desempeño de los representantes de Cuba el año pasado en este Grand Slam.
Lo mejor, entre nuestros diez representantes, fue el séptimo puesto lugar de Iván Silva, quien en su palmarés tiene la medalla de plata en el Campeonato Mundial de Bakú (Azerbaiyán) 2018.
“En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme…” empezó Miguel de Cervantes su célebre novela Don Quijote de la Mancha.
Y ello puede aplicarse a aquel Grand Slam: el primer día los seis cubanos perdieron en su debut (incluida la sembrada en el organigrama Maylín del Toro), igual camino aciago al de tres de los cuatro de la jornada del adiós (la excepción, claro, fue Silva).
Bueno, se conoce que no llegaron al tope de sus posibilidades, y además eso ya es historia antigua…
Se piensa que ahora los cubanos, a diferencia de otras veces, llegan con una buena preparación, la cual incluyó importantes bases de entrenamiento en varios países de Europa. Pero… ¡es muy difícil subir al podio de un Grand Slam!
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