Tecnología y desarrollo sostenible: el camino por recorrer

Los habitantes de los Andes, en América del Sur, tienen una creencia interesante. Según ellos, los principales problemas que afectan al ser humano surgen porque este toma demasiado de la Pachamama —Madre Tierra— y, a cambio, la descuida y maltrata. De manera egoísta, acapara los recursos naturales sin dejar que se regeneren, sin preocuparse por las generaciones que le sucederán.

Esas generaciones ya están pagando las consecuencias. Un informe de Naciones Unidas explica que el año 2030 es el límite de tiempo que tenemos para lograr que el Cambio Climático sea reversible. ¿Qué desafíos conlleva esto? ¿Cómo podemos desarrollarnos en armonía con la naturaleza? ¿Qué papel juega la tecnología? ¿Cómo construir un futuro —cercano y lejano— de manera sostenible?

Desarrollo sostenible ¿Qué es?

El desarrollo sostenible se refiere a un enfoque para el crecimiento económico que busca satisfacer las necesidades actuales de la sociedad sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades. Esto significa que el desarrollo sostenible debe ser socialmente justo, económicamente viable y ambientalmente responsable.

En términos prácticos, el desarrollo sostenible implica la adopción de prácticas y políticas que minimicen los impactos ambientales negativos, promuevan la equidad social y la justicia, y fomenten la prosperidad económica a largo plazo. Esto puede implicar la reducción del consumo de recursos naturales, la promoción de energías renovables, el fomento de la educación y la capacitación, la promoción del comercio justo, y el fortalecimiento de los derechos humanos y la democracia.

Según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, “Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), también conocidos como Objetivos Globales, fueron adoptados por las Naciones Unidas en 2015 como un llamamiento universal para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que para el 2030 todas las personas disfruten de paz y prosperidad”.

Los ODS son 17 y abarcan desde la erradicación del hambre, la obtención de energía renovable y el cuidado del Medio Ambiente, hasta la lucha por la igualdad de género y contra la discriminación. Además, están integrados, o sea, reconocen que la acción en un área afectará los resultados en otras y que el desarrollo debe equilibrar la sostenibilidad social, económica y ambiental.

EL PAPEL DE LA TECNOLOGÍA

Vencer todas las metas impuestas parece casi imposible. Pero, gracias a los avances tecnológicos, el desafío se hace más pequeño. Durante las últimas décadas se han venido implementando un conjunto de técnicas que propician la sostenibilidad.

Hablamos, por ejemplo, de la energía solar fotovoltaica que convierte la luz del sol en energía eléctrica. Esta tecnología es limpia y renovable. No produce emisiones de gases de efecto invernadero y no utiliza combustibles fósiles. La energía solar se puede utilizar para alimentar hogares, empresas e incluso comunidades enteras. Si se logra combinar con otras energías limpias y erradicar, de una vez y por todas, el uso de los hidrocarburos contaminantes, estaremos indudablemente mejor.

Otra alternativa —que resolvería en parte la crisis por escasez de combustible en Cuba y el mundo— son los vehículos eléctricos. Estos medios de transporte utilizan baterías para almacenar energía y no emiten gases de efecto invernadero durante su uso. Además, la energía que utilizan para cargar sus baterías puede provenir de fuentes renovables, como a las que nos referimos anteriormente.

¿Sabías que se puede combinar la agricultura con inteligencia artificial? Aunque resulte difícil de creer, se denomina agricultura de precisión y es una tecnología que utiliza datos y sensores para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad en la producción de alimentos. Permite a los agricultores optimizar el uso de los recursos, agua y fertilizantes, reducir los desperdicios y aumentar enormemente. El futuro está aquí.

- ¿Y desde Cuba?

- En concordancia con el macroproyecto de la ONU; fue aprobado, en el año 2017, un plan de estado contra el cambio climático. ¿Su nombre? “Tarea Vida”. Se trata de un programa integral que aborda el tema desde todos los frentes. Nosotros lo explicamos desde un curioso ejemplo, anterior a la Tarea Vida, pero que se integró a ella.

El 86% de las 505 playas cubanas se encuentran erosionadas y se ve un retroceso alarmante en la línea de costa de 1.2 metros anuales. Este deterioro del litoral afecta directamente a la flora, fauna y población local, pues elimina la única barrera protectora ante las penetraciones del mar, la duna de arena.

En Cuba existe un proyecto que se dedica a restaurar estas playas. Gamma, una empresa que forma parte del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), se dedica a la recuperación integral de playas arenosas.

El Dr. Cs. Ernesto Tristá, fundador de la División de Ingeniería Costera de la empresa, explica que “el proceso de erosión ocurre con el tiempo. La arena que se pierde bajo la acción de las olas, corrientes marinas y demás factores naturales va a parar, en la mayoría de los casos, a lugares denominados

depósitos de préstamo, que pueden encontrarse a cientos de metros de la costa. La recuperación de la playa comienza, justamente, por estas zonas’’.

Los equipos de buceo evalúan la composición de los granos de arena y su posible uso. Entre los indicadores que miden se encuentran: el tamaño, los restos de conchas y los metros cúbicos disponibles en el lugar. Si la arena cumple con los estándares de calidad requeridos, entonces proceden a su extracción y recolocación en la playa.

Proteger los inmuebles situados en la primera línea de costa e incrementar el espacio físico de recreación, así como motivar el desarrollo ecológico sustentable de las actividades turísticas, forman parte fundamental de los objetivos de la institución, añade el ingeniero Ernesto B. Matamoros, especialista comercial de Gamma.

Así, con una visión integral, se pueden dar pasos en dirección a la total sostenibilidad.

DESDE TODOS LOS FRENTES, DE LA ECONOMÍA A LA EDUCACIÓN

Debemos repensar nuestra vida para funcionar de la mejor manera. Dejar atrás actitudes y hábitos nocivos para el Medio Ambiente y la sociedad. ¿Cómo? No es difícil. ¿Has escuchado de la economía circular?

La economía circular es un concepto que se refiere a un modelo económico y productivo que se basa en la reducción, reutilización, reciclaje y renovación de los recursos naturales y materiales. Según BBVA, la idea es que los recursos no deben ser utilizados de manera lineal (extraer, producir, consumir y desechar), sino que deben ser reintroducidos en el ciclo productivo para prolongar su vida útil.

En otras palabras, la economía circular busca diseñar sistemas que permitan reducir el impacto ambiental y el desperdicio de recursos, así como fomentar la eficiencia y la sostenibilidad en los procesos productivos. Este enfoque es una alternativa al modelo económico tradicional de "usar y tirar" que ha sido predominante en las últimas décadas. Se puede empezar de a poco y desde abajo ¿Te atreves a aplicar este sistema en tu vida? Déjanos tu opinión en los comentarios.

De poco o nada sirven estas tecnologías y consejos si no van acompañadas de una formación adecuada, consecuente y, sobre todo, humana. Y ni hablar de la necesidad de una planificación económica impecable. Los que saben ya dieron su veredicto, podemos salvarnos, pero el tiempo es escaso, se marcha a prisa y queda mucho por hacer. Vamos a devolverle, a la Pachamama, lo mucho que le hemos quitado.