Trata de personas, Tolerancia Cero en Cuba

La trata de personas es un grave delito y violación a los derechos humanos que afecta a millones de personas en todo el mundo. Según el informe sobre este flagelo a nivel mundial en 2022, publicado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) con datos de 2020, la pandemia y crisis mundiales han hecho que la detección de este tipo de crímenes haya disminuido y por lo tanto que los riesgos sean mayores.

“Las tasas de detección cayeron un 11% en 2020 y las condenas se desplomaron un 27%, lo que ilustra una ralentización mundial de la respuesta de la justicia penal a la trata”, refiere el documento. Ante esta situación la ONU hace un llamado a los gobiernos, las fuerzas del orden, los servicios públicos y la sociedad civil para evaluar y mejorar sus esfuerzos para fortalecer la prevención, identificar y apoyar a las víctimas, y poner fin a la impunidad.

En el caso cubano, la política ante este tipo de crimines ha sido de Tolerancia Cero, de acorde a los principios de la Carta de la ONU, el derecho internacional y las leyes nacionales.

Organizaciones de la sociedad civil cubana, junto al gobierno y la Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU), diseñan e implementan políticas públicas que refuerzan en el país la prevención y el enfrentamiento de la trata de personas y delitos asociados. Entre ellos se encuentra el Plan de Acción Nacional para la Prevención y Enfrentamiento de la Trata de Personas y la Protección a las Víctimas (2022-2024), que es la herramienta fundamental para abordar ese delito.

Entre las acciones que se realizan en el país para evitar y combatir estos delitos se encuentra el intercambio de información con organizaciones internacionales como la Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL), organismos homólogos de países de la región y europeos y el sistema de las Naciones Unidas.

Además, según aparece contemplado en el Informe Nacional de Cuba sobre la Trata de Personas 2021, se mantiene una atención especializada a las víctimas, así como a aquellas personas en situación de mayor vulnerabilidad como niños, niñas, adolescentes, adultos mayores y personas en situación de discapacidad.

Como acciones de prevención en el plan nacional se incluye capacitación, divulgación, coordinación y cooperación entre las instituciones estatales, la sociedad civil y las comunidades; aumentar la percepción de riesgo en la población; incrementar su participación en la alerta a este delito y potenciar la capacitación sobre la trata de personas entre los profesionales y trabajadores de entidades públicas y organizaciones no gubernamentales. También existen protocolos para la atención específica a los comportamientos relacionados con la prostitución y la violencia.

En este informe, el más reciente hasta el momento, se informó que se identificaron en 2021 unos 10 casos con rasgos típicos de trata de personas. De ellos “8 corresponden a la modalidad de trata con fines de corrupción de menores y 2 de ellos incluyen la modalidad de trata con fines de proxenetismo”, subraya.

“Se identificaron 10 víctimas, todas ellas niñas. Las sanciones penales para los victimarios oscilaron en el rango de 5 a 20 años de privación de libertad. De los 12 acusados identificados, 5 son hombres y 7 son mujeres”, explica sobre las víctimas y acusados. Aunque cualquier delito de este tipo es lamentable, las cifras mostradas evidencian una baja incidencia en el país debido a acciones preventivas y de enfrentamiento. No obstante, se deben reforzar las acciones para prevenirlos y proteger a los más vulnerables en este tipo de hechos.

Ante todos estos esfuerzos y su apoyo a la política de Tolerancia Cero en cuanto a la trata de personas, Cuba denuncia ante los organismos internacionales los injustos intentos de Estados Unidos de calificar al país como que apoya este flagelo. Sobre todo, en su propósito de desacreditar la cooperación internacional de Cuba, el gobierno de la nación norteña ha clasificado a Cuba dentro del Nivel 3 (la peor clasificación) en el Informe sobre Trata de Personas que publica el Departamento de Estado de EE.UU. “Esta decisión tomada sobre argumentos falsos, afecta seriamente a Cuba, calumnia al sistema de salud pública cubano y su personal altamente respetado en el mundo e impone obstáculos para el desarrollo de acciones de intercambio entre ambos países.”, expresó el Ministerio de Relaciones Exteriores cubano.

La humana labor de los médicos cubanos, de prestigio en el mundo y en consonancia con principios de cooperación internacional, no debe ser usada con fines políticos, y tampoco un tema tan sensible como la trata.