Contemporánea en su tradición a los 77 años

Muchas horas ha transmitido desde que el 11 de julio de 1945 se escuchó por primera vez la emisora, hoy provincial, Radio Sancti Spíritus, bautizada en la fundación como Radio Nacional.

No debió ser fácil a sus dueños hacer prosperar la planta radial hasta ubicarla en una esquina del céntrico parque Serafín Sánchez, y queda entre lo no muy conocido, detalles de cómo debieron lograr el éxodo hacia ella del mejor personal de la emisora La Voz del Yayabo, que tenía el indicativo CMHB.

Quizás haya quien recuerde y pueda contar más sobre cómo aquella radioemisora fundada el 12 de noviembre de 1933 fue perdiendo trabajadores captados por la entonces recién creada a partir de un obsoleto equipamiento desactivado en Trinidad.

Sería interesante saber por qué se demoraron un año para obtener el permiso de traslado de unos 70 kilómetros hasta Sancti Spíritus, de aquel obsoleto equipamiento almacenado durante varios años en el actual edificio del Museo Romántico trinitario.

Desde entonces hasta cumplir 77 años de edad, sus 10 kW de potencia le permiten escucharse en zonas del mar Caribe, una porción del oeste de Ciego de Ávila y el sur de Cienfuegos, pero durante muchos años solía escucharse con dificultad en determinados momentos, al final del poblado de Cabaiguán, distante unos 25 kilómetros.

Confiado en que el alcance era escaso, el conductor de un programa musical se sorprendió cuando fue a un lejano territorio cuya emisora reproducía canciones en el mismo orden en que él las ubicaba.

Calló. No dijo nada, pero se dio cuenta de que grababan y reproducían como propio, su programa. Al pasar el tiempo, le preguntaron por qué de vez en cuando interrumpía alguna melodía para reiterar que era un espacio de Radio Sancti Spíritus. Un día confesó que era para evitar la “piratería”.

También había otro popular programa musical al que su conductor creó una sección cuya duración le permitía atravesar el parque Serafín Sánchez, tomarse una humeante taza de café y retornar al micrófono, pero un buen día el espacio de Los tres pegaditos (tres melodías seguidas, pero presentadas de una sola vez) no le dio tiempo…

La sala de control de la emisora es la única del país que cuenta con estos equipos aun funcionando para el monitoreo. (Oscar Alfonso Sosa/Cubahora)

El 29 de abril de 1990 se trasladó a lo que bien llaman el Palacio de la Radio en Cuba, para cuyo proceso de construcción designaron un inversionista que tomó experiencias de la ejecución de una recién terminada en esos días, por lo cual esta quedó sin defectos.

La emisora que en 1962 adoptó el nombre de Radio Sancti Spíritus, comenzó la década los 90 con recursos más modernos que sustituyeron, por ejemplos los ruidosos teletipos que en el anterior local no encontraban dónde colocar, pero no podían prescindir de ellos porque servían para recibir los despachos cablegráficos nacionales e internacionales, así como notas de los corresponsales.

Casi al finalizar esos duros diez años, en junio de 1999, su denominación CMHT traída desde Trinidad, se cambió por la de CMGL y logró la fidelidad de una audiencia que por estar pendiente de Radio Sancti Spíritus contribuyó a acciones de preservaciones de vida y bienes, así como de la imprescindible calma y tranquilidad necesarias en momento de tensión y peligro.

Aunque se corrió la voz de persona a persona en el municipio de Jatibonico, la fuente principal de información fidedigna la dio la emisora aquel 14 de junio de 2002 al informar sobre el peligro de una posible ruptura de la cortina de la presa Lebrije, cuyas aguas podrían desbordarse hacia el poblado.

Más de 35 000 personas fueron evacuadas y sus bienes excelentemente custodiados, en lo cual contribuyó decisivamente Radio Sancti Spíritus al mantener a la población al tanto de cada detalle, así como de las instrucciones de cómo debía proceder cada uno.

Ante la premura por salir de la zona de posible inundación, no fueron pocos los que perdieron contacto con sus familiares, vecinos y amigos, pero la emisora les proporcionó tranquilidad al transmitir los mensajes de quienes quisieron saber de alguien, así como de los que avisaban dónde estaban y decían la situación en que se encontraban.

También pudiera estar quedando pendiente un estudio sobre cómo está emisora contribuyó al nacimiento y desarrollo del sentido de pertenencia de todos sus habitantes, que antes pertenecieron a las antiguas regiones de Ciego de Ávila, Escambray, Caibarién y Santa Clara.

Eran oyentes de otras emisoras y sus hábitos estaban arraigados hacia otras ciudades que eran capitales provinciales o cabeceras municipales, y según Radio Sancti Spíritus fue aumentando su potencia, debió contribuir a ese sentimiento de amor hacia su terruño que hoy tienen los espirituanos en general.

La emisora provincial cuyo germen estuvo en la CMHT nacida en 1938 en Trinidad es una de las demostraciones del valor de una emisora en momentos especiales, lo cual respalda el acierto de crear la Cadena Provincial Radio Sancti Spíritus conformada por las emisoras municipales: Radio Vitral (Sancti Spíritus), La Voz de Cabaiguán (Cabaiguán), La Voz de Yaguajay (Yaguajay), Radio Jatibonico, Radio Trinidad (Trinidad) y Radio Fomento (Fomento), así como estudios municipales de radio con periodistas.

En este aniversario de la “Contemporánea en su tradición” como afirman en su slogan, lleguen las merecidas felicitaciones, pero también la gratitud de quienes allí recibieron todas las facilidades para trabajar en sus funciones como corresponsales de los periódicos Vanguardia, Granma, Juventud Rebelde, de la entonces Agencia de Información Nacional, o eran periodistas y fotógrafos enviados especiales a la región y después provincia de Sancti Spíritus.