2026, un Mundial como ninguno (+Infografías)

El fútbol, ese deporte que tanto nos apasiona, al parecer nunca se acaba. La Telstar18 apenas rodaba por las canchas rusas y ya la máxima entidad del balompié (FIFA, por sus siglas en inglés) daba a conocer la sede de la XXIII edición de la Copa del Mundo a celebrarse en 2026.

Tras la votación de 203 federaciones, la propuesta conjunta de México, Estados Unidos y Canadá resultó ser la más atractiva para albergar el mayor evento futbolístico del planeta. Con 134 votos a favor, la coalición norteamericana superó por amplio margen a Marruecos, el otro candidato, privándole el anhelo de convertirse en la segunda nación africana en organizar un evento de este tipo.

La disputa por acoger tan prestigiosa competición comenzó en agosto de 2017 con la presentación de las candidaturas. Los directivos marroquíes no escatimaron argumentos a la hora de defender su aspiración, al plantear que existía un fuerte interés en desarrollar un Campeonato Mundial. Además, apelaron a la importancia del fútbol para el desarrollo económico y social del continente y, por si fuera poco, recordaron que su cercanía con Europa facilitaría el traslado de las aficiones, así como las transmisiones de las principales televisoras.

Sin embargo, mientras el triunvirato pronosticó ingresos récords de hasta 11 mil millones de dólares, la federación marroquí previó “solamente” ganancias cercanas a los 7 mil millones. Aspecto este que de seguro inclinó la balanza a favor de los de la región americana, pues, según hemos visto, para la FIFA de Gianni Infantino, la rentabilidad económica debe ser el principal estandarte en la gestión de un Mundial.

Las naciones sede propusieron un total de 23 ciudades, de las que se deberán escoger 16. Canadá aspira verse representada con tres urbes: Edmonton, Montreal y Toronto; México con otras tres: Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey;  mientras que, como de costumbre, Estados Unidos se lleva la mayor porción del pastel al presentar más de una decena de emporios entre los que destacan Boston, Houston, San Francisco, Washington, Kansas City y Miami.

En 2026, el estadio Azteca pudiera convertirse en la primera instalación en albergar tres partidos inaugurales de Copas del Mundo (Foto: As.com).

De igual manera, los de las barras y las estrellas salieron airosos en la repartición de partidos, con 60, incluidos todos los enfrentamientos a partir de cuartos de final, dejando ofrecer a mejicanos y canadienses solamente diez encuentros. La última vez que Norteamérica sirvió como punto de referencia de un Mundial de Fútbol fue en 1994. No obstante, para Estados Unidos la experiencia más cercana como anfitrión fue la Copa América Centenario de 2016, la cual no contó con el beneplácito de todos, debido, en buena medida, a las condiciones de los terrenos de juego y a garrafales errores organizativos.

Una cita peculiar

El campeonato mundial que se desarrollará dentro de ocho años, no solo pretende pasar a la historia por contar por primera vez con tres países como organizadores, sino también por ampliar a 48 el número de selecciones participantes en la competición, quedando distribuidos inicialmente en 16 grupos de tres equipos.

La fase de dieciseiavos de final es una de las tantas novedades de la XXIII edición de la Copa del Mundo (Foto: FIFA.com).

De acuerdo con la “Guía sobre la Selección del Organizador de la Copa Mundial de la FIFA 2026”, la base para tomar la decisión de extender el número de naciones fue un informe en el que se tuvieron en cuenta factores como el equilibrio deportivo, la calidad de la competición, los efectos en el desarrollo del fútbol, las infraestructuras, las proyecciones económicas y las consecuencias asociadas a la organización del torneo.

Gracias a esto, 46 plazas directas serán distribuidas entre las distintas confederaciones y las dos restantes se disputarán a través de un nuevo sistema de repechaje en el que seis elencos participarán en una eliminatoria a partido único. Las novedosas medidas han contado con la aceptación de la inmensa mayoría, pues se considera que esta será una oportunidad para lograr mayor calidad competitiva y, por ende, un mejor espectáculo.

Con la ampliación del número de selecciones que podrán asistir al Mundial de México-Estados Unidos-Canadá, se garantiza una mayor competitividad (Foto: abc.com).

En definitiva, aún queda mucho camino por recorrer antes de llegar a la cita de 2026. De momento, solo nos queda disfrutar cada instante de lo que acontece desde el pasado 14 de junio en Rusia y prepararnos para lo que pueda ocurrir en Qatar dentro de cuatro años.