Otra vez el diestro de Pinar del Río Raidel Martínez está envuelto en una temporada de lujo en el principal torneo del béisbol japonés, considerado el segundo en caché del mundo, después de las Grandes Ligas estadounidenses.
Este fin de semana firmó su trigésimo juego salvado, con el cual asumió el liderazgo de la Liga Central, y aunque ese dato de por sí es noticia, lo más asombroso es que su club, Dragones de Chunichi, ocupa el último lugar en la tabla de posiciones.
Raidel ha sido protagonista en 41 de los 43 éxitos de su equipo. A los 30 rescates, suma tres victorias y ocho partidos aguantados, en 44 actuaciones (43 inning trabajados).
¿Cómo lo ha logrado? Con dominio total. Solo le han anotado una carrera limpia, para efectividad de 0.21, el WHIP(embasados por inning) es de 0.76, con 58 ponches y apenas cuatro bases por bolas.
El mejor latino de la campaña pasada, premio otorgado anualmente en el circuito nipón, sostiene una fuerte puja con dos cerradores japoneses por el puesto de vanguardia en el ranking de los matadores.
Le saca un salvamento a Kazuto Taguchi, de las Golondrinas de Yakult, y dos a Suguru Iwasaki, pícher de los Tigres de Hanchin, cuyos equipos aparecen ubicados por encima de los Dragones.
En 2022 Raidel fue calificado como el mejor cerrador de todo el campeonato japonés, cuando encabezó el escalafón de la liga central con 39 tapones.
Adicionalmente, registró un galáctico promedio de carreras limpias de 0.97 y dejó marca de 4-3, con nueve cinco ¿qué significa? partidos aguantados, 62 ponches y 12 boletos en 55.2 entradas de actuación.
Participó en la Serie de las Estrellas e influyó en nada menos que el 73 por ciento de las victorias de su equipo a lo largo del año.
Ahora va registrando una labor más efectiva y contundente aun, con protagonismo en más -del 90 por ciento de los triunfos de su club cuando la temporada está ya en su segmento final. ¿Cuáles serían sus números con un club exitoso, que ofreciera mayores oportunidades al bullpen de trabajar con ventajas en el marcador?
El pinareño suma 121 rescates y 290 ponches desde que firmó en 2018 en el béisbol japonés, siempre con la organización de Chunichi.
En seis temporadas de las mayores con los Dragones ha trabajado en 239 juegos (249 inning) con saldo de 12 victorias y 15 derrotas, 34 partidos aguantados, solo ha caminado a 60 oponentes y su efectividad es de 1.85.
Según el experimentado entrenador cubano José Manuel Cortina, Raidel es un joven muy enfocado en su trabajo, en permanente desarrollo en busca de la perfección de sus picheos para aumentar la efectividad.
A sus poderosas herramientas, que incluyen rectas próximas a las cien millas por hora, suma su capacidad de aprendizaje, armas que lo convierten en un lanzador ideal para la función asignada en el bullpen.
¿Será nuevamente el mejor cerrador del béisbol profesional japonés? ¿Por segundo año consecutivo liderará a los taponeros? ¿Superará su marca de la temporada anterior?
El hecho de aparecer a la vanguardia de los matadores con un club sotanero confirma que Raidel tiene potencial para imponer, incluso, récord de más salvamentos en Japón, que actualmente es de Dennis Sarfate (54) con los Halcones de SoftBank, en 2017.
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