Play off de Béisbol: detrás de las emociones

Sin que sean los rostros definitivos, Matanzas y Villa Clara tienen hoy la mejor cara en los play off de la 52 Serie Nacional, tras la igualada a dos victorias entre yumurinos y espirituanos en una semifinal, y el tercer triunfo de los naranjas sobre los siempre peligrosos elefantes cienfuegueros en el otro match por el pase a la discusión del título.

Tal y como muchos pronosticaron los “cocodrilos” yumurinos se sacudieron de las dos derrotas iniciales en el estadio José Antonio Huelga y mordieron con apretada ofensiva a unos gallos espirituanos que siguen erráticos a la defensa, en tanto sus corazones parecen sufrir los mismos espasmos que anteriores play off, cuando su tríada fundamental Cepeda-Yulieski-Eriel deja inconformes a sus seguidores, a pesar de su probada calidad en la temporada.

El juego matancero lleva implícito también un componente emocional alto, pues sus jugadores, encabezados por Joel Suárez en el box y José Miguel Fernández con el madero, solo tienen en su mente superar el bronce de la pasada edición, aunque en su nómina no existan grandes nombres y su mentor Víctor Mesa se aferre, en ocasiones, a un juego más dinámico y a veces fuera de todo libro de dirección.

Para el regreso a tierra espirituana el próximo jueves, sea cual sea el resultado del quinto choque, Matanzas sigue teniendo las mayores opciones de imponerse, no solo por la recuperación psicológica que ha demostrado ese equipo, sino también por el juego colectivo y alegre, en el que hoy brilla Guillermo Heredia, mañana Yurisbel Gracial, al otro día Manuel Benavides y así sucesivamente, como piezas claves de un rompecabezas beisbolero, que ojalá muchas selecciones pudieran imitar.

Muy diferente es el pronóstico para los finales de la serie Villa Clara-Cienfuegos. Luego de un quinto juego en el que el arbitraje enseñó una falla imperdonable (fue quieto el robo de la tercera base en el noveno inning del corredor sureño) y la lluvia conspiró hasta el final en detrimento de la velocidad que gusta imprimirle Iday Abreu a su conjunto, ahora la balanza se inclina hacia los naranjas.

Dos razones de peso sustentan esta apreciación. El sexto pleito lo abrirá el mejor serpentinero de estos play off, Freddy Asiel Álvarez, capaz de recetarle ya dos blanqueadas a los elefantes en esta semifinal y acostumbrado a lanzar bajo la presión más grande con una flema de la que carece su rival, el derecho Noelvis Entenza, a quien todavía la afición desea verle ganar un juego bueno, el que no se puede perder.

El estadio 5 de Septiembre puede ser una cueva para enterrar a la tropa de Ramón Moré si Cienfuegos logra armar una alineación en la que Erisbel Arruebarruena acompañe el protagonismo de José Dariel Abreu, William Luis y Pavel Quesada, al tiempo que los relevistas comprendan lo importante que es preservar una ventaja, por mínima que esta sea.

Como siempre gustan de poner en aprietos al periodista, puedo resumir que hemos visto nueve juegos peleados, con preponderancia para el pitcheo, con finales espectaculares, con conferencias de prensa todavía muy rígidas para algunos managers y jugadores y con abuso del toque de bola para avanzar a los corredores.

Sigo apostando a una final entre matanceros y cienfuegueros, aunque estos últimos parecen envenenados con jugo de naranja. En cambio, los primeros andan inspirados para desplumar a unos gallos que están todavía en pelea.