Intento tras intento, ora con bajas temperaturas, ora con un calor endemoniado, el cubano Erick Hernández, con 52 años de edad, muestra sus reales dotes en las modalidades de dominio del balón. Este sábado, el capitalino impuso otro récord mundial, al mantener a su “preferida” pelota Telsatar 18 durante tres horas, dos minutos y tres segundos sin que cayera al suelo, sentado en el lobby del hotel capitalino Parque Central. Para mayor complicación, en esa prueba tenía atados 1.30 kilogramos de peso en los tobillos.
Así, el bien llamado Dominador cubano por la cantidad de récords que posee homologados por el Libro Guinness, pulverizó la anterior marca que ostentaba su coterráneo Luis Carlos García, la cual era de una hora, 32 minutos y un segundo. O lo que es lo mismo a decir, duplicó ese anterior registro, lo cual crea una gran expectativa para las venideras “pugnas” con su joven rival.
Realmente, no dudé que Erick lograse fructificar en este nuevo intento. Pero como él mismo acotase a Cubahora tras la finalización, pensé que no estaba bien preparado sicológicamente, pues su madre, a quien se lo dedicó, había fallecido hace apenas dos semanas y eso podría costarle mucho para signar una decorosa cota.
Según tenía previsto, quería llevar la marca hasta una hora y 40 minutos aproximadamente. Pero el dominador capitalino mostró, una vez más y bajo los diversos tonos musicales que escogió para escuchar durante su “travesía” con el balón, su potencial técnico y físico.
A mí siempre se me dificulta la primera media hora de cada intento; para este récord. Pero cuando calculé que andaba por los 40 minutos, y comprobé que me sentía muy bien físicamente, ya sabía que lo tenía logrado. Además, ya lo había realizado en los entrenamientos; pero la parte sicológica era la que me afectaba, explicó.
Erick afirmó que, en este intento, sufren mucho los músculos del cuádriceps y abdomen, aunque también hay incidencia de la espalda alta, los hombros y el trapecio, que fueron en los que concentró su preparación desde el pasado mes de mayo.
Cuando los jueces dieron a conocer el tiempo oficial, los especialistas comentábamos no solo lo difícil que sería para su rival Luis Carlos –a quien Erick (casi) le dobla la edad-, poder hacerle frente en el récord que intentará el venidero mes, en el Hotel Palco. Pero hay más. Si su joven contrincante consiguiese batirlo, entonces se le complicaría mucho a Erick volver a tomar la punta
La idea es tratar de buscar rivalidad, que es lo que trae el desarrollo de nuestra modalidad; y eso es lo que yo hago con estos intentos. Luis Carlos es un joven muy talentoso. Yo sé que lo puede hacer y solo tiene que proponérselo, trabajando con ahínco en los entrenamientos, explicó Erick.
Jamás me molestó el peso que tenía puesto en los tobillos, porque entreno todos los días y hago carreras con esa indumentaria encima. Además, el trabajo de mi fisioterapeuta fue muy bueno.
El avezado recordista mundial en dominio del balón, explicó a Cubahora que, para el próximo mes, intentará otro récord mundial en la modalidad de sentado y solo con la cabeza, e igualmente les pondrá pesos a sus tobillos.
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