A sus 42 años, casi la mitad jugando al más alto nivel en los campeonatos cubanos de béisbol, Edilse Silva sacudió este martes su jonrón 200, un batazo con el que su equipo, Holguín, sentenció por Súper KO a Sancti Spíritus.
Edilse empezó la temporada con 192 bambinazos y se sabía que era cuestión de tiempo su ingreso en el club-200, pero él mismo dijo a la prensa local que no estaba preocupado por los ocho palos de vuelta entera faltantes. «Esos batazos salen solos», aseguró.
Con él suman 43 bateadores que han sacudido esa cantidad de bambinazos, un escalafón que domina históricamente el Tambor Mayor, Orestes Kindelán, cuyos 478 cuadrangulares parecen inalcanzables por ahora.
Detrás de Kindelán aparecen Lázaro Junco (405) y Omar Linares (404), únicos que han empinado 400 pelotas en los torneos élites de nuestro béisbol.
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Entre los activos, Frederich Cepeda encabeza la lista con 350, muy lejos de Alfredo Despaigne (263), cuyos más recientes jugó en Japón donde largó 184 palazos. Es tal su huella que lo han llamado de urgencia para que reasuma su protagonismo con los Halcones de SoftBank.
Detrás de ellos aparece el legendario Dánel Castro (250), quien se resiste a abandonar el béisbol y con 29 campañas sigue poniendo números históricos. En cuarto puesto se encuentra Yordanis Samón (215) y a seguidas aparece Edilse.
Pero los jonrones de este último tienen su historia. El estadístico Benigno Daquinta, de los más seguros en la compilación de datos sobre nuestras series nacionales, cuenta que el primero lo pegó el 30 de diciembre de 2004 con el traje de Santiago de Cuba frente al lanzador Henry Portuondo de Holguín en el estadio Calixto García de los Cachorros.
Llegó a 50, el 21 de febrero de 2010 jugando para los propios Cachorros en el parque bayamés Mártires de Barbados ante Yoalber Torres.
Sumó el bambinazo cien como refuerzo de Villa Clara, equipo con el que ganó el oro en la campaña de 2013, el 9 de abril de ese año en el Latinoamericano ante el tunero Carlos Juan Viera, que por entonces también vestía el uniforme de Industriales.
Al 150 arribó en el José Ramón Cepero el 12 de noviembre de 2018 cuando había sido convocado por los Tigres para blindar a los avileños, su víctima fue un lanzador de Villa Clara.
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Ahora tocó al pícher espirituano Yohanny Diosmel Hernández ser la víctima del batacazo 200, nuevamente con el uniforme de los Cachorros, con los cuales dice que va a terminar su carrera deportiva.
Edilse no parece tener predilección por ninguno de sus jonrones. Todos, comenta, son fundamentales; no salió a buscar ninguno, pero recuerda mucho uno a Pedro Luis Lazo, el único que le pegó al Rascacielos pinareño; el cien a Viera, y lógico, el primero, ese nunca se olvida.
Ahora el slugger anda enfocado en ayudar a su equipo para que clasifique a la postemporada. Con saldo de 31-31 están en noveno lugar en el ordenamiento. O sea, es el primero en la lista de espera, y como está la campaña de pareja, de todo puede suceder aún cuando faltan dos subseries y los juegos suspendidos y sellados.
En eso pone sus energías y pensamiento Edilse, quien luce en su currículo cinco títulos: cuatro con las Avispas indómitas y uno con los Azucareros de Villa Clara.
En lo individual, sin proponérselo, podría seguir mejorando su ubicación en el ranking. Agustín Marquetti y Oscar Machado (ambos con 207) están al alcance de su bate.
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