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viernes, 22 de noviembre de 2024

A mi no me gusta el fútbol pero…

Voy a extrañar "De Zurda", el programa que TeleSUR transmitió diariamente desde poco antes que comenzara la Copa del Mundo de Fútbol en Brasil...

Iroel Eri Sánchez Espinosa en Exclusivo 15/07/2014
10 comentarios

…voy a extrañar De Zurda, el programa queTeleSUR transmitió diariamente desde poco antes que comenzara la Copa del Mundo de Fútbol en Brasil, con la conducción de Víctor Hugo Morales y Diego Armando Maradona.

Desde un estudio que se veía claramente fue montado en condiciones de campaña, De Zurda -sin acceso al video de los partidos, sólo con las animaciones de la agencia AFP y algunas fotografías- logró un producto que, a mi juicio, debe estudiarse en las facultades de comunicación y ser tema de doctorados y maestrías donde quiera que se aspire a que el talento y la imaginación le ganen la batalla al dinero de las grandes corporaciones audiovisuales.

Es obvio que detrás de un espacio así estuvo un equipo que cuidó todos los detalles. Sólo de esa manera el poder de convocatoria de Maradona, el amplio diapasón temático que permite abordar la cultura de Morales y el altísimo nivel de conocimiento futbolístico de ambos, hicieron posible que en De Zurda la diversión, el análisis deportivo, la intencionalidad política y la vocación por visibilizar a las mayorías sociales de Latinoamérica, alcanzaran  una efectividad comunicacional pocas veces vista.

Las coberturas deportivas son la mayoría de las ocasiones un pretexto para enajenar a las audiencias de las realidades del planeta. Sin embargo, De Zurda demostró que no necesariamente tiene que ser así, sin dejar de ser alegre y entretenido. Desde el texto de la canción tema y las imágenes de su correspondiente video clip, hasta los rostros de los enfavelados en Rocinha, los vendedores ambulantes, los graffitis en las calles de Brasil, o los jóvenes villeros argentinos alojados solidariamente en lugares humildes en Río o Sao Paulo, el espacio de Diego y Víctor Hugo se adentró en los escenarios  que otros suelen ignorar.

En contraste con las blanqueadas minorías que pueden pagar la entrada a los estadios, vimos expresarse en De Zurda un Brasil mestizo, muchas veces sumergido en la pobreza, a pesar de las transformaciones impulsadas bajo los gobiernos del Partido de los Trabajadores. En el otro extremo, sufrimos en la revista Buenos Días -que como toda la Televisión Cubana sí tuvo acceso a la señal de video del mundial- la burla racista de un comentarista deportivo contra uno de los técnicos del estudio. No fue la única paradoja. Si nuestros comentaristas elogiaron las ventajas de jugar en planteles pertenecientes a las ligas europeas, Maradona testimonió las desventajas de armar un equipo con jugadores que tienen que cruzar el Atlántico para entrenar junto a sus compatriotas, frente a aquellos que sólo deben viajar una o dos horas en trenes de alta velocidad en Europa para estar a la orden de su Director Técnico.

Es también de aplaudir el modo en que el programa de TeleSUR aprovechó las posibilidades que brindan el correo electrónico y las redes sociales en Internet para enriquecer su propuesta, interactuar con los televidentes, e incorporar con inmediatez los contenidos generados por ellos. Utilizando esa comunicación, De Zurda incluyó saludos de grandes líderes políticos como Fidel, Mujica, Cristina Fernández, Evo Morales, Lula Da Silva y tuvo en su estudio a Rafael Correa. Igualmente, abordó el tema del terrorismo contra Cuba desde Estados Unidos o el papel de los médicos cubanos en Brasil y nos enseñó que el desenfado es no pocas veces un mejor aliado que la solemnidad para la efectividad de un mensaje, por noble que este sea.

Sin esconder su vocación política, De Zurda logró una alta audiencia entre los jóvenes cubanos. Lo he comprobado en mis hijos y sus amigos. Deben haber infartado quienes dicen que los jóvenes no quieren oír hablar de política y los vieron criticar una ¿entrevista? a Leo Messi en la televisión cubana demasiado parecida a la que le haría la revista Hola, para luego contemplar al mismo Messi en De Zurda solidarizándose con las Abuelas de la Plaza de Mayo, o al equipo argentino pidiendo devuelvan a su país las Islas Malvinas, algo por lo que -según se informó- la FIFA les ha abierto un proceso disciplinario.

A propósito, me pregunto si los que dicen que estos futbolistas son iguales a los cubanos que juegan en las Grandes ligas del beisbol estadounidense, le pedirán a aquellos que exijan la devolución del territorio ilegalmente ocupado en Guantánamo, una causa que no nació con la Revolución de 1959 y que serviría para demostrar que en Estados Unidos se puede ser millonario y libre, o al menos patriota, en el tema cubano.

Otra cosa que marcó De Zurda fue la sistemática denuncia de las arbitrariedades, la corrupción y el comercialismo extremo de la FIFA, que en su afán de obtener dinero no vaciló en vestir a los niños que acompañaron a los jugadores a los terrenos de fútbol del mundial como la mascota de Mc Donalds. Ante ello, algunos se quejaron: “¡qué politizado es de Zurda!”, como si callar lo que hace la FIFA no fuera otra manera de hacer política. Si se habla con el punto de vista de los pobres es politización, si prevalece el de los ricos no hay que molestarse porque ese debe ser el orden natural de las cosas.

Cuando TeleSUR comenzó a transmitirse en vivo en Cuba, muchos vieron en ello una amenaza para la televisión cubana y De Zurda prueba que ha sido la salvación de nuestros televidentes, víctimas del contraproducente muro que con demasiada frecuencia divide innecesariamente lo político y lo lúdico en los medios nacionales y que sólo sirve para que la natural demanda de entretenimiento de nuestras audiencias sea llenada por lo peor de la industria cultural made in Miami o sus imitaciones nacionalesSi TeleSUR es más político, más antiimperialista, más antineoliberal y más latinoamericanista que todo el resto de la televisión cubana junta y la gente lo prefiere, entonces el problema no es de contenido sino de forma. Sería bueno saber cuántos cubanos estaban viendo “el paquete” en el horario de De Zurda.  

Además de TeleSUR, medios de comunicación como Página 12 o La Jornada prueban la formidable arma que constituye el buen periodismo para las causas contrahegemónicas, cuando apelan sistemáticamente al humor y la ironía en sus titulares, así como en sus respectivas secciones Pirulo de Tapa y Rayuela o en la caricatura política de altísimo nivel.

Pero el centro de la batalla está en la llamada industria del entretenimiento. El video clip de De Zurda nos recuerda cuán lejanos están aquí los tiempos en que la popularidad alcanzada por videos de temas como Cita con ángeles, Di que no o Son los sueños todavía demostraba entre nosotros que es posible conmover asumiendo una idea justa, como sucede hoy con la música del más reciente disco del grupo Calle 13, que merecería más difusión en nuestros medios y que también tuvo su espacio en el programa de Morales y Maradona.

Ojalá después de De Zurda, nosotros los de entonces, ya no seamos los mismos. Siempre he pensado que TeleSUR sólo es el inicio del despliegue de las potencialidades de un espacio audiovisual común latinoamericano. Siguiendo el ejemplo de los recientes desarrollos de la televisión pública argentina -cuya impronta se aprecia en otro programa que hace Víctor Hugo Morales para TeleSURVoces de Cambio- debemos articular, y pronto, canales latinoamericanos de cine, de ciencia y tecnología, infantiles, educativos, de deportes… como son respectivamente los argentinos INCAATVTecnópolisPaka PakaEncuentroDeporTv, que bajo el liderazgo del cineasta y gran amigo de Cuba, Tristán Bauer, prueban que otra televisión es posible.

El trabajo conjunto de esos canales con pequeñas y medianas casas productoras, instituciones y ministerios argentinos, generó, desde el año 2007, 21.000 puestos de trabajo entre especialistas de la industria audiovisual y gestores de los contenidos relacionados con objetivos culturales, educativos, identitarios y emancipatorios en las distintas esferas del arte y la ciencia. Un esfuerzo al que se integra una estrategia de alianzas internacionales que hizo de Argentina el primer país, después de Venezuela, en transmitir en señal abiertaTeleSUR, algo que ahora se fortalece con el anuncio -durante la estancia del presidente  Vladimir Putin en Buenos Aires- de que harán lo mismo con el canal Russia today en español

Argentina es sin dudas una potencia cultural y audiovisual, es el país latinoamericano que consume más contenidos nacionales en Internet, y sin embargo, es el primero en buscar y aprovechar contenidos extranjeros antihegemónicos.

La guerra cultural que sufren nuestros países, y especialmente Cuba, por nuestra condición de país pequeño y pobre, sólo puede enfrentarse  en alianza con los pueblos con los que compartimos tradiciones, cultura y luchas emancipatorias. Fidel lo comprendió tempranamente cuando alentó la creación de la Casa de las Américas, el ICAIC, Radio Habana Cuba y Prensa Latina y más tarde impulsó el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, instituciones en las que se integró buena parte del talento latinoamericano de la época. 

De Zurda y TeleSUR demuestran cuánto hemos adelantado desde entonces en el continente pero también cuánto podemos y debemos avanzar en nuestro país en materia de comunicación. 


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Iroel Eri Sánchez Espinosa

Se han publicado 10 comentarios


Lupa-Catalejo
 15/9/14 19:29

eriodista IROEL, me gustaría ver un artículo suyo, valiente, imparcial, justo y de investigación, donde explique, porqué no se ven, ni en la prensa escrita u otras formas de divulgación más masivas que la radio hoy en día en Cuba, las actuaciones de los CUBANOS que hoy juegan en las LIGAS DE BEISBOL no cubanas, lo exhorto, como periodista de argumentos que es usted, a dar espacios a esos deportistas CUBANOS, porque los hay de otros deportes también, a expresar sus criterios abiertamente a través de su sitio de Internet o blog, de como ayudar a su Cuba, que no olvidan, exceptuando raras e innaturales excepciones.
Es seguro que usted, afortunadamente tiene acceso gratuitamente a esa Red de redes, por su profesión, quizás por su cargo y por su puesto, además de todas las personas que viven con usted en su domicilio también tendrán esa posibilidad, como no es el caso de otros muchos cubanos, que tenemos que pagar la hora a 4,00 cuc o 100,00 cup para tener acceso. Aunque somos profesionales también, pero no podemos dedicar nuestros salarios a esos menesteres por causas, muy obvias, y no vienen al caso discutir aquí. Por eso pudiera usted, tratar de contactar a través de Facebook, o sus direcciones de correos, u otros vías de ese corte, con dichos CUBANOS y pedirle si están dispuestos a cooperar materialmente o moralmente con los que se inicien, en sus deportes aquí en Cuba, de cuáles son sus opiniones sobre la guerra en Palestina, sobre la ocupación de la base de Guantánamo, sobre su disposición a jugar con los equipos nacionales representando a Cuba y otros muchos temas más.
Estoy seguro, que entonces, muchos se asombrarían de la entereza y honestidad de muchos de esos CUBANOS. Sin tener que envidiarle nada, ni argentinos, ni puertorriqueños ni venezolanos y en lo personal me sentirían más orgulloso aún, de los periodistas cubanos y de usted por su accionar de servir de puente de comunicación e información.
LO EXHORTO, pero también LO RETO, en función de sus palabras escritas en su artículo, cuando dice:

“A propósito, me pregunto si los que dicen que estos futbolistas son iguales a los cubanos que juegan en las Grandes ligas del béisbol estadounidense, le pedirán a aquellos que exijan la devolución del territorio ilegalmente ocupado en Guantánamo, una causa que no nació con la Revolución de 1959 y que serviría para demostrar que en Estados Unidos se puede ser millonario y libre, o al menos patriota, en el tema cubano.”

A que ponga su pluma y sus posibilidades de INTERNET, para oír las posiciones de esos CUBANOS, y como atraerlos, haciéndole que se sientan, que nunca serán rechazados, por sus hermanos de acá, si siguen siendo dignos y honestos, como siempre, antes de irse a vivir fuera de Cuba.
Estoy seguro, que si usted, hace algo como lo que le propongo, muchos cubanos de aquí, seguirán su pluma, mucho más, que el programa de “Zurda” del cual coincido con usted, que fue una clase magistral, de cómo hacer un programa de TV deportivo, pero también social , político y con pocos recursos. Donde el buen pensar y el buen trabajo de mesa, fueron muy inteligentes.

Parafraseando una frase deportiva digo: “LA PELOTA ESTÁ EN SU TERRENO, IROEL”.

Nota.- lo de CUBANOS con mayúsculas, es muy intencionado, porque para mí, siguen siendo cubanos, mientras sigan siendo honestos, justos y no hagan nada contra “los pobres del mundo.”

emiliocf
 18/7/14 17:03

De Zurda fue una agradable sorpresa para los que en nuestra isla no estamos acostumbrados a la maestría de un comunicador como Víctor Hugo, con abundantes horas de vuelo en fútbol, pero no sólo en fútbol, y con una marcada vocación "zurda". ¡Qué maestria para encauzar las intervenciones de Maradona, inapreciable cuando de fútbol se trata, pero sin los conocimientos generales ni del medio que exigía el programa! Es una ilusión pensar que la política no está presente en todo, con frecuencia está por omisión como sugiere Iroel Sánchez. Lo que rechazamos es el discurso panfletario, la superficialidad, en fin, la falta de profesionalidad, que resulta torpedeada mejor que nada por un programa como De zurda. Verdad que sirvió de botón de muestra de lo que se puede hacer en el medio con relativamente pocos recursos. Sería enriquecedor para el cubano promedio poder acceder a espacios citados por el periodista, como La Jornada o Russia Today, por citar dos espacios, verdaderos contrapesos hegemónicos en un mundo donde los medios muchas veces se limitan a repetir como cotorras cualquier idea tomada por los pelos cuando no una mentira flagrante. Gracias a Telesur por abrirnos el hambre por el buen periodismo.

pin2012
 16/7/14 15:33

De_Zurda un programa para mi Genial con algunos detalles con Maradona que claramente como conductor o presentador de un programa no es ni siquiera el 1% de lo que fue como jugador pero que tenía al lado para mí a uno de los mejores conductores y periodista de todo el mundo no solo de latinoamerica...

La TV cubana que podemos decir ultimamente le ha dado por copiar de televisoras extranjeras algo que visto así no sería tan malo... pero les ha dado por copiar lo peor... que pena...

gracias Telesur por existir aunque sea unas horas del día al menos para la mayoría de los cubanos que no tenemos satelite o TV digital todavía... imaginesen si es un riesgo para la Tv cubana que ya no comienza sus trasmisiones hasta que se acaba el noticiero pues cunado iniciaron era a las ocho que empezaba a trasmitir por la noche luego del receso de por la tarde y ya casi nadie veía el NTV... y eso que la mayoría de los cubanos no podemos interactuar con ellos a través de internet por culpa del bloqueo (perdón por el sarcasmo no lo pude evitar)...

Cecy
 16/7/14 15:09

Estoy totalmente de acuerdo con Ud. y con la forera Gloria. No hace falta añadir nada más. Está genial su artículo. Ojalá lo lean los que deben hacerlo. Como necesitamos esos canales latinoamericanos que Ud. menciona!!!

Soy QBA
 16/7/14 14:21

Iroel amigo, los hinchas cubanos estan contigo, debe de ir fuera de la tv y la radio el periodista q hizo dichos comentarios racistas, es inadmisible q hechos como estos sucedan en nuestra patria hoy dia.

 

Quiero hacer un senalamiento a el periodista q cubrio en el periodico Granma de Lunes y Martes de esta semana de culminacion del CM fue en mi modesta opinion excesivamente halagador con el equipo aleman independientemente de q no es menos cierto q jugo un papel significativo en la liza pero bastante trabajo paso para llegar a la final ileso pienso q el arbitraje lo favorecio bastante, estimo q se puede ser mas preciso y objetivo en los analisis, porq este fue un mundial en donde hay mucha tela q cortar aun, y ha sido una buen curso de post grado para algunos periodistas de nuestros medios q bastante falta de criterio y profesionalidad tiene hoy dia en las narraciones de distintos evenetos deportivos tanto nacionales como internacionales.

Linda
 16/7/14 12:58

Tampoco me gusta el fútbol, pero De Zurda sí. Cada programa fue una clase magistral de comunicación. Por suerte, parece que volverá a TeleSur, según dijo Maduro. Tenemos mucho que aprender de Víctor Hugo y su equipo.

Alejandro
 16/7/14 10:13

Es que en Cuba no hay un Maradona y mucho menos un Víctor Hugo Morales para hecer cosas como estas; además nuestros comentaristas deportivos lo menos que saben es de deportes (algunos tienen conocimientos técnicos y de reglas, pero no son analistas). ¿Cómo le vamos a pedir que hagan política refinada como la que vimos en De Zurda y no caigan en el discurso meloso al que estamos sometidos todos los días por los cuatro canales?, ¿cómo le vamos a pedir que sean carismáticos, comunicativos y sepan usar la redes sociales si ninguno es líder en estos espacios de la Web. 2.0, incluso muchos no están? Comunicar es un arte que va acompañado del conocimiento y la tecnología. Lamentablemente aquí nos escasean los tres. Gracias Iroel por la entrega!!!

 

thelastsoulja
 15/7/14 18:48

Para mi lo peor del Mundial fueron los comentaristas cubanos!!!!

Piter
 15/7/14 9:19

Iroel, usted como siempre, poniendo exactamente los puntos sobre las íes.

Gloria
 16/7/14 8:14

Yo tambien soy muy concreta. Como comparto tu comentario. Pense que era innecesario agregar algo mas.

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