La decisión adoptada por las organizaciones guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y Ejército del Pueblo (ELP) de un cese al fuego unilateral posee varias lecturas políticas, entre ellas la celebración en paz, al menos de su parte, de las elecciones presidenciales marcadas para el próximo día 25.
Indican analistas, que ese gesto evidencia la voluntad de las fuerzas guerrilleras por evitar posibles incidentes de extremistas paramilitares de la derecha que pudieran ser adjudicados a la guerrilla y poner en peligro los diálogos de paz los cuales vienen celebrándose en La Habana desde hace más de un año.
Representantes de la guerrilla colombiana que participan en La Habana en un proceso de conversaciones con el Gobierno desde hace 18 meses anunciaron sorpresivamente que suspenderán sus operaciones durante ocho días, a partir del próximo lunes, mientras se realiza el proceso electoral en esa nación suramericana.
“Con ocasión del próximo certamen electoral a la Presidencia de la República, muchas voces se levantan solicitándonos una nueva declaración del cese del fuego para garantizar la ausencia de perturbaciones (…) la insurgencia no cree en el régimen electoral colombiano, sin embargo consideramos que un clamor nacional tan fuerte merece ser atendido”, explicó la delegación de los grupos insurgentes en un comunicado conjunto.
El anuncio tuvo lugar un día después de que el gobierno de Santos atribuyera a las FARC-EP la muerte de dos niños de 12 y 13 años quienes supuestamente iban a lanzar un explosivo contra instalaciones de la policía en la zona rural de Tumaco, en el Pacífico colombiano. El artefacto, siempre según el oficialismo, les explotó en las manos.
La adopción de la unilateral medida fue recibida con beneplácito por organizaciones y dirigentes políticos colombianos. Una de las primeras entidades en pronunciarse fue la delegación de las Naciones Unidas en Colombia, al destacar la importancia de la tregua y la voluntad de paz de los insurgentes en un período de elecciones presidenciales, por primera vez en la historia contemporánea.
La ONU dijo en un mensaje, que da la bienvenida a toda acción que pueda mitigar el impacto del conflicto armado sobre la población e insta a que este cese del fuego pueda prolongarse.
Para la exsenadora y defensora de los derechos humanos Piedad Córdova, su país vive un momento crucial del cual deben estar conscientes los ciudadanos, ahora el diálogo es el camino, y refirió que el Movimiento Colombianas y Colombianos por la paz celebra la postura anunciada en La Habana por la delegación guerrillera.
Para la dirigente, de gran prestigio internacional, “no está en juego el nuevo presidente sino lograr la paz y construir un nuevo país”.
En declaraciones a la emisora Radio Caracol, la candidata izquierdista a la presidencial por la alianza Polo Democrático-Unión Patriótica, Clara López, expresó que es una noticia bienvenida, pues "es algo que hemos venido solicitando y exigiendo desde tiempo atrás. “Enhorabuena, comentó, así solamente sea para estos últimos días de las elecciones”.
“Este es un acto que fortalece el proceso de paz”, según declaró el congresista Iván Cepeda, pues en su opinión es muy significativo que ambas guerrillas de manera conjunta declararan un cese de hostilidades.
Para el alcalde bogotano recién restituido Gustavo Petro, la decisión “debería prolongarse hasta el final de las conversaciones de paz”, refirió en su cuenta en Twiter, en la que solicitó que la decisión guerrillera sea bilateral y comprenda al gobierno.
También solicitaron una tregua bilateral y permanente dos de los voceros del movimiento político y social Marcha Patriótica, Carlos Lozano y David Flórez, quienes acogieron como “muy buena la noticia”. Ahora, señalaron, los militares deben respetar la tregua de las guerrillas.
Las elecciones por la Primera magistratura colombiana tendrán lugar el próximo día 25, con cinco aspirantes, entre ellos el actual presidente Santos, quien busca la reelección.
Para que un candidato obtenga la victoria debe alcanzar la mitad más uno de los votos. En caso de que ninguno de los postulados logre tal cifra, se irá a una segunda vuelta en junio y ganará quien logre la mayoría de las boletas.
A los comicios para elegir al mandatario y su vice están inscriptos 32 millones 404 mil 973 ciudadanos de los 47 millones 121 mil 089 censados en el 2013.
Además de Santos, del Partido de la U, figuran: Óscar Iván Zuluaga Escobar, del Partido Uribista Centro Democrático; Enrique Peñaloso Londoño, Alianza Verde; Marta Lucia Ramírez de Rincón, del Partido Conservador Colombiano, y Clara Eugenia López Obregón, del Polo Democrático Alternativo.
Hasta este viernes, hay un empate en la intención de votos de colombianos y colombianas, cuando faltan pocos días para la liza.
Según una encuesta Gallup difundida en las últimas horas, hasta ahora llevan la preferencia en la votación los candidatos Santos y Zuluaga.
El 29,3 por ciento de los interrogados dio su confianza a Zuluaga, mientras el 29 por ciento se declaró a favor de la continuidad hasta el 2018 con el actual Mandatario.
Les siguen Marta Lucía Ramírez, del Partido Conservador, con un 14,4 por ciento, Clara López, 10,9 por ciento y Peñalosa, 10, 6 por ciento.
Los resultados de Gallup no son favorables al presidente-candidato, pues si hubiera segunda vuelta solo lograría un 35,1 por ciento de boletas, mientras Zuluaga tendría un 42,5 por ciento del escrutinio.
La consulta incluyó a mil 184 personas mayores de 18 años, entrevistadas entre el 10 y 13 de mayo último en 56 municipios del país, por encargo de Caracol Televisión, Blu Radio y los diarios El Espectador, El Colombiano, La República, El País de Cali, El Universal y Vanguardia Liberal.
Otro sondeo, sin embargo, de la firma Cifras y Concepto, afirma que el Presidente tiene mayores posibilidades con un 27,7 por ciento en la primera ronda, mientras Zuluaga posee el 23,9 por ciento.
Para reforzar su campaña, Santos sumó al exmandatario César Gaviria (1990-1994), quien dijo a la prensa que diseñará una nueva estrategia en el tramo final de esta lid, indicó el diario El Tiempo.
El rotativo recordó que Gaviria firmó la paz con la guerrilla M-19 y estuvo al frente de la Constituyente de 1991, lo que habría influido en la decisión de Santos para ayudarlo a lograr la reelección.
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