“Mariposa technicolor, Giros, todo da vueltas como una gran pelota, todo da vueltas, casi ni se nota”. Desde que Fito Páez arribó a La Habana, cientos de seguidores rescataron parte de su discografía y comenzaron a tararearla en los lugares más insospechados. Durante el concierto celebrado este miércoles en el teatro capitalino Karl Marx, varios corazones se conectaron con palabras y canciones, lanzadas por quien confiesa adorar de Cuba el amor, la calidez, el ron y el mar.
El corto tiempo en que apareció ante los públicos junto a la orquesta cubana Los Van Van, para hacer de la inauguración una experiencia para recordar en varios años, demostró que la cita de este miércoles colmaría los espacios del Karl Marx, el que tiene capacidad para cinco mil personas.
La noche inició con la presentación mundial del DVD El amor después del amor, 20 años, un documental sobre el concierto celebrado el pasado 13 de octubre en Buenos Aires, con motivo de dos décadas de su conocido álbum "El amor después del amor. La obra fue dirigida por el argentino Diego Álvarez.
"Es muy emocionante estar aquí en Cuba. Es un regalo para mí volver a la isla" dijo Fito Páez durante la velada.
Páez regaló al público cubano temas muy conocidos de su discografía y La Habana tarareó con él. Un vestido y un amor", "Ciudad de pobres corazones", "Al lado del camino" o "Mariposa Technicolor" fueron cantadas, una y otra vez, por una Cuba que cabía en canciones.
Junto a él, compartieron escenario el roquero italiano Zucchero, el trovador Santiago Feliú y el pianista y compositor cubano Robertico Carcasés, con quien interpretó el conocido tema "El breve espacio en que no estás", de Pablo Milanés. Sin dudas, el mejor regalo fue cuando Páez bajó del escenario y comenzó a cantar "a capella" para sus amigos seguidores.
El cantautor argentino ha participado en cuatro ediciones anteriores del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, y su última estancia en Cuba fue en 2009, cuando presentó un documental sobre su obra, titulado "Las manos sobre el piano", del argentino Fernando Rubio.
En una conversatorio con periodistas y seguidores de su música en La Habana, el cantautor destacó la influencia ejercida por el Movimiento de la Nueva Trova cubana sobre su generación. “A principios de los 80, las canciones de Silvio y Pablo fueron esenciales, no solo por la calidad artística, sino porque su música sirvió a la gente para conectarse en una época anterior a la llegada de la democracia", aseguró.
Páez evaluó con la categoría de A al Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, y dijo: "Todos los cineastas del mundo mueren por venir acá".
El músico argentino, Fito Páez, durante un concierto celebrado en el teatro Karl Marx, con motivo al XXXIV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, en La Habana. (Foto: Abel Ernesto/AIN)
El músico argentino, Fito Páez, durante un concierto celebrado en el teatro Karl Marx, con motivo al XXXIV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, en La Habana. (Foto: Abel Ernesto/AIN)
El músico argentino, Fito Páez, durante un concierto celebrado en el teatro Karl Marx, con motivo al XXXIV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, en La Habana. (Foto: Abel Ernesto/AIN)
El músico argentino, Fito Páez, durante un concierto celebrado en el teatro Karl Marx, con motivo al XXXIV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, en La Habana. (Foto: Abel Ernesto/AIN)
El músico argentino, Fito Páez (izq.), junto al músico cubano, Santiago Feliú (der.), durante un concierto celebrado en el teatro Karl Marx, con motivo al XXXIV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano. (Foto: Abel Ernesto/AIN)
Público asistente al concierto del l músico argentino, Fito Páez, celebrado en el teatro Karl Marx, con motivo al XXXIV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano. (Foto: Abel Ernesto/AIN)
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