viernes, 27 de septiembre de 2024

Diez minutos con Yves Saint Laurent en La Habana

Pierre Niney es en Francia el actor joven del que todo el mundo habla. Ahora, de visita en Cuba, accedió a contestar algunas preguntas para Cubahora...

Yeneily García García en Exclusivo 06/05/2014
0 comentarios
Pierre Niney, actor francés
Pierre Nine: Es un actor francés de la Comédie Francaise.

Precoz, como el verdadero Yves Saint Laurent, Pierre Niney parece más joven en persona que en la pantalla, pero no deben dejarse engañar por su rostro aniñado, con 20 y pocos ya se convirtió en el miembro más bisoño de la Comédie Française, una prestigiosa compañía teatral que acumula más de 300 años de historia, de cuyas filas han salido nombres como Sarah Bernhardt, Coquelin y Jeanne Moreau, y en la que descansa el corazón del mítico Voltaire.

En Francia es el actor joven del que todo el mundo habla, y ahora de visita en Cuba, accedió a contestar algunas preguntas para Cubahora sobre Como hermanos (Hugo Gélin, 2012), la película que presentó al público capitalino asistente al 17 Festival de Cine Francés —del dos al 25 de mayo en todo el país— y, sobre todo, del papel que se prevé lo lance al estrellato definitivo: su interpretación del talentoso y malogrado modisto galo, el primero en usar a modelos negras en sus pasarelas, y uno de los diseñadores más influentes en el siempre cambiante mundo de la moda, que reina todavía tras las reconocibles siglas YSL.

Quizá lo que lo hizo reconocerse en el personaje, “el más exigente de su carrera”, es su pasión por lo que hacía este artista, y confesó que lo entiende como nadie, “porque no me imagino haciendo otra cosa que no sea actuar.

”Era una persona tan difícil… En realidad no había muchos puntos en común, sólo que había comenzado muy joven y que siempre vivió y quiso trabajar con una pasión enorme”, dijo después de una pausa, absorto, mientras alrededor iban en aumento el bullicio de una conferencia de prensa que terminaba.

“Con esta característica me identifiqué mucho, porque yo mismo, desde que comencé, quise hacer muchas cosas, avanzar mucho en esta carrera del cine y del teatro, y pienso que él también experimentaba esa necesidad”.

En 1957, con 21 años, Yves Saint Laurent (1936-2008) se convirtió en el modisto más joven de la alta costura francesa, cuando por deseos expresos del gran Christian Dior, lo reemplazó en la casa Dior, para luego, después de su salida de esta empresa, fundar su propio negocio. Su historia, desde los 18 hasta entrados los 40 años, se narra en el filme homónimo, dirigido por Jalil Lespert y estrenado con bastante éxito en enero de este año.

Con conocidos problemas de depresión, drogas y alcohol, YSL fue una controvertida personalidad que marcó época en la “haute couture” y fue el primer diseñador de moda que ha expuesto en un museo, nada más y nada menos que en el Metropolitan Museum de Nueva York.

“Fue una decisión difícil”, nos contó Pierre, que comenzó en el mundo de la actuación a los 11 años y que a sus 24 ya tiene detrás una sólida carrera como intérprete.

“Yo no tengo método, me adapto a cada momento, a cada realizador, a cada personaje, a la historia. Yo, con Yves Saint Laurent me di cuenta que tenía delante todo un reto. Era una figura internacional y fue difícil la evolución del personaje, incluso la parte física porque yo tenía que cambiar para cada momento de su vida.

”En lo psicológico también. Él pasó por momentos de mucha alegría y por momentos de mucha depresión, había drogas, alcohol, y yo me di cuenta que con este personaje tenía que hacer una verdadera inmersión. Es el papel para el que más he tenido que trabajar, lo hice durante cinco meses y medio. Practiqué mucho, aprendí diseño para yo mismo dibujar en la película, tuve un entrenador físico, y había un diseñador para enseñarme las claves de la profesión”.

Al hablarnos sobre el trabajo en la Comédie… explicó que no hay un método único, “somos 60 actores, y cada cual tiene su propia manera de trabajar.

”Ahora mismo, en Francia es un buen momento para la creación joven. Hay un grupo de realizadores jóvenes que escriben y hacen películas, es una respuesta a la situación precaria que impone la crisis, esta situación nos impone que realmente hay que saber actuar, escribir y dirigir para tener mayor oportunidad de trabajo y también para obtener un tipo de cine que se nos parezca”.

No nos extrañó escuchar que entre sus influencias más importantes esté Patrick Dewaere, uno de los actores más populares y prometedores de la escena francesa de los 70, cuyo nombre está ligado a un Premio otorgado a una figura joven que haya impactado con su trabajo durante el año, recibido por Niney este abril.

Tampoco nos sorprendió que Leonardo Di Caprio fuera un modelo a seguir para este intérprete. Ambos comenzaron temprano, a los dos les sobra atractivo y presumimos, que Niney como el Jack Dawson de Titanic (James Cameron, 1998) tampoco quiere encasillarse como una cara bonita.

Su Yves Saint Laurent ayudará mucho en este proceso y en darlo a conocer en el mercado norteamericano, a donde espera llegar y filmar en inglés, una lengua que “me encanta, porque la encuentro muy lúdica para los actores.

”Esta película va a presentarse dentro de un mes en los Estados Unidos, y el distribuidor es Harvey Weinstein, un peso pesado en esta industria y un gran productor con varios Oscars en su trayectoria. Hay esperanzas de obtener algún Premio de la Academia, pero en el mercado americano no se sabe, puede que sí, puede que no, es inesperado para nosotros los franceses”.

Sobre la influencia de Hollywood en el quehacer francés, contestó que en su opinión hay de los dos.

“¿Tenemos influencia de Hollywood en Francia? Sí y no, somos una generación que crecimos viendo el cine hollywoodense, pero también pienso que ahora el cine francés tiene sus particularidades, pienso que gusta así en el mundo entero, porque una de sus características más marcadas es que es muy independiente.

”Nosotros seguimos la influencia de un verdadero cine francés, la Nouvelle Vague, (Jean) Cocteau, (François) Truffaut, el espíritu francés, y para nosotros es un gran orgullo, una historia que no olvidaremos, pienso que hay que encontrar el equilibrio adecuado entre lo mejor del cine internacional y nuestros orígenes”.

En Como hermanos, Niney encarna a Maxime, un niño de mamá de 20 años, que junto a Boris y Elie está enamorado de Charlie, una mujer a la que piensan honrar haciendo un viaje a la casa que ella amaba en Córcega.

Sobre su experiencia en esta cinta, incluida en la programación de este Festival —el segundo más grande de su tipo fuera de las fronteras galas— comentó que fue como estar en una fraternidad.

“Enseguida sentí la química tanto con los demás actores como con Hugo Gélin, el director. Fue algo que me aportó también mucho en mi vida personal.

”Cuando estábamos viendo la película  aquí en La Habana realmente me emocioné con la reacción del público, que era espontáneo, que seguía la película, que no se vio bloqueado por las referencias culturales que no comprendían.

”Hacer una película como esta es duro, porque desde el momento que me contrataron hasta que salió pasaron tres años, por tanto, cuando uno está a nueve mil kilómetros de su país y está en un cine donde la gente se ríe y se conmueve con tu trabajo, realmente es muy emocionante sentir esta conexión.

”Espero que pase lo mismo con Yves Saint Laurent, espero verla aquí el próximo año”, sonrió y entonces no pudimos menos que pensar en que nosotros también deseamos que suceda.

 


Compartir

Yeneily García García

Lectora voraz y artista frustrada, enamorada desde siempre del periodismo de Agencia y ejerciéndolo con plenas facultades desde 2008.


Deja tu comentario

Condición de protección de datos