El ABC de una manicura casera

Las uñas constituyen el espejo de nuestro estado de salud y nuestra personalidad. Son la tarjeta de presentación de nuestras manos y con una hora semanal dedicada a sus cuidados pueden evitarse situaciones incómodas. No es necesario que sean largas, súper coloreadas y maravillosas, es suficiente con que estén bien cuidadas para completar la apariencia general.

 Ante este escenario, resulta imprescindible conocer el ABC básico para realizar una manicura casera; bien sea para una salida, una reunión importante en el trabajo u otra actividad. Recomendamos realizar esta manicura completa cada 15 días, dejan respirar las uñas una semana entre manicura y manicura con el fin de evitar los abusos de los esmaltes.

INSTRUMENTOS Y PRODUCTOS

Lo primero que debemos tener claro son los instrumentos y productos que nos ayudarán en nuestro arreglo. En este sentido, se destacan los palitos de naranjo, limas, alicates, cortaúñas, aceite de cutículas o crema para manos, acetona, algodón, bol de manos (recipiente), base protectora (calcio, endurecedor) y, por supuesto, no pueden faltar los protagonistas: los esmaltes de uñas.

ABC DEL ARREGLO DE UÑAS

Una vez que tenemos los instrumentos y productos, pasemos a realizar nuestra manicura. El primer paso consiste en limar y dar forma, fijándose en la forma de las raíces, si son curvas, deja las puntas redondeadas; a las planas les quedan bien los bordes cuadrados; si prefieres algo más neutro forma un óvalo en el centro de las puntas y corta en cuadrado los bordes para mezclar los dos estilos. Un punto a tener en cuenta es que no debemos usar limas de metal, ya que pueden dañar las capas de queratina de nuestra uña; son aconsejables aquellas de cartón o madera.

El segundo paso es sumergir bien los dedos en agua caliente con jabón o gel de baño en el bol o en otro recipiente a nuestro alcance durante tres minutos aproximadamente, con el objetivo de suavizar nuestras cutículas. Una vez transcurrido el tiempo, secamos bien las manos y tratamos las cutículas. Para ello, se aplica aceite de cutículas o crema de manos en la zona de la lúnula, repartiendo el producto por todos los bordes. A continuación, empujamos suavemente hacia atrás las cutículas con ayuda de un palito de naranjo, y se sacan, con la ayuda del alicate, los padrastros (pequeñas porciones de piel salientes a los costados de las uñas).

En cuarto lugar, se aplica una base protectora (calcio o endurecedor) en nuestras uñas. Les aconsejo, por experiencia propia, la “Uña milagrosa”, un tratamiento que endurece y facilita el crecimiento de las uñas.

Para finalizar, aplicar el esmalte de uñas de su preferencia. Primero pintar ambos lados desde la base hasta la punta y luego el centro. Para obtener un buen resultado aplicar dos capas finas del esmalte; una vez seco, sellar con el brillo liso o topcoat.

OTROS TRUCOS CASEROS

A continuación les proponemos otros trucos sencillos y fáciles para pintarse las uñas y lucir unas manos como recién salidas del salón de belleza.

1-      Manos bien limpias: Para que el resultado final sea impecable, debemos asegurarnos de tener las manos bien limpias y secas antes de pintarnos las uñas.

2-      Retirar las cutículas, no cortarlas: Nunca se deben cortar las cutículas. Solamente en  aquellos casos de que exista algún padrastro.

3-      Agua fría: Después de pintar las uñas, introducir las manos en un recipiente con agua fría ya que esto ayuda a que se sequen más rápido.

4-      Dibujos sencillos: Para realizar diseños en las uñas, podemos utilizar ganchitos de pelo o de lo contrario colocar en la goma de un lápiz un alfiler. Con estas herramientas, podemos hacer puntos, corazones y hasta florecitas. Quedan muy chic.