Ejercicios para evitar flacidez en el rostro

Los ejercicios trabajan la mente y la actividad física, habitualmente lo relacionamos a grandes músculos del cuerpo como: muslos, glúteos, bíceps, tríceps, abdominales, entre otros y nos olvidamos que los músculos de la cara también necesitan ejercitarse. La finalidad de estos ejercicios es ayudar a mantener tonificadas zonas como la frente, el área cercana a los ojos, mejillas y papada, siendo el punto de partida para mantener los músculos del rostro en buenas condiciones.

Solo necesitamos dedicarle unos pocos minutos diarios para notar cómo disminuyen las arrugas y aumenta la vitalidad del rostro. Al estimular la circulación sanguínea, le damos a nuestra piel ese extra de nutrición que vamos perdiendo con el paso del tiempo.

Antes de comenzar es importante calentar y relajar la musculatura de la cara, el cuello y los hombros. Para ello realizaremos un pequeño masaje en estas partes golpeando con la yema de los dedos.

EJERCICIOS

Las llamadas “patas de gallo” son arrugas que se forman en la parte exterior de la piel que rodea los ojos y se asemejan a la forma de las patas de estas aves, son uno de los pliegues más comunes que adquiere el rostro con el paso del tiempo. Para ayudar a evitarlas puedes realizar los siguientes ejercicios:

- Cierra los ojos, mantenlos cerrados mientras levantas las cejas, sostenlas levantadas por unos segundos. Después vuelve a bajarlas y repite el movimiento. Con este ejercicio se estira la piel a los lados y arriba de tus ojos, dándole la elasticidad que necesita.

- Coloca los dedos en las sienes e intenta que estos lleguen hasta la parte superior de las orejas. Abre la boca y desplaza la mandíbula de delante a atrás. Mantén la tensión durante 6 segundos y luego relaja.

Para tonificar los músculos de las mejillas sonríe de manera amplia, estirando la piel que rodea los labios de manera firme. Con esa posición, saca tu lengua a lo largo y después extiende la punta hacia arriba, manteniendo esa posición por unos pocos segundos. Vuelve a repetir el movimiento.
Hincha las mejillas con aire, golpea suavemente con las yemas de los dedos sobre ellas y echa todo el aire afuera suavemente.

Coloca las yemas de los dedos de tus manos de manera lineal en tu frente, en la parte intermedia de esta y desliza las puntas de tus dedos de manera uniforme hacia arriba, hasta terminar donde empieza tu cabello. Sentirás como esta parte de la piel se ejercita con cada movimiento. Realiza unas pocas repeticiones de este ejercicio. Mantén esta tensión durante 6 a 10 segundos y relaja.

Para la papada lo que tienes que hacer es posicionarte de manera erguida y a continuación mover tu cabeza un poco hacia atrás, con cuidado. Después, mientras miras hacia arriba, haz que tu boca se mueva como si estuvieras masticando alimentos con tu boca abierta. Puedes realizar este ejercicio con unas 10 repeticiones.

Otro ejercicio es utilizando la toalla enrollada y colocada debajo de la barbilla, levanta la mandíbula hacia arriba y desliza la toalla por debajo de la mandíbula. Mantén la tensión durante 6 segundos y luego relaja.

Sentada delante de una mesa, coloca un brazo encima del mentón en posición horizontal y el otro en vertical. Cierra la mano en un puño y colócala debajo del mentón haciendo fuerza con la barbilla contra el puño. Mantén la presión durante 6 segundos y luego relaja.

Nota: La gimnasia facial no solo aporta beneficios estéticos, también alivia ciertos problemas como la parálisis facial, dificultad de dicción o problemas articulatorios, entre otros.

Al hacer estos ejercicios notarás la diferencia en un rostro de apariencia más fresca y tonificada.