La guerra no tiene rostro de mujer (+PDF)

Este no es un libro de ficción. Cuenta una historia real y dolorosa, silenciada por el tiempo, los estereotipos y la censura hasta que su autora, la periodista bielorrusa Svetlana Alexievich, tras dos largos años de investigación y entrevistas, se atrevió contarla.

Alexievich, primera persona cuya obra es completamente de no ficción premiada con el Nobel de Literatura (recibió el galardón en 2015), cuenta las experiencias de vida de mujeres, en aquella etapa adolescentes apenas, que integraron el ejército soviético durante la Segunda Guerra Mundial.

La autora explica que “todo lo que sabemos de la guerra, lo sabemos por la «voz masculina»”. Los hombres se dedican a relatar estrategias militares, victorias, fracasos y cifras de forma general y fría.

“Los relatos de las mujeres son diferentes y hablan de otras cosas. La guerra femenina tiene sus colores, sus olores, su iluminación y su espacio. Tiene sus propias palabras. En esta guerra no hay héroes ni hazañas increíbles, tan solo hay seres humanos involucrados en una tarea inhumana”, añade.

Precisa que “su historia no es una historia de la guerra, ni de los combates, es la historia de hombres y mujeres en guerra (…) ¿Qué les ocurrió? ¿Cómo les transformó? ¿De qué tenían miedo? ¿Cómo era aprender a matar?”.

Las pilotos Rufina Gasheva y Natalia Meklin, integrantes del Regimiento de Bombardeo Nocturno, apodado por los alemanes como Brujas de la Noche. Imagen coloreada por la artista rusa Olga Shírnina (Foto: Flickr de Olga Shirnina).

Alexievich nos trasmite con un talento excepcional las voces de cientos de mujeres que ocuparon profesiones militares de todo tipo: francotiradoras, conductoras de tanque, enfermeras, soldados de infantería… Cada una desde su subjetividad, trasmite las emociones de aquel momento, la parte que muchas veces queda ausente cuando se habla de los conflictos bélicos.  

Lyudmila Pavlichenko, considerada la francotiradora más exitosa de la historia (309 bajas al ejército nazi) (Foto: Ola Shirnina).

Esto es un fragmento de lo que contó María Ivánovna Morózova (Ivánushkina), cabo y francotiradora, a la periodista: “Fuimos a la oficina de reclutamiento, entramos por una puerta y salimos por otra: me había hecho una trenza muy bonita, salí de allí sin ella… Sin la trenza… Me cortaron el pelo al estilo militar…También dejé allí mi vestido. No tuve tiempo de darle a mi mamá ni la trenza, ni el vestido. Con lo mucho que ella deseaba quedarse con algo mío”.

El libro es conmovedor, nos hace comprender esa historia otra, la vivida por la gente que ayudó a construirla.

Les comparto el libro en pdf: Parte 1 (925 KB) y Parte 2 (984 KB). Y en epub (461 KB).