Ciertas personas engordan sin comer tanto

Cuando se engorda o se adelgaza se acude a un simple cálculo matemático; se establecen las diferencias sumatorias entre las calorías que entran al cuerpo humano a través de todos los alimentos ingeridos -excepto el agua único nutriente sin calorías-, restándose las calorías que salen a través de los procesos metabólicos, la vida diaria y las actividades físicas que se hagan. Parece evidente y así funciona en la mayoría de los casos, pero las dos variables de esta ecuación pueden verse alteradas por determinados factores.

LA CLAVE ESTÁ EN LAS CALORÍAS

Cuando se disminuyen las calorías ingeridas con una selección adecuada de los alimentos, muy probablemente se producirá una pérdida de peso. No obstante, existen casos donde dicha reducción, objetiva, real y sincera de calorías en la dieta no es suficiente para colocar en negativo el balance calórico y, por tanto, obtener una reducción del peso corporal. En estas situaciones el problema recae en la otra variable de la ecuación: en las calorías que se gastan.

Y volviendo a esta intrigante pregunta, ¿por qué mucha gente engorda aunque coma poco? ¿Por qué muchas personas ganan peso, no lo reducen o bajan lentamente a pesar de llevar un régimen alimentario estricto y saludable de forma mantenida? Pues bien, casi siempre la explicación cae de lleno en el metabolismo de la persona en cuestión.

UNA INTERESANTE INFORMACIÓN

Según se informa en una publicación de la revista European Journal of Clinical Nutrition, eso depende en gran medida de la masa muscular de su cuerpo en quienes sufren esta interrogante. De este modo, los individuos con una masa muscular pobre aunque tengan una figura pasada de peso, poseen un gasto energético en reposo muy bajo. Son las personas gordas y aparentemente robustas por su grasa corporal pero con una musculatura bastante escuálida, lo que es difícil de apreciar a simple vista.

Dadas estas circunstancias, la cantidad de calorías que deberían ingerir a lo largo del día para conseguir adelgazar o mantener su peso sería tan escasa que necesitarían llevar a cabo una dieta de muy reducido volumen de alimentos habitualmente monótonos y aburridos; eso dificultaría seriamente su mantenimiento. En estos casos el sufrido individuo abandonará la dieta al poco tiempo después de haberla empezado por ser impracticable.

GRAN MASA MUSCULAR

El caso contrario sucede por ejemplo en atletas profesionales. Los altos valores de masa muscular poseída por ellos les permite ingerir grandes cantidades de alimentos y no engordar. En algunos casos incluso adelgazan. Dicho esto, queda bastante claro que en personas con problemas para bajar de peso por un bajo gasto metabólico, la clave de la pérdida de peso recae con más fuerza en el ejercicio y la adquisición de más masa muscular sin llegar a exageraciones, que en la dieta.

Aunque se debe acompañar la rutina de ejercicios indicados por un profesional según edad o estado de salud, con un plan dietético científicamente diseñado y donde puedan observarse satisfactorios resultados; pero el aumento del tono muscular se vuelve crucial a la hora de planificar una pérdida de peso en estas personas por no decir en todas las deseosas de perder las libras sobrantes.

SELECCIÓN Y CÁLCULO DE LOS ALIMENTOS

Se debe ser realista a la hora de diseñar la dieta a mantener por tiempo indefinido donde resulta fundamental consumir una alimentación variada en frutas y vegetales, alimentos integrales, lácteos descremados y priorizar el pescado y las aves sobre la carne roja o procesada, pues son comprobadas estrategias positivas a la hora de perder de peso y poder mantener el nuevo peso alcanzado.

Existen casos entre la gente que cree comer poco y sin embargo engorda. Son aquellos que subestiman por desconocimiento las calorías de su dieta pues el individuo cree comer bastantes menos calorías de las ingeridas verdaderamente.

Habitualmente sucede cuando no se tiene en cuenta el pan blanco consumido como acompañamiento, las salsas grasientas, las bebidas alcohólicas, la cantidad de aceite añadido en los aliños, etcétera. Dejar pasar estos detalles puede conllevar a la creencia errónea de que hay gente engordando sin solución posible, aunque, pobrecito(a), se mantenga comiendo poco pues la dieta no es eficaz.

Resulta imprescindible adoptar una rutina de entrenamiento y evitar el exceso de comida chatarra, como son los fritos, azucarados o procesados, para que la dieta no pierda calidad.

SUMATORIA ESTIMULANTE

La pérdida de peso es el resultado de una suma de dos factores a combinarse inseparablemente para obtener los resultados esperados; la dieta es una parte fundamental, pero el ejercicio lo es tanto o más.

Por lo tanto, para eliminar esas libras sobrantes es imprescindible aumentar el gasto energético en reposo gracias al aumento del tono muscular por haber creado una suficiente masa muscular gracias al ejercicio realizado para lograrlo sin importar la edad, junto a un plan dietético adecuado que lo acompañe de manera indisoluble cual matrimonio bien llevado.

Y no lo dude más ¡el mejor momento para empezar a hacer ejercicio y dieta por el bien de su salud es ahora!