El socialismo se construye en determinadas condicionantes históricas. En el caso de la Revolución Cubana no podía comenzar la construcción del socialismo si no se subvertía el orden político existente y el orden de los fundamentos económicos de una sociedad totalmente sometida a una injerencia extranjera económica y política.
El socialismo cubano es el resultado histórico de la cultura revolucionaria de un país y expresa nuestra idiosincrasia, es hijo de las masas populares. No pretende dar lecciones a nadie, sino que busca soluciones de independencia a nuestro país y además, que aporte a la humanidad, porque es una solución que tiene que superar al capitalismo.
¿QUÉ PRINCIPIOS Y VALORES DISTINGUEN NUESTRO SOCIALISMO?
El humanismo: Cuba tuvo la suerte de contar con un líder que se nutrió de dos corrientes de pensamiento como lo son el martiano y el marxista, y que luego esas ideas se transformaron en hechos a favor del pueblo.
La búsqueda de una relación entre lo individual y lo social. Cuba es un país que se ha construido sobre la base de la igualdad para todos y que ha puesto todos sus bienes a disposición del pueblo.
Foto: Roberto Suárez/ Juventud Rebelde
La Solidaridad: Tanto interna como internacional. Cuba se ha destacado históricamente por su actitud solidaria con otras naciones en el enfrentamiento en desastres naturales, guerras y otras eventualidades.
Médicos cubanos que enfrentaron el ébola en el continente africano (Foto: Archivo Cubahora)
Justicia social: puerta de entrada, pieza clave del socialismo en Cuba. Esta ha sido la brújula que ha marcado cualquier tipo de transformación económica.
La unidad del pueblo en torno a la vanguardia: Resulta indisoluble la relación entre el pueblo y la vanguardia, ha sido así desde los tiempos de Mella, Villena y Guiteras. Nuestro socialismo es la creación histórica del pueblo.
La capacidad del pueblo de resistir con soluciones novedosas: Eso ha permitido hacerle frente a la metrópolis más fuerte de la historia y lo hemos demostrado cada vez que en la ONU se condena el bloqueo contra Cuba, cada vez que sobrevivimos y logramos salir adelante
Sin embargo, no se debe hablar de un modelo, aunque este término se utilice con frecuencia, porque el socialismo es un proceso creativo, en el que las reglas se van perfeccionando y ajustando.
A decir de Gilberto Valdés Gutiérrez, coordinador del Grupo de Estudios sobre América del Instituto de Filosofía, “el socialismo es una teoría en constante elaboración teórica de la lucha revolucionaria… en ningún contexto es un proceso que asciende de manera unilateral, sin contradicciones ni conflictos. A veces se pensó como evolución natural y no es el caso”.
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