//

jueves, 26 de diciembre de 2024

Indisciplinas sociales: ¿un asunto de pi? (+Fotos)

Un sondeo periodístico realizado entre cien capitalinos, aun cuando para nada pretende ser representativo del panorama nacional, aporta un botón de muestra sobre las indisciplinas sociales más frecuentes en Cuba...

Vladia Rubio en Bohemia 26/08/2013
12 comentarios
Indisciplina social en Cuba 00
¿Qué puede hacer la ciudadanía para revertir la situación actual?

Calles sin basura, ni escombros o papeles ensuciando el andar; personas que conversan sin que nadie les interrumpa o pase entre ambos olvidando pedir permiso, balcones desde donde lanzan sonrisas y no jabitas con desperdicios o cabos de cigarro; música solo para el disfrute privado, sin agredir el tímpano de los vecinos; muros limpios, libres de graffitis o huellas de zapatos; manos tendidas para ayudar a la señora, respeto por el orden de la cola…

No es la descripción de un panorama ilusorio por abarcador, sino realidad alcanzable para todos los cubanos. La merecemos.

Y es una paradoja, porque al tiempo que abundan disgustos por tal convivencia complicada que viola normas elementales y va de la mano de la falta de educación y la indisciplina, a veces es la propia ciudadanía -una parte de ella- la que atenta contra esa cotidianidad más confortable, higiénica y ordenada.

Bohemia fue en busca de explicaciones al fenómeno, para nada exclusivo de esta Isla, pero que aquí resulta particularmente chocante por contradecir los valores y el paradigma de sociedad defendidos por tantos cubanos.

El presidente de los consejos de Estado y de Ministros, general de ejército Raúl Castro Ruz, hizo de este tema uno de los ejes centrales de su discurso en la más reciente sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular, cuando incluso condicionó el avance en la actualización del modelo económico al orden, la disciplina y la exigencia. No se estaba refiriendo únicamente al sector productivo, sino al acontecer del país en general.

LO QUE VEN CIEN

Un sondeo periodístico realizado entre cien capitalinos, aun cuando para nada pretende ser representativo del panorama nacional, sí aporta un botón de muestra sobre lo que más parece estar reiterándose, al menos en esta ciudad con más de dos millones de habitantes... hasta que el censo diga su próxima y esperada palabra.

Al interrogar a estos pobladores de disímiles edades, ocupaciones y municipios, mitad del sexo masculino y mitad del femenino, sobre cuáles eran las cinco indisciplinas sociales y violaciones de normas de convivencia que más veían reiterarse en su cotidianidad, 98 por ciento señaló el botar basura y otros desechos en sitios inapropiados concediéndole un lamentable primer peldaño.

Dayamí Arbela, de 43 años, engurruña la nariz en respuesta al mal olor que emana de la loma de desperdicios junto al contenedor de basura, mientras la señala con dedo acusador: “Yo no entiendo por qué la gente tiene que ser tan cochina. ¿Qué trabajo cuesta tirar la jaba dentro del tanque?”

Sintiéndose confortada al quejarse a la reportera, vuelve a la carga: “Pero eso no es lo único mi’ja; junto a la peste, se mete por las ventanas también la música del vecino de al lado, que no me da tregua. He pensado hasta en mudarme, pero es por gusto, porque en todas partes pasa igual”.

Junto a Dayamí, 83 por ciento de los interrogados se declaran víctimas de músicas “a todo lo que da” o de ruidos molestos, que van desde las prácticas de un estudiante de trompeta hasta la sierra de cierto carpintero partiendo en dos el amanecer.

No hubo diferencias entre los grupos de edades al señalar como la violación más reiterada la basura y otros desechos fuera de lugar, pero como peculiaridad, en el caso de los ruidos, aquellos entre 15 y 25 años no la indicaron como la segunda de sus molestias. Quizás sea porque entre ellos se apunte la mayoría de los “ruidosos”, especialmente en cuestiones musicales.

A diferencia del resto, los más jóvenes marcaron en segundo lugar los daños al transporte público, que para la generalidad ocupó con 74 por ciento el cuarto peldaño, antecedido por la indisciplina de ensuciar o escribir paredes, y que especialmente molesta a los mayores de 60 años.

Debería haber determinados muros o espacios donde se expresaran aquellos con inquietudes artísticas o de comunicador social, pero la parada de la guagua o la pared exterior de la panadería no pueden servir de soporte, por ejemplo, a un tal JM para anunciarle al mundo que él es “El locote de la Lisa”, acompañado por un dibujo obsceno que intenta graficar las dimensiones de su locura.

Aunque en el quinto lugar, las afectaciones a parques, jardines y áreas verdes en general, fueron señaladas por 64 por ciento del total, esa no deja de ser una conducta que a todos hace la vida menos grata, y llega a indignar cuando trasciende de pisotear el césped a destrozar bancos y hasta cargarlos en peso quién sabe con qué rumbo.

¿DI POR QUÉ?

Poco se avanzaría con solo describir situaciones como las mencionadas, aun cuando los números puedan aportar una magnitud algo más precisa del fenómeno. El asunto está en buscar razones, y para eso, indagamos en los motivos que los propios ciudadanos asocian a esas conductas.

El 92 por ciento de los interrogados las atribuyen a la falta de exigencia por parte de las autoridades para hacer cumplir lo establecido. Aunque este multifacético tema no puede quedar solo en manos de los agentes del orden, el coronel Juan José Hernández, de la Dirección General de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), durante el acto central de esa institución por los 60 años de los sucesos del 26 de Julio, subrayaba que “para la PNR, el Moncada de hoy está en garantizar la eficacia, eficiencia y profesionalidad en el enfrentamiento al delito, las ilegalidades y las indisciplinas sociales en el actuar diario, en la cohesión de las acciones con los órganos del Estado, las organizaciones políticas, de masas y sociales, bajo la dirección del Partido, con el objetivo de mantener el orden y la tranquilidad del pueblo”

Por su parte, la viceministra de Justicia Rosa Charró comentó a esta reportera la necesidad de “ser mucho más exigentes en la aplicación de las normas con quienes infrinjan la disciplina social y vulneren la tranquilidad ciudadana. No basta con lo educativo. Las dos cosas son importantes y deben aplicarse en la justa medida que correspondan”.

Resolver ese tema nos toca a todos los ciudadanos, también precisaba la viceministra; pero, paradójicamente, la segunda causa por la que acontecen tales hechos, según la muestra con que BOHEMIA interactuó, resultó ser el individualismo y la escasa solidaridad, seguida en tercer lugar por la falta de exigencia sobre la propia ciudadanía.

Es revelador constatar cómo la mayor cantidad de encuestados declaró hacer siempre lo correcto en bien de las otras personas y de su comunidad, al pedirle a cada uno que indicara la frecuencia de ese actuar. De ser así, entonces ¿quiénes son los infractores y los mal educados?, ¿perpetuamente los de al lado? Asoma de manera evidente la falta de una conciencia crítica. Por suerte, fueron los jóvenes quienes más dijeron que solo ocasionalmente hacían lo correcto, con 44,4 por ciento.

INSTRUIDOS PERO NO EDUCADOS

Violar normas de convivencia ciudadana, incurrir en indisciplinas, usualmente se hace acompañar de mala educación. Por eso, la revista se propuso además indagar en cuáles eran las faltas de educación que más se reiteraban en el diario acontecer.

El centenar de entrevistados no dudó en señalar mayoritariamente, con 83 por ciento, el no pedir permiso para pasar, entrar o salir; y le siguieron -marcados por 71 por ciento en ambos casos- hablar en un tono de voz inadecuado y la ausencia de las “gracias” y el “por favor”. Comunicarse en voz alta, gritar y vocear molesta a todas las edades, según este sondeo; mas a los abuelos parece disgustarles en particular que la gente no salude.

“Llegas a cualquier lugar, al consultorio, a un centro de trabajo, a una cola… y es como si no te vieran, porque nadie te da los buenos días”, refiere dolido Antonio Vistalegre, de 67 años. Junto a este abuelo, 64 por ciento de los encuestados indicó la omisión del saludo como la cuarta falta de educación que más constatan.

Entre las causas de tan maltrecha educación formal los entrevistados apuntaron mayoritariamente a la familia y también a que “los conciudadanos no se respetan entre sí”, 86 por ciento en los dos casos. Como tercera causa quedó señalada por 69 por ciento que “los malos tratos a nivel institucional acarrean la mala educación personal”.

A propósito de tal estado de cosas, en su ya citada intervención ante el Parlamento, Raúl había expresado: “Conductas, antes propias de la marginalidad, como gritar a viva voz en plena calle, el uso indiscriminado de palabras obscenas y la chabacanería al hablar, han venido incorporándose al actuar de no pocos ciudadanos, con independencia de su nivel educacional o edad”. Luego de una larga y dolorosa enumeración de inadmisibles conductas y faltas de educación, apuntaba: “Todo esto sucede ante nuestras narices, sin concitar la repulsa y el enfrentamiento ciudadanos”.

No pocos se han percatado de dicha desidia porque 67 por ciento del sondeo indicó entre los motivos de la mala educación que “a nadie le importa”; ello, sin que hubiera variaciones significativas entre los grupos de edades, salvo en el caso de los abuelos, quienes, en comparación con los de menos edad, fueron los que menos señalaron esa causa.

Yuniel Vladimir Velázquez, por ejemplo, con 24 años, declara sin entibiar mucho las palabras “yo no soy nadie para decirle a la gente lo que tiene que hacer. Mientras el problema no sea conmigo…”

Gente caminando por las calles, cruzándolas sin mirar el tráfico. En el diario y agitado acontecer ha ido calando la desidia e indiferencia ante lo mal hecho en no pocos pobladores

El problema es de todos, y todos somos alguien. Nos empodera el sentido de pertenencia por el lugar donde habitamos, el respeto hacia uno mismo y hacia el prójimo, la ética y en general los valores que han fraguado personalidades y conductas. Pero esas tuercas parecen estar flojas en algunos puntos del engranaje social.

Sin embargo, el primer vicepresidente de los consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez recordaba durante un diálogo con la prensa, en vísperas de la sesión parlamentaria, que “a nosotros siempre nos ha distinguido la decencia, el buen comportamiento, no somos una población históricamente chabacana ni vulgar. Con todos esos valores, y debatiéndolo de manera abierta y sin tapujo, comprendiendo que hay una situación económica pero con la voluntad de superarnos a nosotros mismos, podemos resolver esos problemas”.

Violar normas de convivencia ciudadana, incurrir en indisciplinas, usualmente se hace acompañar de mala educación.(Foto: Trabajadores)


El 98 por ciento de los encuestados señaló el botar basura y otros desechos en sitios inapropiados como una de las indisciplinas más frecuentes.(Foto: Abel Padrón Padilla/AIN)


Compartir

Vladia Rubio

Periodista cubana

Se han publicado 12 comentarios


Minerva
 11/7/24 21:03

Han mencionado muchísimas indisciplinas sociales, solo voy a agregar una que he visto muy frecuentemente en la Habana, y es la gran cantidad de hombres que orinan en cualquier lugar, dejando todo apestando y sucio, por supuesto, ya muchos no buscan casi privacidad, no les importa exhibirse, cualquier lugar les sirve y tampoco se amilanan si es de día. Es algo de verdad muy desagradable en todos los sentidos, con la cantidad de bares, cafeterías, pipas de cervezas que hay, debían pensar en una solución para eliminar esta situación.

Niurka
 27/6/20 18:43

La policía debe actuar rápidamente ante las indisciplinas de todos los ciudadanos, para así lograr una sociedad más disciplinada.

JORGE TAVEL
 30/11/19 16:10

Eso es trabajo para la policia y los inspectpres municipales, que deben estar armados de una libreta de multas bien  altas , porque cuando una multa se puede pagar facilmente no implica castigo, ya estamos mas alla de la educacion y el trabajo politico, el orden se aplica con fuerza, no otra opcion en tiempos de tanta indiciplina. por otra parte se debe educar a los niños en conducta social en la escuela.

damaris
 3/9/13 14:32

hola ante todo mis saludos y quisiera decirles q bueno q pusieron esas indisciplinas pero espero q tomen cartas en el asunto xq siempre hablan del tema y no toman accion ninguna espero q esas indisciplinas sean llevadas a cavo y no hablen tanto

Yamilé
 28/8/13 9:20

coincido con los compañeros que emitieron sus criterios con anterioridad y añado que deprime observar como la sociedad que soñó Martí, que construyó Fidel , hoy esté en decadencia por el deterioro de valores , la mala educación y las indisciplinas sociales que laceran todo el ejemplo que un dia representamos para el mundo, es inadmisible que prevalezca el desorden , el sálvese quien pueda, el egoísmo, el individualismo , la indolencia y el sociolismo, cuando nada de ello se corresponde con los principios en los que se fundamenta la sociedad socialista que hemos querido construir.No es a los ciudadanos de forma individual y a los que nos interesa que la sociedad mejore, los que debemos resolver la problemática actual.Corresponde a las instituciones estatales tomar las acciones pertinenentes.Es lamentable que conductas inapropiadas, en lugar de rendir tributo y honor eterno a quienes murieron y lucharon para que tuviéramos un pais digno,profanen su memoria.

armando
 27/8/13 9:51

Saludos: Los enemigos de la revolucion cubana nosaben el aliado que les ha aparecido: " LA INDISCIPLINA SOCIAL EN CUBA" Considero que LA INDISCIPLINA SOCIAL EN CUBA, no es un asunto de PI. Es un asunto de la direccion del pais, en especial de los ministros de: JUSTICIA y del INTERIOR, que son los maximos responsables de prevenir y penar las indisciplinas a "TODOS LOS NIVELES,SIN MIRAR LAS PERSONAS QU LA COMETEN" Se llama a la poblacion a colaborar para eliminar "las acciones vandalicas",pero la poblacion nopuede actuar como debe hacerse. Son las autorudades antes mencionadas "LAS UNICAS" para erradicar estos males. !! DEJEMOS DE PREOCUPARNOS POR LO QUE SUCEDE EN EL EXTRANJERO, Y QUE LAS AUTORIDADES DE GOBIERNO ARRACEN CON ESTE MAL , QUE NO HA DIFERENCIADO NIVEL SOCIAL. VARIAS GENERACIONES VIENEN VIVIENDO EN ESTE AMBIENTE SUCIO E INMORAL , Y !NADIE QUIERE RESOLVER!

Rosa C. Báez
 27/8/13 0:43

Para un compendio generalizado de indisciplinas sociales, pueden escoger la Villa Panamericana... desde calles rotas por entidades sociales como aguas del Este y nunca bien reparadas, y ademas causantes de que hace varios años no hay luz en la parte mas oscura y solitaria del lugar por haber cortado los cables del alumbrado público; contenedores de basura hurtados o cambiados por viejos por los propios camiones recolectores, después de haber sido completados, nuevos; parques chapeados sin recoger la hierba y bancos y jardineras a los que les han robado los bloques, bombillos rotos; construcciones ilegales; hierbazales que dan lugar a acumulación de vectores; varios de los aparthoteles destruidos, canibaleados y vacíos, construcciones que se inician por organismos y luego se suspenden, dejando toneladas de recebo desechado -y apropiado por particulares- hasta consultorios vacíos y también canibaleados... (y no incluyo indisciplinas como asesinato de gatos o peleas de perros, borrachos que alimentan sus crías de cerdos con lo que sacan de la basura, vertiendo fuera lo que no les interesa... en fin, una joya de espacio habitacional... tambien tengo algunas fotos... Yo, ronca de hablar en las asambleas... pero la vida sigue igual...

Equipo de Cubahora
 26/8/13 15:24

Gracias Frank por tu recomendación, pronto haremos contacto contigo por correo. Saludos

FRANK
 26/8/13 14:34

TENGO MUY BUENAS FOTOS PARA SUS ARTICULOS SOBRE ESTOS TEMAS, ADEMAS ESTA HASTA CLASIFICADAS POR TIPO DE INDISCIPLINAS, POR SI LES INTERESA

Tábano
 26/8/13 12:05

CONTINUACION DEL ANTERIOR: NO CREO QUE HACIENDO SOLO LLAMADOS Y EXHORTACIONES A RESPETAR EL ORDEN Y LA LEGALIDAD RESOLVEREMOS EL PROBLEMA. EL CUMPLIMIENTO DE LAS LEYES NO SE EXIGE HACIENDO LLAMADOS DE CONCIENCIA, SE EXIGE SU CUMPLIMIENTO ESTRICTO LE TOQUE A QUIEN LE TOQUE, QUE LOS DISTINGOS LOS ESTABLEZCA UN TRIBUNAL Y LA LEY NO UN FUNCIONARIO SEGUN SU CRITERIO Y SU PATRON DE VALORES. HAY QUE IR TODOS LOS DIAS A LA CONSTITUCION DE NUESTRO PAIS, QUE BASTANTE POCO HABLAMOS DE ELLA, EXIGIR QUE SE CUMPLAN POR LAS INSTITUCIONES TODO LO ESTABLECIDO EN LA REGULACIONES DE TODO TIPO. QUE ES EL CUMPLIMIENTO DE LA LEGALIDAD SOCIALISTA DE LO CUAL ES TUTOR LA FISCALIA GENERAL DE LA REPUBLICA? HABLEMOS DE ESTO PERO CON LOS ACTORES PRINCIPALES PORQUE CASI AHORITA EL PUEBLO ES EL UNICO CULPABLE Y EL UNICO QUE TIENE QUE EXIGIR QUE SE CUMPLA CON LAS LEYES.

Tábano
 26/8/13 11:59

Vayamos por parte, hoy estamos hablando de una problemática que no se ha generado de un día para otro, eL deterioro de un grupo importante de normas es el resultado de la permisivilidad en años por parte de todos los que tienen el deber y la función de hacer bien su trabajo. Nunca como ahora se aprecia la vía pública sin la necesaria presencia policial, tanto del Policía del barrio, como de las patrullas y los jefes de sectores. Cuando tratamos el tema de la basura, el ruido etc, no debemos dejar de tener en cuenta el alto nivel de INSEGURIDAD VIAL que se vive en la capital donde además usted transita kilometros y kilometros y no encuentra un policia ni para denunciar un hecho. Por muchos que la población haga o trate de influir el respaldo legal e institucional debe prevalecer.Todos los que rebazamos los 40 años de edad, sabemos que en los 80 y principio de los 90 no era así. Es hora de llamar las cosas por su nombre, de buscar las causas que generan tales hechos. PARA BUSCARSE PROBLEMAS COMO SER SOCIAL HAY QUE CONTAR CON RESPALDO INSTITUCIONAL CONCRETO, OBJETIVO NO DE PALABRAS.

Raúl
 26/8/13 10:34

Buenos días. No se comenta entre las indisciplinas frecuentes las de las colas: transporte público, tiendas, etc; veo diariamente los "colaos" de todas las edades, incluyendo ancianos muy mayores, que no respetan para nada a sus semejantes. Ya son muy pocos los hombres que dan el asiento en la guagua, y son pocos los que, haciendo uso de su discapacidad(impedido físico, embarazada) arremeten al subir la guagua contra viento y marea y por encima de pies y "cayos" para coger el asiento de impedido físico no sin antes lanzar una bocanada de improperios a la persona que ocupa dicho asiento. Hay de todo y para todos. Es una indisciplina también verder un producto con una pesa del siglo pasado y a todas luces "canibaleada" para robar con más "decencia". Frente a estas indisciplinas sociales (para mí: Delincuencia) debe actuar la policia, para algo está hecha o no? Gracias

Deja tu comentario

Condición de protección de datos