El heroísmo de cinco cubanos

Hoy son héroes reconocidos en todo el mundo. Los nombres de Gerardo Hernández, Fernando González, René González, Ramón Labañino y Antonio Guerrero representan símbolos de entereza y valor para la humanidad progresista que los admira. La misma humanidad progresista que luchó durante años por acabar con su injusto encarcelamiento en cárceles norteamericanas y que tantas muestras de solidaridad y cariño dio hacia su causa.

Pero el heroísmo no comenzó al dar esas muestras visibles de patriotismo. Había iniciado mucho antes, cuando cada uno sacrificó lo más preciado en Cuba para marchar hacia Estados Unidos y enfrentar de manera anónima al flagelo del terrorismo. Misión que cumplieron de manera ejemplar hasta ser descubiertos por los servicios de inteligencia norteamericanos y encarcelados, aquel 12 de septiembre de 1998, hace ahora 20 años.

Formaban parte de la red Avispa que dirigía Gerardo, y las informaciones que brindaron fueron sumamente valiosas y evitaron actos de terrorismo contra nuestro pueblo e, incluso, contra el propio pueblo de esa nación del Norte.

Tras su encierro vendrían años de duras pruebas para cada uno de los Cinco. Sufrieron de incógnito hasta el 2001 en que comenzó el amañado proceso judicial en Miami, la madriguera del terrorismo anticubano, pero cuando se dio a conocer públicamente el caso, una sola palabra les bastó para saber que un día, quien sabe cuándo, serían libres: “¡Volverán!”, dijo Fidel.

Y con esa convicción enfrentaron con entereza los rigores de la prisión, que fue para ellos sumamente severa, incluido el famoso hueco, que los mantenía en una celda a oscuras y aislados del mundo para doblegar el espíritu de resistencia que siempre vivió en cada uno de los Cinco.

La solidaridad internacional fue inmensa y jugó un rol importante de denuncia y concientización a favor de los antiterroristas cubanos. Se crearon Comités a favor de los Cinco en todos los continentes y lugares del planeta: ¡Volverán! ¡Volverán!, era el clamor unánime.

René y Fernando fueron los primeros en regresar, tras haber cumplido con estoicismo sus largos años de encierro. Y llegó aquel inolvidable 17 de diciembre de 2014, en que los gobiernos de Estados Unidos y Cuba declararon el reinicio de las relaciones diplomáticas y Gerardo, Ramón y Antonio (Tony), arribaron a suelo cubano. Ningún instante ha sido tan emotivo para millones de personas.

Luego tendrían la posibilidad de departir con Fidel, y que Raúl les impusiera el merecido título honorífico de Héroes de la República de Cuba, recibido con la consabida humildad por cada uno de los Cinco. La fecha del 24 de febrero de 2015, aniversario 120 del inicio de la Guerra Necesaria de José Martí, realzó el simbolismo del acontecimiento.

Gerardo Hernández, en las palabras de agradecimiento, afirmó: “Este honor que recibimos hoy es a la vez un reto que nos exige estar a la altura de los nuevos desafíos que enfrenta la Revolución. No pocas veces, desde nuestro regreso, se nos han acercado compatriotas para expresarnos que les hubiera gustado tener la oportunidad que tuvimos los Cinco de proteger a nuestro pueblo de agresiones. A ellos y a todos los patriotas cubanos les decimos que nuestra misión no ha terminado y que pueden sumarse”.

Desde entonces han sido consecuentes en cada uno de sus actos: Fernando González Llort, graduado con honores de Relaciones Internacionales, desde junio de 2014, se desempeñó como primer vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) y actualmente lo dirige. Es diputado al Parlamento cubano.

Gerardo Hernández Nordelo, licenciado en Relaciones Internacionales, fue nombrado en mayo de 2016 como nuevo vicerrector del Instituto Superior de Relaciones Internacionales “Raúl Roa García” (ISRI). También es diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Por su parte, el héroe Ramón Labañino Salazar, economista de profesión, se desempeña como vicepresidente de Actividades Profesionales de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC), organización de la cual es Miembro de Honor.

Igualmente, Antonio Guerrero Rodríguez fue nombrado como vicepresidente de la Organización Superior de Dirección Empresarial de Diseño e Ingeniería de la Construcción (OSDE), en su condición de graduado de Ingeniería en Construcción de Aeródromos en la Unión Soviética en el año 1983.

Mientras, René González, piloto de profesión, fue electo vicepresidente de la Sociedad Cultural José Martí. Una labor divulgativa de la obra del Apóstol, en la que René atiende la labor con niños y jóvenes y el trabajo de las sedes martianas instaladas en todo el país.

La Patria se siente orgullosa de cada uno de los Cinco, y espera más de ellos. Gerardo, sobre quien pesaban dos cadenas perpetuas y 15 años más de prisión, en su alegato de defensa afirmó, el 12 de diciembre de 2001:

“Su señoría, la Fiscalía considera, y así lo ha pedido, que debo pasar el resto de mi vida en una cárcel. Confío en que si no es en este, en algún otro nivel del sistema, la razón y la justicia prevalecerán por encima de los prejuicios políticos y los deseos de venganza y se comprenderá que no hemos hecho ningún daño a este país que merezca semejante condena. Pero si así no fuera, me permitiría repetir las palabras de uno de los más grandes patriotas de esta nación, Nathan Hale, cuando dijo: ‘Solo lamento no tener más que una vida para entregar por mi patria’”.

Ahora, con Gema, Ámbar y Gerardito la vida le sonríe, y como dice una de las estrofas de nuestro himno nacional “la Patria os contempla orgullosa”.