Victoria de "infarto" ante Brasil en balonmano panamericano

Otra vez los pronósticos salen por la borda en el deporte. Brasil estaba llamado a vencer, pero Cuba se atravesó y dio la primera nota sorprendente de los I Juegos Panamericanos Júnior con sede en esta hermosa ciudad colombiana.

Hablamos de balonmano para damas, de las acciones competitivas que rompen las hostilidades de Cali 2021. Hablamos de un grande que debió comerse al “chiquito” y salió trasquilado 30x29.

La historia debe recoger que desde el primer segundo del partido se planteó la rivalidad y ninguno de los dos elencos se achicó. Eso dice mucho de las 12 cubanitas vestidas de hermoso blanco, quienes no tuvieron choque preparatorio alguno y una que otra de sus integrantes vienen directamente de la Eide. ¡Uff!

El Coliseo Mundialista Iván Vassilev Todorov fue un magnífico escenario, por más que su pizarra electrónica “cantó” poco después del primer período. Hubo público suficiente para sentir la emoción que despierta el deporte.

Las hostilidades acabaron parejas en la primera media hora: 15x14 a favor de las sudamericanas, superiores en el contragolpe y con mejor orden defensivo, ligeramente.

Las nuestras mostraron brillantez y carencias por momentos, sobre todo dejando brechas en la defensa y ejecutando ataques de poca monta. Sin embargo, no dejaron de presionar nunca y volvieron al marcador más de una vez para irse al descanso cediendo por la mínima.    

Entonces, alguien conocedor a mi lado dijo: en el segundo las cansamos y presionamos (a las brasileñas), tú verás… Y así fue, por más que el partido pareció escapársenos en un momento, con desventaja de hasta cinco goles.

El eje de nuestro juego estuvo en la persistencia de Nahomy de la Caridad Rodríguez Celaya, quien además de asistir a sus “cañoneras” intentó una y otra vez romper el cerco de unas cariocas el doble de altas.

Su esfuerzo capitalizó 13 veces con la estelar Jennifer Amanda Toledo, quien sin aspavientos llenó de huecos la portería verdeamarilla y anotó la diana que dio la victoria a su elenco.

También debe destacarse lo hecho por Liliamnis Rosabal Salazar, dueña de seis goles, incluido el penalti del empate a dos minutos del final. Sangre fría y tiro perfecto como antesala de la “locura”…

Jorge Coll, entrenador de las cubanas, dirigió con la calma de un consagrado. Incluso disfrutó el final sentado. Cuando las cosas no salieron apeló a la banca y hasta se sacó un “conejo del sombrero”: la granmense Melisa Arias, extremo de pequeña estatura que parecía relleno y terminó siendo vital.

Venida desde la Eide de Granma, Arias marcó tres goles en poco menos de un período, defendió la banda derecha y además, seguramente sin querer, dejó en malas condiciones a la portera brasileña con un disparo desde el ángulo directo al rostro.

Volviendo a Coll, atendió insistentemente a la portera Melissa Albarrán, única del equipo y con una actuación positiva y de varios momentos de verdadero lujo. La victoria lleva su sello sin duda.

En cuanto a la solución del partido qué decir… Tras el empate a 29 goles las nuestras se esforzaron en defensa y dejaron para su ofensiva nada menos que 42 segundos. Problemas con la pizarra demoraron el epílogo, pero sirvieron para fraguar el golpe final.

Nahomy y Jennifer construyeron la jugada, generaron tres faltas y abrieron el camino para que la villaclareña que milita en el Rocasa Gran Canaria, de España, taladrara la portería y diera paso al jolgorio.

Brasil es más de lo que vimos hoy. Sus siguientes presentaciones deben ser superiores. Su nómina repartió el protagonismo y quizás sobresalió Fernanda Paulino de Lima, con seis dianas.

Este miércoles se medirán a Dominicana y Cuba a Paraguay. Una victoria más significará el pase a semifinales.