La cubana registró 4.65 metros para escoltar en el podio a la griega Ekaterina Stefanidi y la estadounidense Sandi Morris autoras, respectivamente, de saltos de 4.80 y 4.75 metros que las situaron en el primer y segundo puesto de la lid disputada este viernes en Doha.
La discípula Alexander Navas firmó un concurso complejo, toda vez que tuvo problemas con todas las alturas que pretendió. Los datos oficiales de la competencia dan cuenta de que inició con la varilla sobre 4.25 metros y erró en un par de ocasiones, luego precisó de tres intentos para sobrepasar los 4.45, dos para elevarse sobre 4.55 y otros tres saltos para adjudicarse los 4.65 metros que avalaron su participación. Silva se despidió de la competencia al no tener éxito en sus intentos sobre 4.75 metros. Así finalizó tercera, una posición que le reporta seis unidades para el acumulado general. De manera general, y aunque los fallos en esta modalidad no suelen ser “buen consejero”, la actuación de Yarisley es aceptable, sobre todo si se valora desde el punto de vista cuantitativo ya que esta presentación significó su regreso a la alta competición luego de un 2016 discreto.
Recordemos que la temporada pasada fue especialmente compleja para ella, signada por la inestabilidad de resultados producto, en primera instancia, de un déficit en su preparación. Fue un año aciago para la mejor pertiguista cubana de la historia, del cual se despidió con un séptimo lugar en la final olímpica. La de hoy, es por demás su mejor presentación en territorio del Emir Tamim bin Hamad Al Thani. Solo una vez había llegado Silva hasta Doha para saltar, en 2014 cuando culminó en el segundo lugar amparada por brinco de 4.53 metros.
La Liga del Diamante es un espectáculo. Es un show; el mayor del atletismo en nuestros días y por ello, en cada una de sus paradas se pueden esperar grandes cosas. Tal es el caso de lo sucedido en el lanzamiento de la jabalina para hombres, donde el alemán Thomas Röhler desafió los límites al llevar su dardo hasta los 93 metros con 90 centímetros. Un jabalinazo, literalmente, que lo sitúa segundo en el listado histórico de esta disciplina dominada a placer por el checo Jan Zelezny.
Röhler no es un desconocido, ganó los Juegos Olímpicos de Río 2016 y había ganado el diamante en 2015, no obstante, lo hecho lo lleva hasta una posición inmejorable cuando toque hablar de favoritos para esta especialidad. El alemán de 26 años ha hecho historia con su incursión. Ha dado, sin dudas, un golpe de autoridad al alcanzar una distancia que desde la retirada de Jan, allá por el año 1996 no se conseguía. Una idea más exacta llega cuando al hurgar en los archivos históricos de esta especialidad se puede constatar que el último el superar los 93 metros fue el finlandes Aki Parviainen, cuando en junio de 1999, logró 93.09 metros. ¿Qué les parece?
La fecha dejó otras actuaciones de interés: Elaine Thompson (22.19) aventajó a Dafne Schippers (22.45) en los 200 metros, Akani Simbine (9.99) se apuntó la victoria en los 100 metros entre los hombres mientras que el bahamés Steven Gardiner (44.60) dejó atrás a LaShawn Merrit (44.78) en los 400 metros y Kendra Harrison (12.59) dominó los 100 metros con vallas.
Mutaz Essa Barshim, con 2.36 metros en el salto de altura, fue profeta en su tierra y Abderrahaman Samba (48.44) le imitó en los 400 metros con vallas. En el triple salto, Christian Taylor consiguió una buena victoria al imponerse con 17.25 metros sobre su compatriota Omar Craddock (17.08) y el cubano devenido azerí Alexis Copello (16.81), segundo y tercero por su orden.
Caster Semenya (1:56.61) fue la mejor de los 800 metros en una carrera que atestiguó el debut de Genzebe Dibaba en esta distancia. La etíope, múltiple recordista del orbe, detuvo los relojes en 1:59.37 minutos, marca personal que la ubicó quinta.
Michelle Carter (19.32) hizo valer su condición de titular bajo los cinco aros superando a Anita Martón (18.99) y a la bielorusa Aliona Dubitskaya(18.90). Valerie Adams, la gran figura de los últimos años en la impulsión de la bala anunció recientemente que se perderá esta temporada debido a que está esperando su primer hijo. Un acontecimiento que calificó como el más importante de su vida: “…más grande que cualquier medalla de oro”.
La recordista del mundo para los 3000 metros con obstáculos, Ruth Jebet (9:01.99) fue superada por las kenianas Hyvin Kiyeng (9:00.12) y Beatrice Chepkoech (9:01.57). El cuarto puesto correspondió a la joven Celliphine Chepteek Chespol con un tiempo de 9:05.70 minutos que se convierte en récord mundial para menores de 20 años.
La próxima parada en este viaje diamantino será Shangai; programada para el venidero sábado (13). Allí Cuba estará pendiente de las actuaciones de Denia Caballero y Yaimé Pérez en el lanzamiento del disco. Una prueba que debuta con nuevo formato; no olvidar el atractivo agregado tras anunciarse que ahora hombres y mujeres lanzarán juntos.
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