La temporada del cubano Jasiel Rivero en el máximo nivel del baloncesto español estuvo marcada por máximos estadísticos en el orden individual pero pobres resultados para su club, el Valencia Basket, que no logró llegar a fases definitorias en la disputa de títulos.
“No fue la mejor campaña, el equipo y la afición esperaban resultados positivos que al final no obtuvimos, en las rondas de clasificación sí nos fue bien, pero en los juegos de eliminación directa decepcionamos en la liga y en la Copa del Rey, torneos en los que caímos en cuartos de final”, declaró el capitalino.
El caribeño logró máximos de carrera para un partido desde su llegada a España, con 27 puntos, 5 robos y 3 asistencias, casualmente con el Saski Baskonia como oponente, sin embargo, sus promedios descendieron respecto a la campaña precedente, con medias de 10 puntos, 4.1 rebotes y 0,3 tapones, un ligero descenso que tuvo mucho que ver con un menor tiempo en cancha.
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“Los jugadores nunca estamos conformes con los minutos, siempre queremos estar todo el tiempo en la duela, pero jugué más de lo que esperaba con el Valencia, que es uno de los grandes de España, no estoy satisfecho, aunque contento por la confianza del cuerpo técnico cada vez que salía a la cancha”, aseguró Rivero.
Un año vestido de taronja le resta a Jasiel, quien se confiesa motivado por disputar el mejor torneo de clubes en el Viejo Continente, la Euroliga, pues la exclusión de los clubes rusos de la competición abrió las puertas a la escuadra valenciana.
De regreso en La Habana, tras concluir el curso 2021-2022, Rivero afronta su responsabilidad como capitán y figura principal del equipo Cuba que enfrentará en la ventana mundialista a México, el primero de julio en Chihuahua, y a los Estados Unidos, el 4 de julio en el Coliseo de la Ciudad Deportiva.
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“Nuestro objetivo es ganar, a pesar de que estamos eliminados; si bien es cierto que hemos dado pelea contra equipos superiores, el progreso tiene que venir acompañado de victorias en la duela y el partido como locales frente a Estados Unidos puede ser un punto de quiebre a favor de la selección nacional”, concluyó Jasiel.
Con 28 años, en la cima de su carrera deportiva, el ala-pívot habanero continúa con la misma ilusión de aquel adolescente que sorprendió a todos con su talento en la Liga Superior de Baloncesto, agregar un título a vitrina de la selección nacional, huérfana de trofeos desde hace tiempo.
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