El comisionado de la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC), Juan Francisco Puello, descartó la posibilidad de organizar por ahora una Serie del Caribe en Cuba.
Es mi sueño, es el lugar donde nacieron estas citas, dijo a la prensa cubana acreditada en el evento. Dejó abierta una posibilidad, pero enfatizó en que primero es preciso resolver el problema de la licencia, que no está en manos de la Confederación. Todo depende de arreglar un tema de otra índole, más bien político (bloqueo), precisó.
En el diálogo acotó que el acuerdo firmado entre la Federación Cubana de Béisbol y las Grandes Ligas es un convenio de apertura, pero no expide la licencia para que peloteros vinculados a equipos de las Mayores puedan jugar en la Isla.
Hasta este momento es así, un estamento inexplicable, injusto, que no nos permite a nosotros contratar con la Federación Cubana, expresó. «Dios quiera que se resuelva y antes de que yo salga de aquí se pueda dar, que se haga realidad el sueño. Cuando se levante esa disposición estaremos en Cuba», aseveró.
El directivo reconoció el esfuerzo de los organizadores panameños debido a la premura con que montaron el evento, y que solo espera de parte del público el respaldo que se merece.
Aseguró que la condición para tener una Serie del Caribe con proyección internacional es empezar la temporada regional un poco antes, para no coincidir con la realización de otros eventos que tradicionalmente reclaman los servicios de la televisión y los ponen a ellos en una situación de desventaja, significó.
Debemos unificar nuestros torneos para terminar la Serie el día 2 o 3 de febrero a más tardar. Corroboró que la justa de 2020 será en Puerto Rico. «Allí hay un gran entusiasmo, esa Serie ya está caminando», concluyó.
EL HOMBRE DE LA RECTA CORTADA
La presencia del panameño Mariano Rivera fue un momento estelar en la recién iniciada Serie del Caribe 2019.
El clásico regional se enriqueció con la rueda de prensa del exlanzador de Grandes Ligas efectuada en el Estadio Nacional Rod Carew, suceso que atrajo la atención de más de medio centenar de periodistas y directivos.
En cierto modo, fue la noticia de la jornada, aunque en ese debut disputaron sus partidos los conjuntos de Estrellas Orientales versus Cangrejeros de Santurce, y Cardenales de Lara ante
Charros de Jalisco, con victoria para los primeros de 3-1 y 5-1, respectivamente.
El llamado pitcher de la recta cortada, lanzamiento con el cual maniató a sus adversarios en las postrimerías de los juegos, a una de las primeras preguntas respondió con humildad: «Quiero que me recuerden como el hombre que lo dio todo por el deporte, por su país y su gente».
Tras agradecer la invitación a la apertura del evento, dijo sentirse contento con la realización de la justa en Panamá y reconoció la influencia de su tierra natal en su suerte como persona y atleta.
El exapagafuegos, alejado del béisbol activo desde 2013, se mostró muy feliz por ser el primero exaltado con el voto unánime al Salón de la Fama de las Grandes Ligas, en Cooperstown, Nueva York. Visité ese sitio histórico y fue emocionante tocar la placa de Rod
Carew, Roberto Clemente y la de otros que nos abrieron el camino, expresó.
El ídolo panameño reconoció la calidad de los peloteros cubanos, y recordó en particular el aporte del entrenador José M. Cortina en los inicios de su carrera. Admitió estar honrado de haber llevado el número 42 en su uniforme, el mismo que usara el legendario Jackie Robinson, primer afroamericano en las Mayores y el hombre que cambió la historia del béisbol. «Ahora tengo la satisfacción de ser quizá el último pelotero en utilizar ese número», dijo.
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