Creo que no descubro el Mediterráneo si les comento que todas las pruebas de dominio del balón, son bien complicadas. Unas menos, otras más, lo cierto es que el entrenamiento es agotador, incluso, tal fuerte como el de un jugador de fútbol.
Pero el capitalino Erick Hernández, cada día me hace pensar más en que, para él, los retos de intento de récords mundiales se convierten en un control casi absoluto de la esférica, del cual ningún otro dominador del mundo puede presumir. Fíjense si su dominio es casi perfecto, que el balón no se cae al suelo ni siquiera en el calentamiento.
Este sábado, en el Hotel Copacabana, de la capital cubana, el afamado especialista impuso récord mundial en la modalidad de solo con la cabeza durante un minuto, al conectarle 350 toques. Así, Erick rompió la anterior cota de 341, que ostentaba el chino Gao Chong, desde el 3 de noviembre de 2007 en Beijing, China.
“Con este intento persigo dos objetivos esenciales: apoyar el triunfo de Nicolás Maduro en las elecciones de mañana, en Venezuela y esperar que esta plusmarca sea homologada y se lleve al libro de Récords Guinness”, aseveró Erick a Cubahora.
En cuanto al desarrollo de la prueba, explicó que estuvo calentando cerca de 40 minutos y que la temperatura calurosa del local le favoreció mucho, pues en estas modalidades de tiempo corto hay que estar bien caliente, para así poder aumentar el ritmo de las pulsaciones. Además, aseguró que más adelante, podría acercarse a los 380 toques, algo que ya ha hecho en los entrenamientos.
“Esta es una de las modalidades más difíciles, pues hay que tener estabilidad, preparación física, equilibrio y mucha coordinación al efectuar los toques. El trabajo en las casi cinco horas de entrenamiento diario, consistió en fortalecer los músculos que están alrededor de la cadera y en la región del muslo: cuádriceps y bíceps femoral, además de trabajar las semicuclillas con pesos y realizar ejercicios para mejorar la velocidad de reacción”, sentenció Erick.
Y aunque aún no ha definido cuál será su próxima prueba en el intento de romper el récord mundial, confesó que podría ser la de pegarle a la esférica más tiempo en la posición de sentado.
Entre sus principales cotas universales de dominio del balón, el capitalino posee la del hectómetro (17.83 segundos), la de maratón (7:17 horas) y más tiempo pegándole con todo el cuerpo (19:10 horas).
Erick cuenta con dos récords Guinness: por tocar el balón en 319 ocasiones durante un minuto con la cabeza, y por pegarle a la pelota con los muslos durante una hora y 28 minutos.
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.