Cocodrilos acechan la final

La selección de Matanzas se puso a un paso de la gran final de la Serie Nacional 52, tras la victoria alcanzada este martes sobre Sancti Spíritus, cuatro carreras por tres, en lo que constituyó la tercera sonrisa al hilo jugando en el Palacio de los Cocodrilos, por lo que ahora comandan el play off con ventaja mínima de tres partidos por dos, a un paso de llegar a la gran final.

Desde el ining de apertura salieron impetuosos los matanceros al fabricar tres carreras ante los envíos del abridor Ángel Peña. La primera de la entrada la trajo el cuarto en la tanda Yurisbel Gracial, quien anotó gracias al jonrón de Yadiel Hernández, el cual sirvió para redondear el racimo. De apagar la euforia de los Cocodrilos en el arranque se encargó Yoen Socarras. 

Este batazo de Yadiel tuvo como aspecto más significativo que fue por la banda derecha, siendo este zurdo y acostumbrado a sacar la mayoría de las veces la pelota por la parte izquierda.

La igualada para los Gallos llegó en el tercer ining cuando le ligaron bien a Frank Navarro y a los dos primeros relevistas Frank San Martín y Maikel Martínez. Los impulsores fueron Jorge Jhonson, Yunior Paumier y Liván Monteagudo, en la entrada donde pudieron mostrar su poder ofensivo porque el resto se vieron totalmente limitados

En la parte baja de ese propio tercer episodio se decidió el encuentro con la cuarta y última anotación para los matanceros, teniendo como máximo protagonista del desenlace a Yariel Duque remolcando desde la intermedia a su compañero Lázaro Herrera. Para Duque fue una buena jornada al bate al conectar de 4-2, aunque apostado con el guante en primera puso varias veces en peligro el resultado para su equipo.

A partir del cuarto capítulo el pizarrón solo mostró ceros gracias a la labor de ambos cuerpos de lanzadores, no sin antes pasar Cocodrilos y Gallos por varios apuros.

Los refuerzos Yaisel Sierra y Norge Luis Ruiz se unieron para la causa espirituana. Sierra lanzó dos y un tercio con un solo jit y par de ponches, mientras Norge, fuerte aspirante al título de Novato del Año, trabajó durante tres completas con apenas dos incogibles y tres retirados por la vía de los strikes.

Para el camagüeyano Ruiz esta es una actuación que levanta su autoestima porque a pesar de tener nueve ganados en el campeonato, sus dos salidas como abridor en la semifinal fueron totalmente discretas.  

Lázaro Blanco salió airoso para la causa de los Cocodrilos con sólido trabajo que se extendió a cinco episodios, en los que no permitió carreras, toleró un trío de sencillos, ponchó a dos y regaló igual cantidad de boletos. Para concretar la sonrisa, Blanco tuvo que ser ayudado por Yoanni Yera y el salvador Félix Fuentes.

En el noveno ining con un out y corredor en primera Yulieski Gourriel pegó rolling de frente al campo corto, sin embargo José Miguel Fernández pifió la bola, lo que mantuvo con vida a los Gallos y comprometió sobremanera el triunfo de los suyos.

Para evitar males mayores Fuentes tuvo un cierre de lujo: primero sorprendió robando en la inicial a Gourriel y posteriormente le recetó ponche a Eriel Sánchez, para concretar la alegría.

En el momento de la victoria hubo una explosión de algarabía en el Victoria de Girón, sin embargo de los ojos de José Miguel lo que brotaron fueron lágrimas, como una muestra fehaciente de lo que significa amor la camiseta, valentía y vergüenza deportiva. Al encuentro de Fernández fueron muchos, en lo que siempre se recordará como una de las pocas veces donde el que comete el error resulta agazajado.

La tropa de Víctor Mesa completa así la barrida jugando en casa, en lo que va siendo una gran remontada ya que cayeron en sus dos primeras presentaciones cuando jugaron como visitantes en el José Antonio Huelga. De completarse, sería la segunda vez que los yumurinos le dan caza a los yayaberos, porque en los cuartos de final de la temporada anterior supieron borrar una desventaja de 1-3.

Las acciones se trasladan a la valla de los espirituanos para jugar el próximo viernes el sexto partido en lo que debe ser otro duelo entre Ismel Jiménez y Joel Suárez. De salir airosos los visitantes aseguran su presencia en la finalísima, pero de ganar los locales será necesario jugarse el siempre atractivo séptimo desafío.