Atletismo: Europa se toma el pulso en Ámsterdam

El Estadio Olímpico de Ámsterdam acogió, del 6 al 10 de julio, el Campeonato Europeo de Atletismo 2016. Una lid que transcurrió marcada por la ausencia de Rusia, suspendida de todo evento internacional por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF), y cuyo desenlace final encumbró a Polonia a la cima del medallero general.

En materia de resultados, hubo poco para referir en mayúsculas y aunque de manera general buena parte de los favoritos se ratificaron como ases continentales, siempre quedó espacio para victorias sorpresivas como en el lanzamiento de la jabalina para hombres, donde ganó el lituano de 24 años Zigismunds Sirmais gracias al 86.66m, el mejor disparo de su vida, para batir dos establecidos de la talla de Vítezslav Veselý (83.59) y Antti Ruuskanen (82.44).

En el hectómetro, los anfitriones festejaron por partida doble por intermedio de Churandy Martina, ganador con 10.07 y Dafne Schippers, autora de 10.90 segundos. La esbelta atleta no corrió los 200m y ello abrió las puertas de la meta a la británica Dina Asher-Smith, quien dominó la distancia con crono de 20.32 segundos. En ambas pruebas, la búlgara Ivet Lalova-Collio se agenció la plata con 11.20 y 20.52 segundos, respectivamente. El español Bruno Hortelano fue el mejor en el sector masculino con 20.45; enfrascado en una destacada aventura europea que completó con un meritorio cuarto puesto en los 100m, con tiempo de 10.12 segundos.

Como se esperaba, Greg Rutherford se impuso en el salto de longitud con 8.25m mientras que la serbia Ivana Španovic, con 6.94m y mucha estabilidad en su concurso, le imitó entre las damas.

Christina Schwanitz (20.17m) venció en la impulsión de la bala y habría ganado con cualquiera de sus restantes registros ante la débil oposición de la húngara Anita Marton, segunda con 18.72m.

Invencible anda Anita Wlodarczyk. En el Reino de los Países Bajos se apoyó en un mejor disparo de 78.14m en el lanzamiento del martillo. Betty Heidler hizo la mejor competencia de su temporada, pero los 75.77m que alcanzó a registrar ni siquiera valen para inquietar a una Wlodarczyk que también patentó envíos de 77.11, 77.65 y 78.12. Con lo hecho y con lo visto, solo un nefasto designio del destino podría apartar a la polaca del título olímpico.

Otra que se mueve con soltura es Sandra Perkovic, quien hizo de las suyas entre el cuarto y el quinto intento para desbancar, con disparos de 66.03 y 69.97m, al escuadrón germano. En Ámsterdam le escoltaron Julia Fischer (65.77), Shanice Craft (63.89) y Nadine Müller (62.63), por su orden. La croata marcha muy bien y compite con la seguridad de antaño. Sus incursiones se cuentan con victorias, aunque se le ve ansiosa. Ávida, quizás, de borrar el “mal” sabor de aquella plata que en Beijing, a nosotros —los cubanos— nos supo a gloria.

De cara a Río 2016, sin dudas la europea tiene en las cubanas a dos de sus principales rivales, quienes quedan nuevamente convocadas a mostrar las mejores cartas de su juego para pulsear por la victoria. En el Mundial de Beijing, un gran disparo inicial de Denia Caballero evocó los nervios y desajustó esa maquinaria de apellido Perkovic. Ejecución perfecta de una estrategia que surtió el efecto deseado y dejó a la croata sin el título más importante en un año que, siendo justos, no había sido el de mayor estabilidad para ella.

Y a propósito de estrategias, no siempre llevan a navegar con suerte. Fe de ello puede dar Renaud Lavillenie, que sucumbió en esta edición de los Campeonatos Europeos de Atletismo y tuvo que marcharse sin alturas válidas en el salto con pértiga. El galo apostó por economizar esfuerzos, pero los 5.75m le jugaron una mala pasada y no pudo validar su actuación. De haber sido pródigo su arranque, habría ganado sin muchas complicaciones un concurso discreto en el que finalmente se coronó el polaco Robert Sobera, con 5.60m.

Entre las féminas, fue la griega Ekateríni Stefanidi quien se vistió de oro con 4.81m, nuevo récord para estos torneos. La atleta helénica ha mantenido un excelente nivel durante todo el año y se muestra como una de las figuras a considerar en los cercanos juegos olímpicos, amparada por otros saltos de alcurnia, como el 4.86m que la coloca segunda del listado de este año al aire libre. Liza Rizih, con 4.70m, y la joven sueca Angelica Bengtsson, con 4.65m, completaron el cuadro de honor de esta especialidad que despierta especial interés en nuestra isla.

Yarisley Silva, quien volverá a escena este 15 de julio en el marco de la Liga de Diamante, marcha entre las punteras del año con 4.84m. Es fiel candidata al podio y sus opciones de reeditar y/o mejorar su actuación olímpica de Londres encuentran la oposición de otras como las estadounidenses Sandi Morris (4.83) y Jennifer Suhr (4.82) así como la actual líder del ranking Fabiana Murer (4.87m). Otro duro escollo podría ser la rusa Yelena Isinbayeva, avalada con un regreso de 4.90m, aunque todo parece indicar que la IAAF no comulgará con el COI y dejará sin opciones de contender a la gran mayoría de los rusos que solicitaron su permiso.

El alemán David Storl (21.31 en la impulsión de la bala), el italiano Gianmarco Tamberi (2.32m) y la incombustible española Ruth Beitia (1.98m) en el salto de altura, así como los representante de Turquía Yasmani Copello Escobar (48.98 en los 400m con vallas) e Italia Libania Grenot (50.73 en los 400m) también se titularon en el viejo continente. Por cierto, en esta última prueba la campeona olímpica Christine Ohuruogu solo pudo ser cuarta, con discretos 51.55 segundos.

Polonia (6 de oro, 5 de plata y 1 de bronce) ganó en la tabla de medallas, por delante de las potentes selecciones de Alemania (5-4-7) y Gran Bretaña (5-3-8). Los títulos de los polacos llegaron de las actuaciones de Adam Szczot (1:45.18 en los 800m), Piotr Malachowski (67.06 en el lanzamiento del disco), Pawel Fajdek (80.93 en el lanzamiento del martillo y Angelika Cichocka (4:33.00 en los 1500m), así como los ya referidos de Sobera y Wlodarczyk. Todos fueron protagonistas en un equipo en el que sobresalen las actuaciones de varios atletas jóvenes, nacidos en la década de los años 90.

En los relevos, Gran Bretaña (38.17), Francia (38.38) y Alemania (38.47) dominaron por su orden el 4x100 masculino mientras que Bélgica (3:01.10), Polonia (3:01.18) y Gran Bretaña (3:01.44) se hacían con los mejores lugares en la posta larga.

Entre las mujeres, el podio del 4x400m fue ocupado por Gran Bretaña (3:25.05, mejor marca del año), Francia (3:25.96) e Italia (3:27.49). Aunque en esta prueba importan —y mucho— las actuaciones de Alemania (3:27.60), Ucrania (3:27.64), Holanda (3:29.23) y Rumania (3:30.63) ya que sus prestaciones en la urbe holandesa contribuyeron a desbancar del cupo olímpico a la estafeta cubana. Sin marca oficial en 2016, las nuestras fueron relegadas al lugar 18 del escalafón que ofrece boleto a Rio a las primeras 16 postas del planeta. Llama la atención que nuestro equipo se confió a su suerte y aparentemente dejaron todo a merced de lo hecho el pasado año durante el Mundial de Relevos y los Juegos Panamericanos, y su average de 3:29.54 terminó por ser insuficiente. La suspensión de Rusia abre las puertas a Bahamas, clasificada con 3.29.39 minutos de promedio y completa una clasificación que otorgó sus últimos cupos a las selecciones de Nigeria, Ucrania, Italia, Alemania, India, Rumania y Holanda.