El mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, y su similar de Guyana, Irfaan Ali, tendrán un encuentro este jueves para dialogar sobre la disputa territorial por el Esequibo.
La cita, que se celebrará en San Vicente y las Granadinas, presidente pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, y contará con la observación de Brasil y un subsecretario general de las Naciones Unidas, ocurrirá en un contexto de creciente tensión entre ambas países, después de que la inmensa mayoría de los venezolanos votaran el pasado 3 de diciembre un referendo a favor de la anexión a su territorio nacional de la región del Esequibo.
De acuerdo con la información publicada por el gobierno brasileño, envuelta también en el conflicto por su vínculo fronterizo con las dos naciones, Luis Inácio Lula da Silva instó a Maduro a evitar medidas unilaterales que pudiesen agravar las tensiones con Guyana. Y recordó la declaración firmada por Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay que llama a ambas partes a buscar una solución pacífica.
Se trata de un conflicto histórico, que halla sus orígenes en la época colonial, cuando Guyana formaba parte del Reino Unido. Durante décadas Venezuela ha defendido su reclamo territorial por considerar injusto el Laudo Arbitral de París en 1899.
En febrero de 1966, después de cuatro años de negociaciones, Venezuela, Gran Bretaña y la entonces Guyana Británica firmaron en Ginebra un acuerdo que estableció los mecanismos para revisar la controversia y buscar soluciones satisfactorias. En marzo de 2018, Guyana solicitó a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) iniciar un proceso contra Venezuela, pidiéndole que le confirmara la validez jurídica y vinculante del ya mencionado Lauro Arbitral.
Tras considerarse el CIJ en marzo de 2020 competente para estudiar la demanda de Guyana, el 1ro de diciembre de este año ordenó a Venezuela como disposición provisional en espera de una decisión final no tomar ninguna medida “que modifique la situación actualmente prevalece” en el Esequibo. Sin embargo, el gobierno venezolano desconoce la autoridad del CIJ.
La escalada actual se desarrolla, además, en un escenario marcado por el descubrimiento de importantes yacimientos petroleros en la región y por la autorización de Guyana a la compañía estadounidense Exxon Mobil de extraer el crudo en aguas territoriales en disputa. A lo que se le suma las recientes operaciones militares de cooperación entre el ejército guyanés y el Comando Sur de Estados Unidos.
Al respecto, Irfaan Ali no descartó la futura presencia de bases militares de EE.UU. y dijo que se haría todo lo que fuese necesario para garantizar la soberanía y la integridad territorial de Guyana. Asimismo, aseguró que las reservas de petróleo del Esequibo se explotarían en función de la seguridad energética de la región. Y, aunque dejó la puerta abierta para una posible inversión petrolera de Venezuela, reafirmó que las reservas únicamente pertenecen al estado guyanés.
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