Venezuela: elecciones determinan futuro nacional

Las elecciones presidenciales en Venezuela que se celebran hoy con el presidente Nicolás Maduro como favorito, significan más que la eventual reelección del candidato socialista, que si gana cumplirá un tercer mandato. Lo que se juega en la tierra de Hugo Chávez es la continuidad de un sistema político inclusivo o el retorno al capitalismo salvaje dejado atrás hace 25 años.

Los comicios se efectúan en coincidencia con el 70 cumpleaños de Chávez, el líder revolucionario que inició el actual proceso bolivariano y, según proclama Maduro, será el mejor regalo que el pueblo podría entregarle en fecha tan memorable.

Aún cuando el presidente aparece como favorito para continuar en el Palacio de Miraflores, la ultraderecha venezolana apoyada por similares de otras partes de América Latina y organismos internacionales mantienen una política agresiva, en tanto amenazan con declarar fraude si las previsiones de victoria se validan para el Gran Polo Patriótico y su candidato oficialista.

En las últimas semanas, en medio de la campaña electoral finalizada el pasado viernes, el postulado de la ultraderecha  Edmundo González Urrutia, un desconocido exdiplomático de 74 años que es la cabeza visible de la inhabilitada exdiputada María Corina Machado, ha participado en diversas actividades proselitistas desde donde han atacado ambos a la Revolución Bolivariana. A base de mentiras, han tejido una campaña mediática apoyada por los grandes medios hegemónicos de comunicación para tratar de confundir a los votantes y crear la desestabilización nacional.

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Esta pareja, que ella comanda, pues él no es un político de carrera y deviene un monigote de la lideresa de la contrarrevolución que incluso invita al pueblo a lanzarse a las calles contra Maduro, busca crear un clima de terror en un día tan importante para la política local y regional.

En contraste se conoció que integrantes del partido opositor Vente Venezuela, dirigido por Machado, abandonaron sus filas para apoyar al mandatario en el municipio San Francisco, en el estado de Zulia (noroccidente), lo cual no fue un hecho aislado pues tales separaciones han ocurrido en otros territorios..

De lo que suceda hoy en Venezuela deriva el futuro no solo de esa nación que resiste y crece a pesar de las cerca de mil sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea, sino que también está en juego la geopolítica de la región, donde conviven gobiernos progresistas e incluso de ultraderecha, como sucede en Argentina.

Las palabras de los neofascistas son más que amenazas. Hace solo unas horas, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) detuvo a seis personas en las proximidades de una subestación eléctrica en San Antonio, estado de Táchira, noroccidente del país, a quienes se les ocuparon materiales para ser utilizados en presuntos sabotajes.

Entre ellos, 15 metros de cables de alta tensión, bombonas de oxígeno industrial, una mandarria de 10 kilogramos, dos machetes, un vehículo marca Ford y otro Chevrolet, cuatro teléfonos celulares y otros recursos.

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El Comandante Estratégico Operacional de la FANB, general en jefe Domingo Hernández, informó en la red social X que esta madrugada también fue detenido un individuo que trató de ingresar a un centro de votación en el estado Mérida.

Ello significa que pese a las medidas tomadas por la fuerza militar para evitar contingencias de la contrarrevolución para entorpecer las elecciones, la ultraderecha no descansa en sus planes de quebrar la paz nacional.

El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis  Amoroso, confirmó que el Estado ¨está preparado para contrarrestar cualquier tipo de acción, inclusive, las que “vayan más allá de simplemente expresarse de manera retórica”.

Según reporta Prensa Latina, Amoroso comentó en ese sentido sobre todo lo que “hemos tenido que pasar para que se dé limpio este proceso y podamos garantizar la voluntad absoluta del pueblo venezolano”.

En otro orden, denunció la campaña de desprestigio contra el árbitro electoral venezolano en algunos medios de comunicación y gobiernos extranjeros que “tratan de entorpecer” el proceso electoral de este domingo.

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Aunque Maduro recibió en los últimos días el apoyo de varios de los nueve candidatos opositores, Amoroso refirió que el CNE los invitó a todos a firmar un documento que reconoce la voluntad popular expresada en las urnas. Solo dos contrincantes no lo hicieron.

Las últimas semanas fueron escenario de una campaña electoral sin precedentes por parte de Maduro, quien visitó  la mayoría de los 23 estados del país y recibió muestras de respaldo y confianza en el futuro venezolano, si este quedara en sus manos.

En esos multitudinarios mítines, el también presidente del mayoritario Partido Socialista Unido de Venezuela demostró, con pruebas fehacientes, el desarrollo del país a pesar de la cruenta guerra híbrida lanzada en contra del pueblo y el gobierno socialistas y sus planes de crecimiento..

Son 21 millones 620 mil 705 los electores convocados a las urnas este día, los cuales acudirán a los 30 mil 29 colegios y más de 15 mil mesas habilitadas en  el país.

Más de 600 veedores están en Venezuela en representación de numerosos organismos internacionales para seguir el curso de los comicios.

La gran incógnita es si los políticos opositores más recalcitrantes acatarán los resultados del escrutinio o si, como han amenazado, tomarán las calles de las principales ciudades del país suramericano para intentar, de nuevo, desacreditar a Maduro y el proceso electoral.