Tensión en Ecuador (+ Audio)

Dos explosiones de coches bombas en las últimas horas, motines, amenazas de muerte a políticos, estado de excepción. Ecuador vive una crisis de inseguridad, violencia, denuncias y guerras internas, en medio de una incertidumbre electoral que decidirá si la nación meridiana del mundo retorna al progresismo o se mantiene como un Estado copado por el narcotráfico y la corrupción.

El próximo 15 de octubre, los votantes decidirán en balotaje si entra al Palacio de Carondelet la candidata de Revolución Ciudadana (RC), Luisa González, o el joven y millonario empresario Daniel Noboa, de la alianza derechista Acción Democrática Nacional (ADN), favorito de la oligarquía local y de Estados Unidos (EE.UU.), en un balotaje con pronóstico reservado.

Quito, la capital, fue escenario del estallido de dos vehículos este miércoles y jueves, en lo que la Policía Nacional considera obra de las bandas armadas de narcotraficantes. Este jueves, también en la capital, ocurrió un incendio luego de que internos del Centro de Adolescentes Infractores Virgilio Guerrero,  prendieran fuego a colchones en protesta por las condiciones de vida.

El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, informó a la prensa, sin dar detalles, que tres granadas fueron detonadas a distancia, pero en ninguna de las acciones hubo víctimas fatales pues las explosiones sucedieron en horas de la noche, cuando los ciudadanos permanecen en sus hogares como medida de protección.

Aunque el presidente Guillermo Lasso dictó el estado de excepción a partir del asesinato el 9 de agosto pasado del candidato presidencial Fernando Villavicencio, la delincuencia organizada mantiene al país en un estado de tensión que empaña los preparativos de las elecciones generales anticipadas a las que convocó durante su decreto de muerte cruzada cuando también ordenó el cierre de la Asamblea Nacional (Parlamento).

El desorden político en Ecuador, donde 10 años atrás una situación de este tipo parecía imposible bajo el gobierno de RC, se hizo aun más notorio cuando Lasso asumió el poder al suceder en Carondelet a Lenin Moreno, una figura mísera que fingió suscribir los postulados políticos izquierdistas del presidente Rafael

Correa y se vendió al mejor postor capitalista instalando el sistema neoliberal en el país y dejando sueltas las riendas al narcotráfico que ahora controla la mayoría de los poderes de la nación.

Moreno y Lasso quebraron una década de prosperidad impulsada por Correa, a quien han tratado de doblegar sin éxito con falsas acusaciones emanadas de un Ministerio Público dominado por la mafia. La llamada pareja diabólica deja un país destruido en sus estructuras básicas. Y aunque Noboa, si ganara, no tendría que hacer mucho esfuerzo para mantenerse en el gobierno, tampoco podría poner al día los muchos asuntos embarazosos en que estos dos figurines han colocado la paz, la seguridad, la economía y la sociedad meridiana del planeta.

Mientras Quito era estremecida por los atentados, en la ciudad andina de Cuenca, provincia sureña de Azauay, agentes penitenciarios continúan secuestrados por reos que no han presentado reivindicaciones. Son 39 999 las personas detenidas en Ecuador, una gran parte integrantes de bandas rivales del crimen organizado que acostumbran enfrentarse dentro y fuera de los recintos, desde donde dirigen los movimientos externos.
Wagner Bravo, secretario de Seguridad Publica y del Estado, en entrevista con FM Mundo, comentó que estas acciones, tanto en las cárceles como en las calles, podrían ser la repercusión por el traslado a diferentes cárceles de las seis personas detenidas por su presunta implicación en el asesinato de Villavicencio.
También los reos de Cuenca, según el directivo, protestan por la intervención de la cárcel de Latacunga, provincia de Cotopaxi. En ese lugar hay ahora más de 1 800 efectivos de la Policía y de las Fuerzas Armadas encargados de extraer armas, municiones y explosivos del recinto, introducidas con la complicidad del personal encargado de la cárcel.

POLICIA INVOLUCRADA EN ASESINATO DE VILLAVICENCIO

Otro escándalo explotó esta semana en torno al gobierno del banquero Lasso, uno de los hombres más ricos de Ecuador, cuando el periodista Andersson Boscán, del portal digital La Posta, reveló que la Policía y la Fiscalía General del Estado (FGE) conocían desde hace cinco meses que había un plan de atentado en marcha en su contra, Villavicencio y el coronel José Luis Erazo.

"Tres meses y medio después, afirmó Boscán, el candidato Villavicencio fue asesinado [...] En manos de Fiscalía y de la Policía estuvo esta información, y nunca abrieron una investigación¨.
En una denuncia que justifica el juicio político contra Lasso desde la Asamblea Nacional –que abortó al dictar la muerte cruzada- el periodista vinculó las advertencias de lo que presume partió de organizaciones criminales cuando La Posta en enero pasado expuso la existencia de una presunta red de corrupción en empresas públicas liderada por el cuñado del mandatario, Danilo Carrera, su operador de confianza Rubén Cherres, asesinado el 31 de marzo pasado, y el extitular de la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (EMCO) Hernán Luque, quien huyó del país.

Boscán, que junto a su mujer y dos hijas debió viajar al exterior, recordó que Villavicencio, del partido conservador Construye, en febrero pasado advirtió que los investigadores de la Policía participantes en el caso León de Troya –presuntos vínculos de Carrera con la mafia albanesa Cherres mediante- estaban ¨bajo amenaza de los narcos¨. El coronel Erzo lideró las indagaciones.

El aspirante presidencial, precisó, tenía una cápsula de protección policial y yo de la Fiscalía General, pues nunca acepté lo que procediera del gobierno de Lasso. Villavicencio, opinó, resultó muerto cuando su seguridad personal violó lo establecido para facilitar el ataque a la salida de un mitin en Quito.

Para este profesional, el mayor peligro para su vida es el actual gobierno y sus conexiones con estructuras criminales. Aunque entregue el mando, dijo, no hay seguridad alguna para quienes se le enfrentaron.
Antes, Erika Mena, esposa de Erazo, confirmó en conferencia de prensa que su marido es el siguiente en la lista, y los investigadores temen por sus vidas, pues han sido víctimas de allanamientos a oficinas, disparos contra sus viviendas, retiro de teléfonos. Mena junto a familiares de otros indagadores responsabilizaron de la situación a Lasso, al ministro del Interior Juan Zapata, y al comandante general de la Policía, Faustino Salinas.

CAMPAÑA PELIGROSA

Aunque las autoridades electas solo gobernarán hasta mayo de 2025, cuando Lasso concluiría su mandato, y tendrán que llamar a nuevos comicios, la población expresó la necesidad de un cambio estructural en el país cuando brindó su confianza en la primera vuelta a la abogada Luisa González, quien es una destacada figura política de RC.

La sorpresa la dio Noboa, hijo del magnate bananero Álvaro Noboa, quien en cinco ocasiones se presentó como aspirante a la presidencia y siempre perdió.

En esta ocasión, y tras la muerte de Villavicencio y las acusaciones que desde las redes lanzó contra RC la derecha, a la que acusó del atentado, surgió de manera sorpresiva el joven Noboa, de 35 años, casado y con dos hijos pequeños, también empresario y conservador, pero que probó suerte con un discurso novedoso en que poco prometió, pero tampoco acusó a nadie de experiencias políticas previas, y fue favorecido con votos inesperados.

La campaña electoral para el balotaje, según el calendario del Consejo Nacional Electoral (CNE), arranca oficialmente el 24 de septiembre y será hasta el 12 de octubre, tres días antes del domingo 15, fecha en que más de 13 000 000 de ecuatorianos deberán volver a las urnas.

Sin embargo, la prensa local informa sobre reuniones de González con distintos sectores sociales, entre ellos el estudiantil, como preámbulo de los grandes mítines que se espera realicen los contrincantes.

Con 45 años, madre soltera de dos hijos, experimentada política, la aspirante por el correísmo alcanzó el 33,62% de los votos –aunque se esperaba que ganara en la primera vuelta antes de la muerte de Villavicencio- mientras Noboa obtuvo el 23,41 %. El reto de los dos es conseguir los 4 259 696 votos que lograron, en conjunto, los otros seis postulados.

Aunque están luchando por un gobierno de solo 15 meses, el balotaje es una prueba de cómo transitan los caminos los partidos ecuatorianos y sus proyecciones  para 2025.

Algunos politólogos consideran que Noboa –a quien pocos aseguran la victoria, pero tampoco la desechan- debe mantener el tono coloquial con sus electores, pero también mostrar más músculo, pues no presentó proyectos a futuro.

El empresario tiene como principal reto ahora consolidar sus seguidores y unirse a otras fórmulas, así como reforzar sus bases durante el tiempo que le queda para medirse con la única mujer que aspira a Carondelet en la historia ecuatoriana.

González, que ocupó responsabilidades en el gobierno de Correa, opinan los expertos, tiene que desligarse del pasado, pues los jóvenes en especial no entienden una narrativa referida a una etapa próspera en Ecuador que desconocen y que pueden desear para el país, pero con otro tono menos regulador, una de las críticas de la derecha contra RC.

Algunas voces consideran que González fue desacertada durante su participación en el debate público de los presidenciables, por lo que está obligada a otra imagen y tender lazos con otros partidos o no logrará la victoria.

A los dos pueden ayudarlos los votos de connacionales residentes en el exterior, pues, según el CNE, hubo complicaciones tecnológicas que impidieron fueran tomados en consideración en la primera vuelta. Con ello, los migrantes ejercerán su derecho de forma presencial para el balotaje y repetir las elecciones de asambleístas nacionales y del exterior de las circunscripciones Europa, Asia y Oceanía; Estados Unidos y Canadá; América Latina, Caribe y África.