¡Kaput!

“Los años de vender su oficina al mejor postor han llegado a su fin”, fueron estas las palabras del fiscal del distrito sur de la ciudad de Nueva York, Damian Williams al describir la histórica decisión legal tomada este martes en esa instancia, en la que después de trece horas de deliberación, un jurado determinara su culpabilidad por voto unánime.

“Este caso ha tenido que lidiar siempre con niveles chocantes de corrupción. Cientos de miles de dólares en sobornos en forma de efectivo, barras de oro, un Mercedes Benz. No era el hacer política de forma usual, era hacer política buscando ganancias”, declaró Williams a los reporteros presentes.

Visiblemente abatido a la salida del recinto legal neoyorkino, Menendez evitó dirigirse a los corresponsales reunidos allí, lamentó la decisión catalogándola de inesperada e injusta y prometió apelarla, en tanto declinó responder a preguntas sobre su potencial renuncia  al escaño senatorial que aún ostenta.

Las declaraciones del alto mando demócrata en el senado, representados por el líder de mayoría el  senador Chuck Shumer (D-NY) no se hicieron esperar “Menendez debe hacer ahora lo que es correcto para su electorado, para el senado y para el país..”, dejando claro su llamado a la renuncia.

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Phil Murphy, gobernador demócrata del estado de New Jersey, por el cual fue elegido Menendez, que ya había solicitado su renuncia en septiembre cuando este fue acusado formalmente, llegó esta vez mas lejos: “si Menendez no renuncia de inmediato, el senado debe comenzar el proceso de expulsión”.

Y en caso de lograrse la salida de Menendez del senado, por las buenas, o por las malas, es precisamente Murphy quien deberá nombrar a un representante temporal que lo sustituya en el cargo hasta tanto se defina el nuevo ocupante, que el electorado de New Jersey debe escoger entre el demócrata Andy Kim y el republicano Curtis Bashaw.

Y aunque al conocerse la decisión legal contraria a Menendez se han ido sumando senadores demócratas que piden su dimisión, ninguno ha mencionado directamente la posibilidad de expulsarlo. Proceso que debería ser manejado por el Comité de Ética del Senado primero y luego ser llevado a la cámara, donde deberá contar con dos tercios del voto para hacerse efectivo.

Ni siquiera sus habituales mentiras contra Cuba le salvaron esta vez. En un esfuerzo desesperado por convencer al jurado, Menendez llevo al estrado a su hermana Caridad Gonzalez, para hacerla declarar que la razón fundamental por la que el senador guardaba grandes cantidades de dinero en su casa, en tiendas, debajo del colchón, estaba relacionada con el miedo de los cubanos de que su dinero fuera confiscado, como alegan sucedió en la década de los 60 posterior al triunfo revolucionario.

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Pero el embuste no logró pasar del primer nivel cuando en una revisión los letrados descubrieron que la familia de Menendez había abandonado Cuba en 1951, ocho años antes del triunfo revolucionario, aun así, la prensa acompañante del senador utilizó el término “huyeron” sin aclarar de que, evidentemente de los gobiernos auténticos y de Batista.

El próximo 29 de Octubre se dará a conocer la sentencia. Los expertos estiman que por los cargos imputados, Menendez pudiera enfrentar años de cárcel, o, “por ser la primera ver que erra”, ser sometido a grandes multas y otras medidas punitivas, que se suman a la creciente preocupación por las cuentas por pagar que aún debe a sus caros abogados y que será difícil recolectar, si abandona su carrera política y deja de recibir donaciones. Difícil eh?