El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador instó este jueves a los presidentes de Estados Unidos y de Canadá a no interferir en los asuntos internos de su país ya que ellos saben cómo se armaron esas campañas en su contra, que no participen en favor de esa guerra sucia y se abstengan de ayudar a la mafia del poder económico y político porque eso es inmoral.
Este miércoles 28, el presidente exigió a su homólogo estadounidense Joseph Biden y al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, que sus administraciones eviten tomar parte en la estratagema que desató a lo interno el bloque conservador.
Si no hay un trato respetuoso hacia México y su gobierno no asistiré, afirmó, a la Cumbre de Líderes de América del Norte prevista para abril próximo en Quebec, Canadá.
¨Siempre hemos tratado a las autoridades de Canadá y EE.UU. con respeto, no merecemos mal trato ni que se manche el prestigio de México y de sus autoridades¨ afirmó el mandatario desde Palenque, Chiapas.En su habitual conferencia con la prensa, llamada La mañanera¨ por su temprano horario, AMLO denunció que la oposición realiza cabildeos con funcionarios de los dos países para afectar a su gobierno en un año electoral.
“Recurren a trampas, a la manipulación y a las calumnias, todo esto del New York times y de otros medios también lo están haciendo en organizaciones conservadoras en EE.UU. y Canadá¨, precisó ante medios locales e internacionales.
El descargo de AMLO ocurre después de desenmascarar a dos periódicos de EE.UU. que falsamente lo acusaron de corrupción y de vínculos con el narcotráfico en un intento de dañar su imagen y el de su partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Los ataques contra AMLO (como le llaman por el acrónimo de su nombre) han tratado de minar su imagen. Sin embargo, en seis años al frente de México ha demostrado ser un estadista que ha sabido lidiar con EE.UU. y dos de sus presidentes más controvertidos con magistrales lecciones de diplomacia.Los enemigos de AMLO y de Morena saben, según indican encuestas y entrevistas a personas escogidas al azar que –si se mantiene la tendencia- la próxima presidenta de México será la exgobernadora de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum (1962), una experimentada política, científica y académica con una amplia ventaja en las intenciones de voto.
CAMPAÑA MEDIÁTICA INSOSTENIBLE
A principios de este año, el periodista Tom Golden, del diario estadounidense ProPublica, acusó al mandatario de recibir una presunta aportación del narcotráfico a su campaña electoral en 2006, tomando como base las filtraciones informativas de la Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA).
Sin embargo, Propública y Golden no pudieron demostrar lo que calificaron de relaciones de AMLO con grupos criminales y tuvieron que admitir, 24 horas después de la publicación, que esta no ofrece ninguna evidencia que apunte en la dirección indicada por el titular, pero rehusó disculparse, en otra demostración del ego de la prensa estadounidense, por sugerir algo tan grave sin contar con pruebas que lo respalden.
El periodista, calificado de ¨gran calumniador¨, demostró, según el presidente, sus vínculos con el gobierno norteño, y afirmó que no hace un periodismo independiente. Incluso, ellos mismos dicen, refutó, que les pidió a la DEA que no diera a conocer sus fuentes y le hicieron caso¨.
Puso los puntos sobre las íes cuando develó la verdad que se esconde tras la supuesta denuncia de Golden. López Obrador indicó que la DEA está molesta porque su Ejecutivo le impidió operar libremente en el país, pues en el sexenio del expresidente Felipe Calderón la guerra contra el narcotráfico fue alentada por esa agencia.
Aunque respetuoso, pero exponiendo las verdades a la opinión pública, López Obrador refrendó que la Casa Blanca y sus agencias actúan como jueces en todo el mundo, acusando a gobiernos de corrupción o vínculos con grupos del narcotráfico. Pero en México, dijo, no pudieron hacerlo.
En ese contexto, denunció que la trama en su contra involucra no solo a la DEA sino al Departamento de Estado, lo que supuso es conocido por Biden.
AMLO cuestionó la realización de pláticas de alto nivel con Washington en torno a migración, combate al trasiego de estupefacientes y fentanilo, si una instancia de ese gobierno divulga calumnias que lo dañan no a él, sino a su investidura.
“Esa es su misión y pagan a estos periodistas para hacer ese trabajo sucio; nada más que aquí se toparon con una pared, porque nosotros no somos corruptos, ni tenemos relaciones de complicidad con nadie”.Aun no se había aplacado la atmósfera generada por las mentiras de Propública cuando otro escándalo, ahora vinculado con el periódico The New Yok Times trató de involucrar de nuevo al jefe del gobierno con el narcotráfico, ahora en su papel de cómplice de un evidente plan para desestabilizar la campaña electoral y perjudicar a la candidata de Morena.
Según confirmó López Obrador, el periódico de gran circulación en EE.UU. le pidió una reacción sobre un reportaje que publicaría sobre nexos de su equipo de campaña en 2018 con el crimen organizado.
En una acción inusual, el mandatario reveló algunas de las preguntas enviadas por Natalie Kitroef, jefa de la oficina del Times en Ciudad de México y coautora del texto con Alan Feuer. ¨Quiero informarle que estamos trabajando en un reportaje sobre una investigación que realizó el gobierno de EE.UU. durante el sexenio del presidente López Obrador¨ dice la misiva que leyó el presidente.
El periódico publicó el material antes del mediodía, cuando tenía planeado hacerlo a las 17:00 (hora local), según el texto de la reportera.
El material indicó que el Gobierno de EE.UU. investigó a aliados del primer mandatario sobre posibles nexos con el narco y su campaña electoral e incluso que algunos de los informantes tienen videos de sus hijos cuando recibían dinero del narcotráfico.
Para tratar de minimizar la inmoralidad del reporte, el Times planteó que no hay una conexión directa del presidente con el narco. Por tanto es un ataque a su familia y admite que la investigación se hizo con datos de informantes ¨difícil¨ de corroborar.
Mientras el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, confirmó en una conferencia virtual que no existe investigación alguna sobre el mandatario mexicano y sus presuntas conexiones con el tráfico de drogas, también el Departamento de Justicia declaró en términos similares.
Kirby insistió en las buenas relaciones con México frente a los asuntos migratorios, uno de los puntos álgidos de las relaciones bilaterales.
Incluso el ex director de la DEA Mike Vigil (crítico del gobierno mexicano) aseguró que el reportaje es un ataque personal contra el Presidente, y lamentó la irresponsabilidad de publicar algo sin sustento que dañará de manera inevitable la cooperación binacional en el combate al narcotráfico, y debilitará aún más la posición de la DEA.
A pesar de la incredibilidad del material periodístico continúan los ataques mediáticos y de políticos de la derecha que se convirtieron en caja de resonancia para repetir las mentiras pero presentándolas como verdades.
Momentos que aprovechó la candidata presidencial opositora Xóchitl Gálvez, de visita en Washington ofreciendo a empresas privadas la eventual venta del sector energético nacional.
Analistas consideran que su estancia en la ciudad norteamericana, en momentos de complejidad en las relaciones bilaterales, impresiona por la segura concertación de intereses de las oficinas públicas de EE.UU. y oficinas locales y opositores mexicanos.
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