Una Reina barranquillera en Santiago de Cuba

Cuando me la mostraron por primera vez, no pude menos que mostrar incredulidad. La vi en la Casa de la Trova de Santiago de Cuba, en plan más informal y sin los atributos que la acreditan. La conocí: pequeña de estatura, con maquillaje sencillo y bailando con acierto un son cubano. Y me resistí a creer que esa fuera Daniela Cepeda Tarut: la Reina del archifamoso Carnaval de Barranquilla.

Según nuestros estereotipos, una soberana de Carnaval –entiéndase este como la más alta expresión de los festejos populares- debía tener una generosa anatomía y parar el tráfico cuando menos. La colombiana se confundía fácilmente entre el gentío que bajaba del Parque Céspedes, ajenos a la fama conquistada en su país natal por la abogada de 23 años,estudiante de Ciencias Políticas, que en febrero último recibiera la corona del celebración folclórica más importante de Colombia.

Ya el segundo encuentro no fue de lejos y ahí me di cuenta qué había visto el Comité Organizador del Carnaval: una muchacha afable, inteligente, segura de sí misma y con una sonrisa que puede aligerar el temperamento más agrio. Si se le suma su trabajo de salvaguarda del patrimonio barranquillero, se tiene una Reina bella y comprometida con su identidad: el paquete completo.

- ¿Qué te ha parecido la experiencia de visitar Cuba por primera vez y hacerlo precisamente durante el Festival del Caribe?

- Llegué el lunes, estuve unos días conociendo La Habana, y me llevé una sorpresa impresionante, porque me pareció espectacular, con una arquitectura única y lo más importante que me ha parecido de Cuba es el aprecio que le tienen al arte y la cultura y como estos constituyen centro para el desarrollo de la ciudad. Me ha parecido totalmente ejemplar, algo que se puede llevar a nuestras sociedades caribes colombianas.

A Santiago llegué el jueves y pues me he gozado este Festival del Fuego. Ha sido una experiencia muy bonita, y digamos un momento muy emblemático el que viví cuando estuvimos en el Desfile de la Serpiente, que estábamos todos bailando con música colombiana, los cubanos y los caribes colombianos. Fue un momento muy bonito, en el que nos hemos podido unir como región.

Me he dado cuenta con esa experiencia que somos iguales, que como dice uno, uno hecha un chiste o algo así, enseguida lo entienden, eso implica que tenemos la misma forma de pensar, la misma manera de ser y ha sido muy bonito compartir experiencias, poder acercarnos, de verdad poder disfrutar un Festival así, compartir la cultura y disfrutarla como hermanos, que la cultura sea un pretexto para unirnos como región, porquerealmente compartimos las mismas raíces.

- ¿Qué significa para ti en lo personal venir como una de las figuras representativas del Carnaval de Barranquilla en su primera presentación en Cuba?

- Es el poder unirme con mis hermanos caribes y mis hermanos cubanos a partir de la cultura, pero la cultura de verdad, la que es un punto de convergencia importantísimo, que hace que las sociedades se unan o que crezcan a partir del compartir experiencias, compartir vivencias y vengo aquí en representación del Carnaval de Barranquilla, vengo a compartir mi experiencia como reina, por la salvaguarda de la tradición, me identifico mucho con el carnaval santiaguero, porque he visto como también aprecian mucho la identidad propia y también han llevado a cabo estrategias para preservarla.

- ¿Qué representa la figura de la Reina del Carnaval de Barranquilla?

La Reina del Carnaval es la representante del ser y el sentir de un pueblo. El Carnaval se realiza en Barranquilla, pero cobija las tradiciones, las danzas, las manifestaciones artísticas de la costa Caribe colombiana, es importante por eso porque es una figura tradicional, que lo que hace es representar pues todas tradiciones y sobre todo la cultura de un pueblo.

Me empeñé en dedicarle mi reinado a ayudar a preservar la tradición del carnaval. Me parece que lo más importante que tienen estos festejos son las costumbres que nos hacen únicos e irrepetibles, auténticos, sobre todo cuando cuentan las historias que hemos vivido a través de los años, de verdad la esencia de lo que hemos ido construyendo y que es lo que somos nosotros hoy.