Raíces de la música popular cubana

Si hay dos agrupaciones que se pueden tomar como símbolo de cubanía y de identidad nacional son las orquestas Revé y los Van Van. La primera, fue fundada en 1956 por Elio Revé Matos, un hombre humilde que logró llevar el ritmo changüí al mundo entero; la segunda, nació en 1969 y fue la obra mayor de Juan Formell quien logró colocar en los primeros puestos de la popularidad, durante la década del 70, la pieza changüisera El guararey de Pastora.

¿Cuáles fueron los vasos comunicantes que unieron a ambos músicos?

El director de orquesta, bajista, compositor y arreglista Juan Formell siempre reconoció que el legado de Elio Revé Matos estaba presente en los Van Van porque gracias a su paso por la Orquesta Revé, pudo beber de la sabia de la música popular cubana y, en especial, del ritmo changüí.

Cuando se habla de Formell enseguida se piensa en su inigualable talento creativo, el arte, el oficio y la maestría con que lideró la popular orquesta los Van Van y en la influencia que ejerció sobre varias generaciones de músicos y compositores cubanos.

Los Van Van, desde sus inicios, tuvo un sello inigualable marcado por una cadencia y una sonoridad únicas. No pueden olvidarse los montunos y los tumbaos donde se respiraban los aires del son tradicional, el doble sentido y la picaresca presentes en los estribillos pegajosos de cada tema compuesto por Formell.

El extraordinario bajista también supo apropiarse de otras maneras de hacer como recuerda César (Pupy) Pedroso quien, al entrar a los Van Van, empezó a componer y hacer los arreglos para la orquesta con gran influencia de los Beatles. “Eso se veía en la manera de martillar el piano y en la forma de hacer las corcheas”, dijo una vez Pupy.

En un gran crisol imaginario supo fusionar el autor de Lo material varios estilos que se amalgamaron para dar como resultado una agrupación bien cubana que ha sido considerada como la banda de música popular bailable más emblemática del último medio siglo.

Por su parte, el percusionista y compositor Elio Revé Matos ha pasado a la historia de la música como el Rey del Changüí, por ser el máximo defensor de ese género, nacido en el siglo XIX, en las serranías del oriente cubano.

El fundador del Charangón legó al panorama sonoro nacional una de las agrupaciones más respetables en la Mayor de las Antillas que, a la vez, resultó escuela de músicos y cantantes como Ibrahim Ferrer, Chucho Valdés, Pupy Predoso, Moisés Valle (Maraca) y Juan Carlos Alfonso.

Parte de la gran popularidad alcanzada por la Revé, en la década de los 60, se debe a las innovadoras orquestaciones de Formell y a temas de su autoría como Ya estoy aquí, Qué bolá, qué bolón, El martes y No me dejes así.

Hoy ya no están físicamente ni Juan Formell ni Elio Revé Matos. En los hombros de Elito Revé Duverger y de Samuel Formell ha caído la responsabilidad de mantener vivo el legado de sus padres.

De ahí nació la idea de homenajearlos con la realización de un gran espectáculo musical. Dos leyendas: De Revé a Van Van lleva por título el megaconcierto que protagonizarán ambas agrupaciones este sábado 9 de diciembre en la capitalina Ciudad Deportiva como preámbulo de una gira nacional que realizarán, de manera conjunta, gracias a una iniciativa de la Unión de Jóvenes Comunistas.

En el concierto se ofrecerá un recorrido musical por las diferentes etapas que han marcado la historia de ambas agrupaciones por lo que se interpretarán temas antológicos tanto de los Van Van como de La Revé. Además, el encuentro será ocasión propicia para presentar los temas más actuales y otros que son del gusto del público bailador.

Músicos que formaron parte de ambas orquestas como Moisés Valle (Yumurí y sus hermanos) y Juan Carlos Alfonso han sido invitados para realizar presentaciones especiales en ese concierto que desde ya se puede catalogar como memorable.