sábado, 29 de junio de 2024

Morir un poco con Andy Jorge Blanco (+Audio) (+Videos)

Graduado de Periodismo en la Universidad de La Habana, del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso y alumno de la Maestría en Escritura Creativa en la Universidad de Sevilla, Andy Jorge Blanco reconoce en su formación en Cuba y España pilares fundamentales para merecer el Premio Celestino de Cuento...

Jessica Mesa Duarte en Exclusivo 23/06/2024
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Andy Jorge Blanco
Andy Jorge Blanco, periodista escritor matancero obtuvo el Premio Celestino de Cuento 2024

Aunque Morir un poco es un libro de ficción, resalta el carácter realista de sus cuentos. Ello se debe tal vez a la formación profesional de su autor, el periodista y escritor matancero Andy Jorge Blanco, quien mereció el Premio Celestino de Cuento 2024.

“En él pueden encontrar textos de ficción que abordan problemas actuales de Cuba y el mundo. Quise que fuera un libro cuyos lectores se identificaran con fenómenos como la emigración, la soledad, la desesperación y el vacío que deja consigo, las relaciones sexuales, el amor, la infidelidad, la prostitución.

“La ficción fue algo que llegó a mí de la mano del Centro Onelio. Mis primeros cuentos, que eran dos o tres, fueron con los que matriculé allí; por tanto este es un libro de principiante; pero me presenté porque el Celestino busca la joven narrativa cubana. Para mí es un orgullo tremendo ganarlo.

“Uno siempre tiene una intención cuando escribe, pero luego los lectores pueden sentir otras cosas. Los encargados de decir lo que recibieron de la lectura son quienes leen porque yo puedo tener una finalidad al escribir y el receptor sintió otra emoción o esa misma de otra manera. Es muy diversa la interpretación que se le puede dar y las sensaciones que despierta en cada uno.

“Algunas personas allegadas que lo han leído, en un espacio más íntimo, me han dicho que se han reído y que han llorado con el libro porque son temas que nos tocan muy de cerca a muchos cubanos, al tiempo que reflejan la condición humana en sí”.

Andy, con una experiencia profesional de cinco años como reportero, editor web y gestor de redes sociales en el sitio Cubadebate, se concentró en crear un libro para el concurso. “Algunos de los argumentos me venían rondando hace mucho tiempo y vi la oportunidad de sacarlos ahora”.

“Hay otros que sí decidí, los personajes, la temática y cómo abordarla, pensando en el Celestino. Surgieron de manera espontánea, con mucha dedicación, sentándome a trabajar y pensando en esas ideas mientras hacía otras actividades. Así fue creciendo, tomando forma”.

Premio Celestino de Cuento

Graduado de Periodismo en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana, del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso y amante de la crónica, la entrevista y el reportaje, géneros que apuntan a lo narrativo dentro del periodismo, su principal motivación para participar en el certamen fue precisamente el propio concurso.

“Es un premio que tiene muchísimo prestigio en Cuba y el sello Ediciones La Luz también goza de igual notoriedad. Desde que me adentré en el mundo de la ficción fue un sueño participar y, cuando cursé estudios en el Centro Onelio, apareció esta idea romántica de tener un libro que dijera Premio Celestino.

“Sin embargo, siempre lo vi lejano porque le tengo muchísimo respeto y no me creía capaz de ganarlo, aunque guardaba para mí el deseo de hacerlo en algún momento. Esta fue una edición cerrada, la número 25. Eso, unido a que el Máster que estoy cursando me ha hecho volver a escribir ficción, me impulsó a intentarlo, con tremenda humildad y sin ninguna aspiración”.

Al decir del también locutor, la formación universitaria en Cuba, su preparación en el Centro Onelio y la Maestría en Escritura Creativa que cursa actualmente en la Universidad de Sevilla, han sido fundamentales en este resultado.

“El libro que, para dicha y felicidad mía, obtuvo el premio es producto de la formación que he tenido en los últimos tiempos, tanto en Cuba como en España. Ello ha determinado el escritor que soy hoy y el que seré.

“El Periodismo es una carrera muy útil no solo para quienes ejercerán como periodistas sino también para los escritores porque brinda muchas herramientas: la disciplina, el oficio, la rapidez, el lenguaje.

“Tuve profesores excelentes a lo largo de la carrera como Roger Ricardo, Rafael Grillo, Iraida Calzadilla, Jesús Arencibia y Noemí Madero, en el caso de los que tienen que ver con la redacción de textos periodísticos porque también tuve magníficos en cuanto a otras materias y todos contribuyeron a lo que soy hoy, por lo que siempre tendrán mi gratitud.

“Yo entré al Onelio porque también fue un sueño desde mediados de la carrera cuando pasé la asignatura de Técnicas narrativas. Allí conté con un claustro brillante, los profesores Sergio y Raúl, las profesoras Dazra y Yamila, así como escritores invitados de primerísimo nivel. Siempre me interesó escribir no ficción y el Onelio me despertó ese deseo de intentar escribir ficción.

“Esa fue una experiencia vital para mi formación como escritor porque aprendí las técnicas, a analizar con ojo crítico el trabajo propio, el de los demás compañeros de clase y el de los escritores con obras publicadas porque trabajamos con textos premiados o no pero de una calidad innegable. Es un curso de un año pero constantemente hay que volver a sus enseñanzas.

“En el Máster he podido estudiar la variedad de narradores y casi todas las semanas teníamos que entregar un texto al profesor de la asignatura Prosa de ficción sobre el tema. Ello también me motivó, lo aproveché en función del anhelo de presentarme al Celestino y llevé las dos cosas a la par”.

 

Otra motivación del joven escritor que se ha hecho realidad al ganar el Celestino de Cuento es publicar con Ediciones La Luz, entre las editoriales más prestigiosas del país, con un trabajo certero en cuento a la publicación y  promoción de los jóvenes narradores cubanos.

“De las cosas que más orgulloso me hacen sentir es que mi libro sea publicado por Ediciones La Luz. El sueño de ganar el Celestino es indisoluble al de pertenecer a La Luz. Es un sello con un colectivo estelar con un meritorio desempeño, en medio de un escenario tan complejo en el mundo editorial cubano. Es de admirar la calidad de su trabajo.

“No es este mi primer libro, tengo uno publicado de entrevistas resultado de mi tesis de Licenciatura en Periodismo, pero este es el primero de narrativa. Espero que Morir un poco me traiga muchas alegrías”.

Como la mayoría de los autores, Andy siente la escritura como una necesidad de expresión y diálogo con el público, incluso con los retos que implica dedicarse a una profesión muy consagrada y no siempre bien retribuida en materia económica.

“Es una manera de expresar mis emociones, de liberarme y sentirme bien conmigo mismo. Parafraseando a un grande de la literatura cuando dijo que escribía para ser feliz a sus amigos, yo también lo hago por eso.

“Los amigos que me leen siempre me incitan a continuar, les gusta lo que hago, no sé si es por condescendencia, pero me motivan a seguir haciéndolo. Igual hay personas que me escriben para decirme que les llega determinado mensaje y eso me reconforta mucho.

“Los mayores retos para escribir los pone la vida diaria que es muy compleja entre el trabajo como investigador de la Universidad de Sevilla y los estudios, las preocupaciones del día a día.

“El mundo de las personas que se dedican a la literatura es muy difícil porque, aun cuando muchos creen que es solo sentarse en una casa en la playa a esperar que llegue la musa, no hay nada más alejado de la realidad. Es muy complejo, de alguna manera precario, y hacerlo es una cuestión de voluntad, de deseo, de necesidad.

“Hay que investigar porque es ficción pero tiene que ser verosímil, hay que esforzarse, exprimirse mucho para que salga un cuento, entonces imagina un libro entero. Lo sufro en el proceso pero cuando termino lo disfruto mucho. No hay nada que me haga más feliz que ver y hojear un libro.

 

Para el matancero, como ocurre con el periodista, el escritor siempre está en función de la escritura. “Aunque no esté redactando o editando, eres periodista las 24 horas del día. A los escritores, aunque no estén escribiendo, siempre les está rondando una idea”.

Producto de esa necesidad constante de crear, “tengo varios proyectos; entre ellos un libro sobre crónicas durante la pandemia que se encuentra en proceso de edición hace ya un tiempo esperando por disponibilidad de papel y estoy ansioso porque salga.

“La vida diaria, las cosas que veo a mi alrededor me motivan a escribir poesía y constantemente lo esto haciendo. No es una planificación porque creo que la poesía no puede planificarse, como tampoco el resto de la literatura, ni tampoco es producto de la más pura inspiración.

“Es algo que no se puede forzar sino que llega a partir de esas experiencias de vida, de los sentimientos, de las sensaciones. Siempre voy sumando poemas. Me interesa presentar algún poemario a una editorial y sigo con mi trabajo.”

 

Autor del libro La guerra no espera, Andy Jorge Blanco forma parte también de las antologías Como si estuvieran hechos de arcilla azul, resultado de obras seleccionadas del Concurso Internacional de Cuentos Primigenios y Colibríes sobre mares, poesía cubana contemporánea por el mundo. Artículos científicos suyos se han publicado en revistas y universidades de Cuba y España.


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Jessica Mesa Duarte

Periodista y escritora de guiones radiales.

Se han publicado 1 comentarios


Miriam
 24/6/24 6:47

Felicidades para éste joven que ha logrado ascender en su carrera a pesar de su reciente graduación. También para ediciones La Luz que goza de gran prestigio dentro de nuestra País. Es digno de destacar el afán y empeño de Andy Jorge Blanco y su familia en el desarrollo de su carrera, evadiendo los obstáculos que sufrimos continuamente por la guerra económica y mediática que nos tiene impuesta nuestro vecino del Norte.

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