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martes, 19 de noviembre de 2024

Mi mamá la groupie

El Festival Internacional de Cine de Gibara, fue un sueño que hizo renacer mis tiempos...

Laura Alonso Hernández en Exclusivo 17/07/2018
2 comentarios
Fito Paéz- Festival Gibara
Fito Páez, cerró el Festival de Cine de Gibara. (Foto:Emilio Suárez Martínez).

“Mi objetivo en el Festival Internacional de Cine de Gibara estaba bien claro, no me malentiendan, el cine me encanta, pero quería cumplir un sueño de mi juventud. Un sueño que hacía renacer mis tiempos más frikis donde mi vestuario solo consistía en sandalias y los pullovers más anchos que pudiera encontrar.

Llegar aquí fue tortuoso, sobre todo para mí, que 16 horas ya no se sienten como a los veintitantos y a mis 48 fue todo un reto. Sin embargo, dos horas de descanso fueron suficientes para ir al concierto de Haydée Milanés, animada un poco por el amor que le tengo a las canciones de su padre y otro tanto porque su estilo me gusta bastante.

En medio de toda la atmósfera de tranquilidad que ella dejó en el escenario, mi hija me tomó por sorpresa con la siguiente frase: “Mira quién está detrás de ti”. No me hizo falta girarme para saber de qué persona se trataba, y la muchacha que hace mucho tiempo estudió en el ISDi retomó mi cuerpo, esa misma muchacha que se quedaba ronca con sus discos y su sueño consistía en tenerlo tan cerca como fuera posible.

Tuve la sonrisa en la boca lo mismo que duró el concierto y la emoción explotó cuando compartió escenario con Haydée para cantar a dúo Yo vengo a ofrecer mi corazón. Lo tenía prácticamente casi al alcance de mi mano como lo hubiese querido desde la primera vez que lo escuché en los pasillos de la universidad.

Mi hija, que comparte mi afición por herencia, no lo podía ni mirar, ay si yo tuviera esa edad: “No seas boba mi niña, este es el momento, piensa que no se va a volver a repetir”.

El día después pasó con mucha tranquilidad y disfruté cada momento que Gibara me regaló. Las largas caminatas que no se sentían gracias a los vientos costeros y las casas coloridas que contrastaban con el azul del mar, eran el paisaje ideal para estos días de descanso. A pesar de todo esto, mi cabeza solo tenía sitio para el evento final del festival, el concierto que materializaría todos los anhelos resguardados de tantos años de fanatismo.

Al final la gran noche llegó y no cabía en mí de la emoción. Llevé puesto un vestido que guardé especialmente para la ocasión y unos tenis para complacer las incesantes pedidas de mi hija de que los use, a pesar de que le responda de que yo no padezco del síndrome de Peter Pan.

Cuando mi hija y yo llegamos a la plaza había una gran multitud, no esperaba menos, pero nos acercamos lo más que pudimos hasta estar a prácticamente dos metros del escenario. De repente las luces se apagaron y allí estaba él, allí estaba mi Fito Páez, loco y estridente desde su piano. Los años se fueron de mi cuerpo, solo escuchaba la música y las ganas de bailar se hicieron inaguantables.

Cante y bailé como hace tiempo no lo hacía y mi mente se liberó mientras las letras de 11 y 6, Giros, Ciudad de rotos corazones, Un vestido y un amor y A rodar mi vida corrían y hacías con mi cerebro lo que quisieran. Era la fan más fan, la persona más feliz del mundo, la muchacha raquítica que le enseñó a su hija El amor después del amor…”

Ahí caí en cuenta que en verdad esa muchacha no era mi mamá, era yo, y que razones más allá de ella no le permitieron estar aquí. Vivió esos momentos a través de mis fotos y videos, de los consejos de groupie en los que me regañó por no tener el valor para acercarme y de vivir el momento al máximo. Al final del concierto mis brazos quedaron exhaustos de filmar tantos videos para ella y yo solo fui esa niña de seis años que cantaba a toda voz sin entender mucho lo que decía En un café se vieron por casualidad


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Laura Alonso Hernández

Estudiante de Periodismo

Se han publicado 2 comentarios


Danay
 22/7/18 15:08

 Feliz estoy de ser esa groupie que logró transmitir a mi hija la vibra de unas letras y cantautores maravillosos que me hicieron soñar y la hacen soñar y escribir también a ella.

Alberto
 22/7/18 14:46

..magnifico, extraordinaire!!!

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