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martes, 3 de diciembre de 2024

Gerardo Alfonso: …como si el Che estuviera vivo

El cantautor cubano devela los motivos y razones de esa canción que todos tararean… Son los sueños todavía...

Yirmara Torres Hernández en Exclusivo 09/10/2015
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Son los sueños todavíaes una de las canciones más conocidas de Gerardo Alfonso. Para los cubanos, junto a la de Carlos Puebla, es quizás la más popular de cuantas se han dedicado al Che. Mucha gente la asocia al regreso de los restos del Guerrillero Heroico a Cuba en 1997, y en diversos rincones del mundo es un himno.

Hace un tiempito, era 14 de junio, tuve la oportunidad de conversar largamente con Gerardo Alfonso al concluir una presentación suya en Matanzas. Nunca escribí todo cuanto me dijo aquella noche, mientras huía de protocolos y conversaciones vacías. Se sentó a mi lado y casi me obligó a sacar la grabadora que, por supuesto, yo encendí con gusto.

En medio del ambiente guevariano que inundaba la noche, no pudo resistir la tentación de comenzar hablando del Che. “El Che crece, se multiplica cada día. Y todo lo que se encarne en su espíritu crece con él. Mientras más vivo, mientras más veo, mientras más pienso, mientras más leo… más cerca me siento del Guerrillero Heroico”.Y remató cuando insistí sobre su relación íntima con el Che por ese derecho que le da haberle escrito una canción como El Che es de todos.

—Muchos cubanos asocian tu canción con el regreso de los restos del Che a Cuba. ¿Fue compuesta para esa ocasión?

—No. Los restos llegaron en octubre del 97, y yo hice la canción para el XIV Festival de la Juventud y los Estudiantes de La Habana, un poco antes, por encargo. Entre las cosas que yo tomé en cuenta cuando decidí hacer la canción estuvo el hecho de que después de 30 años de su desaparición física, los jóvenes del planeta habían decidido celebrar un festival dedicado a él. Había muchas canciones luctuosas, muy hermosas, pero sufriendo su pérdida. Yo quise hacerla como si el Che estuviera vivo.

“En seis horas la escribí. Yo condensé los sentimientos de toda mi vida por el Che en esa canción y estoy lleno de buenos momentos por haberla hecho. También he tenido detractores.

”Después busqué a Santiago Feliú, Iván Latuor, Ireno García y a Rochy, quienes participaron conmigo en la grabación del tema, y en el video que se pasó luego mucho por la televisión cubana.”

—¿Es Son los sueños todavía la canción que más satisfacciones te ha dado?

Sábanas blancas es más antigua, tiene 22 años. Es una letra que todos los cubanos conocen y tener una canción que funcione así es un gran orgullo. Yo tengo otras canciones que les tengo un amor enorme y no las conoce nadie. Pero esta me da la gratitud de ser reconocido. El pueblo me reconoce y hay mucha gente que me quiere gracias a ella. Le tengo mucho cariño.

“Lo mismo me pasa con Son los sueños todavía. El beneficio que la canción me ofrece, el respeto que me gano con haber escrito eso, es muy grande.

”No te puedo precisar cuál de las dos es mi canción. Pero sí te puedo decir que una se enmarca en el sentimiento de los cubanos y la otra en el sentimiento universal.

”Esas dos canciones son como pilares que me sostienen y estoy sumamente agradecido a la vida, o a esa cosa que se condensa, pasa por tu intelecto y te convierte la idea en canción”.

—La trova no está en su mejor momento. ¿Qué importancia tiene que se abran espacios para defenderla?

—Me parece muy importante porque la canción va creando conciencia. Las canciones van directo a los sentimientos y a la reflexión. Esta canción (la trova) es una verdad, y como es una verdad hay que defenderla, hay que mantenerla, impulsarla, respaldarla, junto a otras verdades. Y esa verdad debe tener su espacio y yo espero que crezca.

“Los tiempos de hoy son muy diferentes. El país está atravesando por situaciones económicas que crean crisis en la superestructura, y el país tiene que modificarse, tiene que actualizarse, como se está intentando hacer. Pero las canciones de aquella época no tienen el mismo arraigo en un pueblo que no es el mismo.

”Pasó el periodo especial y cuando salimos a flote ya éramos otros cubanos. Y seguimos entrando en el siglo XXI y nos fuimos modificando. Y están los que nacieron y fueron creciendo y tienen otras visiones del mundo, con una competencia tecnológica muy fuerte.

”Esta canción en un primer instante se repliega, porque se asusta, pero después retoma su vuelo, sobre todo en el canto joven. La actitud que respalda a cada verso es lo más interesante”.

—Pero hay canciones de todos los tiempos…

—Hay muchas canciones de la nueva trova que son canciones históricas. Porque se hicieron en el útero de una sociedad nueva, humana, que ha aportado valores incalculables. Y las canciones que nacieron dentro de ese modelo tienen un valor humano muy hondo y trascienden.

“Pero igual sucede que, hasta desde el punto de vista musical o lírico, son imágenes un poco ambiguas, son músicas más convencionales que necesitan reactivarse, renovarse, y no es difícil, es cuestión de asimilar la época”.

—Dijiste en un momento de tu vida: “seré un artista o un mendigo”

—Eso fue en el 80, cuando tuve que decidirme si iba a seguir dando tumbos con diferentes profesiones o ser artista. En ese momento no tenía ningún trabajo para sostenerme. Yo dije, bueno, no voy a tener familia, no voy a tener hijos, no voy a tener nada… Voy a ser un artista o un mendigo. Si no triunfo me sentaré en una esquina con una jícara y cantando con mi guitarra.

—Nunca has cambiado

—Es que todas esas cosas son… Yo creo que lo esencial, como dice El Principito, está allá adentro, en el corazón.

—¿El futuro?

—Estoy abierto a recibir, que es la mejor manera de hacer, no creerse nunca que uno tenga la llave, bajarse del pedestal y pedir el último.

—Gerardo, ¿músico o trovador?

—Yo siempre hago la música primero, la letra después. Soy más músico. Es decir, la canción desde el punto de vista temático ha sido una disciplina que yo he ido incorporando. La poesía, la visión de la realidad, son cosas que he ido integrando. Pero la música es una cosa que viene conmigo desde niño. Yo no soy académico, soy empírico y me he superado musicalmente en mi manera de estudiar.

“Soy trovador, lo acepto, en tanto esté dispuesta la trova a asimilar todas las formas posibles de música. Si la trova se encasilla entonces yo salgo y me digo cantautor, o lo que sea, pero no puedo evitar la evolución musical”.

—¿Andas siempre con la guitarra?

—A veces me acomodo y toco con la guitarra de los amigos. Ahora estoy tocando más piano. Yo empecé tocando piano, pero lo abandoné porque el trovador no puede andar con un piano al hombro. Pero en el siglo XXI me volqué al piano más que a la guitarra. Y actualmente, la mayoría de las canciones que he compuesto las tengo hechas en el piano. Y entonces me está pesando andar con la guitarra, sobre todo cuando hay una guitarra que me espera.

Son los sueños todavía
Letra y música: Gerardo Alfonso

Tú subías desde el cono sur
y venías desde antes,
con el amor al mundo bien adentro.
Fue una estrella quien te puso aquí
y te hizo de este pueblo.
De gratitud nacieron muchos hombres
que igual que tú no querían que te fueras
y son otros desde entonces.

Después de tanto tiempo y tanta tempestad
seguimos para siempre este camino largo, largo
por donde tú vas, por donde tu vas.
El fin de siglo anuncia una vieja verdad
los buenos y los malos tiempos hacen una parte
de la realidad, de la realidad.

Yo sabía bien, que ibas a volver,
que ibas a volver de cualquier lugar,
porque el dolor no ha matado la utopía
porque el amor es eterno
y la gente que te ama no te olvida

Yo sabía bien, desde aquella vez,
que ibas a crecer, que ibas a quedar
porque la fe clara limpia las heridas,
porque tu espíritu es humilde y reencarnas
en los pobres y en sus vidas

Son los sueños todavía,
los que tiran de la gente,
como un imán que los une cada día.
No se trata de molinos,
no se trata de quijotes,
algo se templa en el alma de los hombres,
una virtud que se eleva por encima
de los títulos y nombres.


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Yirmara Torres Hernández


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