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domingo, 24 de noviembre de 2024

Tarea Vida y sus proyecciones a mediano plazo

Se trabajará en acciones para promover un desarrollo menos intenso en emisiones de gases de efecto invernadero…

Laydis Soler Milanés en Exclusivo 02/03/2022
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Bosque cubano
Se estima que la implementación de la Tarea Vida contribuya a un modelo de desarrollo sostenible

El “Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático”, más conocido como Tarea Vida, es la estrategia que rige la política medioambiental cubana sobre una base científica multidisciplinaria.

Esta existe desde el 2017 y parte de la conciencia gubernamental ante esa problemática, cuestión que siempre resalta nuestro país no solo desde los esfuerzos nacionales, sino también en el escenario internacional. “Hoy más que nunca se necesita unidad, voluntad política y actuar con inmediatez y de manera concertada para enfrentar las crisis que nos afectan, lograr una recuperación limpia y cumplir con los compromisos asumidos en los acuerdos medioambientales, en especial el Acuerdo de Paris”, expresaba el viceministro primero del ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), en su durante la Quinta Asamblea de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente el pasado primero de marzo.

Según un informe del CITMA de este año, si los efectos del cambio climático a nivel de global continúan, lo más probable es que en Cuba se reduzca el potencial hídrico a escala regional, ocurra pérdida de tierra firme en zonas costeras bajas, empobrecimiento del suelo, afectación de asentamientos humanos costeros, pérdida de la biodiversidad y disminución del rendimiento agrícola en cultivos fundamentales de la dieta nacional, todo este con el consecuente impacto sobre la actividad económica y la sociedad.

Es por ello que la Tarea Vida se actualiza y se busca que se implemente de manera transversal en todos los sectores, con el objetivo de alcanzar un desarrollo sostenible y hacer frente al cambio climático. Por ejemplo, entre las acciones dedicadas a proteger las zonas más vulnerables se encuentran reducir la densidad demográfica en las zonas bajas costeras, planificar en los plazos determinados los procesos de reordenamiento urbano de los asentamientos e infraestructuras amenazadas, recuperación de playas, reforestación y adaptar las actividades agropecuarias a los cambios de uso de la tierra.

Además, ya se comienzan a introducir vehículos eléctricos y se espera que la cifra de estos alcance los más de 55 mil en el país. También se apuesta por las energías renovables, con el objetivo de llegar hasta el 24% de electricidad generada por esa vía.

Por otra parte, desde el plano legislativo, cabe destacar que en 2021 se actualizó la Estrategia Ambiental Nacional. Al respecto, el CITMA manifestó que se incluyeron medidas para detener la pérdida de la biodiversidad, la contaminación y la degradación de los suelos. Además, señaló que en estos momentos se actualiza la Ley de Medio Ambiente, que data de 1997, y que se ya se actualizó la norma jurídica sobre el manejo de los desechos peligrosos, en la que se incluyó las premisas a cumplir con los plásticos de un solo uso.

Este 2022 tiene como novedad en materia medioambiental es la “Inserción de la dimensión climática en la planificación del desarrollo territorial”. El proyecto lo desarrollarán el CITMA con la cooperación de EUROCLIMA+, programa financiado por la Unión Europea e incluirá en el programa piloto a los territorios del Municipio Especial Isla de la Juventud, Guanabacoa (La Habana), Cabaiguán (Sancti Spíritus) y San Antonio del Sur (Guantánamo). Este tiene entre sus objetivos integrar la dimensión climática en las Estrategias de Desarrollo Municipal y promover territorios resilientes y bajos en carbono.

“…la importancia del papel que tendrán los territorios (será fundamental), especialmente la labor de los coordinadores ya que son quienes tienen la misión de empoderar al municipio de la necesidad de transversalizar el tema climático para el desarrollo”, expresó sobre el proyecto al diario Granma la Directora General de Medio Ambiente de CITMA, Odalys Goicochea.

Proyecciones Tarea Vida para 2021-2030

La Tarea Vida está concebida para un impacto a corto (año 2021), mediano (2030), largo (2050) y muy largo (2100) plazos. Recientemente, a partir del análisis de los resultados del pasado año, se elaboraron las proyecciones para el período 2022-2030.

Según lo referido por el CITMA, el plan a implementarse a mediano plazo aumentará el rigor de la planificación, e identificará con mayor claridad las medidas más efectivas, incluyendo su evaluación en términos sociales y económicos. Una necesidad imperante será introducir nuevos mecanismos económicos financieros, ya que las limitantes de recursos impiden que se alcancen a tiempo todas las metas.

Entre las proyecciones fundamentales está la promoción de un desarrollo menos intenso en emisiones de gases de efecto invernadero, sobre todo en aquellos sectores con más potencial de emisión contemplados en la estrategia nacional. Cuba tiene entre sus objetivos lograr la “carbono neutralidad”, una meta acordada por varios países en las cumbres climáticas.

Además, se incluye que todas las acciones contra el cambio climático tendrán la premisa de vincular a todas las formas de propiedad en el país y de ser inclusivas y con un enfoque de género. Se estima que la implementación de la Tarea Vida contribuya a un modelo de desarrollo sostenible, que aporte a las metas económicas y sociales del país.


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Laydis Soler Milanés

Periodista, amante de la literatura y de la buena música.


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