Pretty woman (1990) es ya un clásico del cine comercial. Muchos aún hoy se preguntan por qué. Desde su mismísima creación, esta ha sido una cinta polémica.
Algunas de las listas en las que se encuentra este filme son:
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En pocas palabras, Pretty woman es la historia de Cenicienta adaptada a una prostituta callejera. Es poco probable que alguien no la haya visionado, pero igual refrescaré la memoria: Richard Gere interpreta a un soltero adinerado que viaja sistemáticamente por negocios a la ciudad de Los Ángeles.
Es un Richard Gere cultivado, atractivo y extremadamente rico, pero por razones que no se mencionan no hay mujeres rondándolo. Ni una sola. Nadie, en toda la película lo llama, le escribe o se le presenta. Lo cual te da la idea de que —como mínimo— es un hombre que no tiene intenciones de comprometerse emocionalmente con una mujer. ¿Por algo busca sexo en prostitutas, no?
Pues sí. El galán de la cinta se acuesta con prostitutas. La protagonista del filme es una. Definitivamente esta cinta fue una apuesta. Para las corrientes de pensamiento de la época debe haber sido difícil, ¿eh? En fin… que él alquila una por unos días. A pesar de que ella es un tanto vulgar, él se siente atraído por ella y le ofrece trabajo (ya sabemos de qué tipo) por una semana. Es en ese tiempo que pasan juntos en el cual ellos se enamoran.
Toda una historia de cuento de hadas… Porque las historias de hadas gustan. La industria del cine lo descubrió y lo pone en práctica incluso en el cine para todas las edades. ¿O es que se olvida que la mismísima historia de La Sirenita Ariel ha sido adaptada para tener un final feliz? ¿Hay alguien que no sepa que la sirenita Ariel en la historia original es despreciada por el humano que ella adoraba… Que termina ella convertida en espuma, se muere, adolorida y triste por el desprecio de quien ella amaba? Así escribió ese cuento Hans Christian Andersen.
Pero el cine nos prepara desde niños para una vida que no existe. Nos prepara para finales felices. Y a nosotros nos gusta. En definitiva, si le vamos a dedicar par de horas a la gran pantalla, ¿por qué no ser felices?
El argumento de Pretty woman tiene demasiados puntos débiles. Para empezar, es increíble. No me refiero a que los personajes tomen decisiones incoherentes con la personalidad que estaban desarrollando, como que Richard Gere pase en una semana de ser un solterón que busca prostitutas a buscar una relación seria o que Julia Roberts pase de tener clientes regulares a querer trabajar y estudiar. De verdad, ¿ese plan no se le había ocurrido antes?
La incredibilidad del filme pasa por el hecho de que en él los sueños se logran exactamente como se sueñan, sin casi ningún tipo de esfuerzo de parte de ninguno de los involucrados. Y no ayuda para nada el montón de gazapos de la película, en la cual desaparecen y reaparecen jarrones y cojines por todas las escenas sin que los actores parezcan darse por enterados.
Pretty woman no cuenta una historia probable —seamos eufemísticos—. Ni siquiera una historia de amor. Aunque la vendan como comedia romántica. Aunque pretendan que Julia Roberts se enamora de Richard Gere por quién es y no por lo rico que se sentía estar comprando con tarjetas sin límite de crédito en tiendas de marca. Pero cuenta una historia que —y eso sí es innegable— nos gustaría que pasara.
El éxito de Pretty woman radica en dos realidades. Primero, la gran química que hubo entre los personajes protagónicos. Esa sonrisa tan a tono con esa canción de Roy Orbison cuyo nombre comparte el filme, que luego Julia Roberts explotó —¡y todavía explota! hasta el cansancio—. Y esos ojitos picarescos… junto con el pelo grisáceo de cuando Richard Gere todavía era un hombre sexy… ¡Uy, me erizo nada más de pensar que la escena donde él toca el piano no tuvo ningún doble!
La segunda razón para el éxito de la cinta es que ella apuntala nuestros sueños. Todos tenemos deseos. A menudo nuestros arcanos son bastante imposibles. Y lo sabemos, aunque soñamos con que no sea así. Entonces, inconscientemente, pensamos: Si Pretty woman es posible, cómo no voy yo a lograr… (llena los tres puntos suspensivos con cualquiera de ese montón de sueños que sabes improbables pero que piensas de vez en vez, de todos modos).
Y es por eso que la cinta, dirigida por Garry Marshall, significó un éxito de taquilla en Estados Unidos casi desde el mismo momento de su estreno, el 23 de marzo de 1990. En ella se gastaron 14 millones de presupuesto y se recaudaron 463. Ustedes hagan la matemática.
Aly
7/11/17 12:29
Definitivamente esta es una de las peliculas que más me gusta y cuando me siento a verla las tantísimas veces que lo he hecho solo veo lo bonito que hay en la relación y la quimica entre los actores y disfruto el momento de ir de compras o la escena de la opera, sin contar con la del piano, que realmente es el quien lo toca. Ciertamente es una versión de la Cenicienta pero la vida está llena de problemas, entonces una pelicula así me sirve para relajar y soñar un poquito. Hay muchas otras películas bien lindas y romanticas, pero si ponen Pretty woman me siento y la vuelvo a ver, no importa cuantas veces la pongan, la realidad es que la formula dio resultado.
Ernesché
28/9/17 16:14
Excelente analisis, Felicidades una vez mas Diana
Eloisa
29/8/17 15:32
Y por qué todos los meses la pone MUltivisión? Tantas películas hermosas de amor. Es esa lección que le pasamos a nuestras jóvenes? Jinetear hasta que aparezca el rico?
cubana
29/8/17 11:54
Me gusta la pelicula aun con sus tintes de pobre rescatado por el rico, pero casi una vez al mes se pasa por MULTIVISION por que.I
J0ck3R
29/8/17 10:49
Esa sta n mi lista d peliculas famosas q jamas voy a ver y admito q veo bastante cine comercial
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