Windows 8, más lejos de las PC

Compatibilidad, movilidad y productividad son las tres características que Microsoft destaca de su nuevo sistema operativo, que salió a la venta el pasado día 26.

Enfocada directamente en los dispositivos móviles -tabletas, teléfonos, entre otros- la interfaz de Windows 8 es multitáctil, muy visual y compuesta de aplicaciones. No obstante, el responsable del sistema operativo de Microsoft en España, Fernando Calvo, ha afirmado que “el sistema se ha concebido para que la experiencia del usuario sea la misma con independencia del dispositivo que utilice”.

Llama la atención la apuesta de la compañía de Redmond (Washington) por entrar en este nuevo mercado, teniendo en cuenta que aún el 41% de las computadoras personales a nivel mundial usan Windows XP. A esto se suma que la gran mayoría de los 1000 millones de usuarios de Microsoft no podrán disfrutar todas las prestaciones del nuevo servicio, pues sus pantallas no son sensibles al tacto.

El gran desafío de Windows 8 será que los consumidores sean capaces de entenderlo, anunció The New York Times en su sección de Tecnología. El importante diario estadounidense pidió a cinco interesados que utilizaran Windows 8 con mouse y teclado, y no con los dedos. “Solo uno de ellos encontró la interfaz atractiva. El resto opinó que era muy confusa y, sobre todo, que no era intuitiva. ‘Tendría que ser más sencilla, no debería tener que pensar en ello’, dice uno de esos usuarios. ‘Me hace sentir estúpido’, concluye otro. La mejor prueba de que esa interfaz no es intuitiva es que ya hay decenas de artículos que enseñan a los usuarios cómo regresar al escritorio clásico de Windows”, señala la publicación.

Por otro lado, la prestigiosa revista CNET ha dado a Windows 8 la nota más alta en sus críticas: excelente. Su resumen es que el sistema operativo funciona muy bien en tabletas y en PC, que las aplicaciones trabajan entre sí, y que se actualiza con facilidad. “Pero será mejor que sepas que te va a costar acostumbrarte a ella”, añade.

La revolución técnica, como la nombra Fernando Calvo, empieza por el “Inicio”. Todos los usuarios de Windows saben localizar ese botón en la parte inferior izquierda del monitor. Con la interfaz renovada ha desaparecido de la vista y se sitúa a la derecha, a la mitad de la pantalla. Aunque solo se hace visible cuando se pasa el dedo o el mouse por encima de ella. El escritorio con iconos, al que nos hemos acostumbrado por años, ha sido sustituido por cajas de aplicaciones que se pueden organizar por pantallas (productividad, juegos, multimedia, etc.) que se deslizan con un dedo, como en el iPhone o las tabletas Android.

En cuanto a su éxito, las expectativas de los analistas y la industria son muy conservadoras, ya que Microsoft controlaba hasta hace algún tiempo el 95% de la cuota de mercado en los dispositivos conectados a Internet; pero en la actualidad, con un ecosistema mucho más diverso, está por debajo del 30%, aclara Enrique Dans, profesor de Sistemas de Información en IE Business School.

Para Bill Gates, fundador de la millonaria compañía “este es un producto absolutamente crítico. Es clave para el futuro de la computación personal”.

Tal parece que la empresa intenta purgar sus errores del pasado, cuando despreció Internet y el móvil, recuerda el analista Jaime García Cantero. “Microsoft debe reinventarse en esta era post PC de la movilidad y los servicios en la que, sin embargo, su mayor vía de ingresos sigue siendo el PC”, explica.

En Cuba, el vigente proceso de migración hacia Linux aún constituye una tarea pendiente, por lo que un amplio porciento de las computadoras nacionales funciona con las diferentes versiones de Windows. Desde hace varios días, la número 8 circula por las memorias flash de muchos jóvenes entusiastas de la tecnología y amantes de estos productos. En poco tiempo seremos testigos, del aprovechamiento -o no- de sus posibilidades, en un entorno caracterizado por múltiples limitaciones en la conexión a internet y la ausencia de monitores táctiles.