sábado, 27 de abril de 2024

El bueno, el malo y el Bad Bunny literario

Lo best seller son un fenómeno comercial, pura economía y estudio de mercado. Hay algunos muy interesantes que apuntan a convertirse en clásicos por su demostrada calidad y trascendencia...

Carlos Alberto Alcaide García
en Exclusivo 28/03/2022
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Poster-aniv.-película-Lo que el viento se llevó
¿Podemos decir que Lo que el viento se llevó es un libro malo? Por supuesto que no.

EL BUENO, EL MALO Y EL BAD BUNNY LITERARIO

Siempre he escuchado eso de que hay libros buenos y libros malos ¿Libros malos? Pues sí, libros malos. La verdad no creo que esto sea así.

Algunos libros hacen apología a determinadas ideologías o tendencias realmente negativas, pienso en Lo que el viento se llevó, que ampara las ideas racistas y concibe la esclavitud como un proceso natural donde el buen hombre blanco educa, ayuda y brinda trabajo al pobre y atrasado hombre negro. Lo cual fue un pretexto moral para sostener el sistema esclavista. ¿Podemos decir que Lo que el viento se llevó es un libro malo? Por supuesto que no. Ya que podemos comprender el pensamiento de la sociedad sureña norteamericana de mediados del siglo XIX y analizar el problema histórico de la racialidad. La construcción de los personajes, la trama, el argumento, la limpieza narrativa, el conflicto que plantea, la documentación sobre la guerra de secesión y la tempestuosa relación de amor que domina a los protagonistas hacen de esta novela un clásico de la literatura universal.

La polémica puede ser aplacada si juzgamos la obra con objetividad. La autora de Lo que el viento se llevó, Margaret Mitchel era una mujer blanca del Sur de Estados Unidos y para la época en que escribió el libro, el racismo estaba en pleno apogeo. Eran los tiempos de la segunda ola del Ku Klux Klan y la discriminación hacia los afrodescendientes escalaba al punto más alto. En ese contexto tan radical, Mitchel escribió una obra en la que no expresa ese odio, ni da cabida a los ataques racistas, ni frases denigrantes contra los afroamericanos. La inmensa mayoría de los personajes negros son retratados como personas nobles, leales y generosos, en contraposición de muchos blancos que son pintados como ruines y perversos. Uno de los personajes más queridos y populares de la novela es Mamita (la esclava niñera de Scarlett)     

De todos modos, en el imaginario popular, está la concepción de libros buenos y libros malos. ¿Cuáles serían estos “Libros malos”?

Bien, primero hay que entender el término Malo.  Un mal libro carece de trascendencia, de profundidad, son superficiales y su contenido es trillado, gastado, nada novedoso. El asunto con esto es que entre el 40 y el 60 por ciento de la población mundial es amante de la literatura y poner a toda esa gente de acuerdo en algo es muy difícil, y lo que para unos es malo, para los otros es lo mejor que se ha escrito.

Hay una estrategia, una especie de filtro, para determinar la calidad de los libros. Ese filtro es el tiempo. Si eres seguidor de Bad Bunny, sabrás que él antes era malo, pero ahora es peor. Algo así pasa con los libros malos, con el tiempo son peores, van perdiendo las pocas cualidades que lo hicieron "famoso".

Caemos entonces en los best seller. ¿Qué es un best seller? Bueno el término está en francés y lleva una explicación más amplia (al alcance de su Google) y se le atribuye a los libros que son un éxito de venta. Cuando alguna novela tiene éxito, casi siempre en el mercado norteamericano, se le llama best seller. Ejemplos de best seller son la serie de Cincuenta sombras de Grey, la serie Crepúsculo, After, Tres metros sobre el cielo, Harry Potter, Yo antes de ti, El hobbit, El Codigo Da VinciEl Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, El guardián entre el Centeno, Los pilares de la tierra

La lista es extensísima y muy diversa.

 La gran pregunta ¿Todos los best seller son libros malos? evidentemente no, no todos lo son, aunque una gran parte de ellos si entran en el saco del derroche de papel.

¿Entonces, si muchos best seller son malos, por qué tienen éxito en el mercado editorial? Muy sencillo, es una literatura es complaciente, apela a la sensiblería, sin grandes recursos narratológicos con un final edulcorado. Casi una película de Disney mojada en almíbar, parafernalia dark y espolvoreado con pornografía barata, y esto a las personas le gusta, a la mayoría de nosotros nos gusta, a los adolescentes les gusta, a los "solos por siempre" les gusta esto. No todo puede ser intensidad y necesitamos poner los ojos en remojo de vez en cuando.

Vamos a aterrizar nuestro ejemplo en 50 Sombras de Grey. Esa novela es un best seller, un éxito de venta, y triunfó en el Estados Unidos profundo. Entre su principal público se encontró a mujeres de 40 años en lo adelante. Mujeres de maridos insulsos y aburridos; de los que llegan del trabajo, abren una cerveza y con los pies en la mesa de café esperan la comida, maridos conservadores, machistas y con el bigote manchado por la grasa de Burger King. Tenemos a este sector que no se atreven a entrar en pornhub, donde la moralidad es el pan de cada día y la lectura se abre como único camino para escapar y explorar la sexualidad y la fantasía.  A esa ecuación le sumamos un libro que nos presenta a un Chistian Grey musculoso, millonario, con abdominales de piedra y una tendencia misógina para abusar con las mujeres, y nos da como resultado un éxito de venta.


Poster promocional de la película Cincuenta sombras de Grey.

Cuando este público tuvo el libro en sus manos y sintió como la boca se le hacía agua y no solo la boca se le hacía agua, empezó a comprar el libro como si fuera Coca-Cola en el Sáhara. El libro pasó de ser un Fanfiction de internet a ser el número uno en las listas de los libros más leídos, número uno en la lista de best seller, por encima de muchísimos clásicos.  (50 sombras… ha vendido alrededor de 31 millones de ejemplares, los derechos de autor se han vendido a casi todos los países desarrollados, y los bolsillos de su autora, E. L. James, están reventados de tanto recibir dinero, tanto dinero que me da mareo escribir la cifra de su fortuna)

¿Bueno, entonces 50 Sombras… debe ser un buen libro? Pues no, es un Fanfiction que plagió el esquema de Crepúsculo, la narrativa deja mucho que desear, los personajes son tan planos y predecibles como la gravedad, los intentos de reflejar el bondage/disciplina, dominación/sumisión, sadismo/masoquismo, por sus siglas BDSM quedan muy chapuceros; las mujeres son objetos sexuales sin mucha inteligencia, las frases hechas, los lugares comunes, los diálogos cadavéricos, las descripciones pornográficas y burdas, y la historia que no deja de ser un plagio refrito, una copia de otra copia, de una tercera copia de la copia de otra copia de alguien más. En fin, a juzgar por su calidad estética y todos los elementos antes mencionados, 50 Sombras… es un libro malo.

Pero… y siempre hay un pero. Hay algo que salvar de todo esto, algo que ampara y exime de toda maldad a 50 Sombras… El libro, pese a toda crítica negativa, no deja de ser libro, no deja de ser una historia escrita, narrativa, literatura, a fin de cuentas. Y sirve como un primer escaño para entrar al mundo de los libros. Si la novela ayuda a crear el hábito y el amor por la literatura, pues bienvenida sea, ya vendrán, si es incursada, obras más complejas, de mayor riqueza artística.    

Lo best seller son un fenómeno comercial, pura economía y estudio de mercado. Hay algunos muy interesantes que apuntan a convertirse en clásicos por su demostrada calidad y trascendencia, estoy pensando en la saga de Harry Potter o El señor de los anillos.

Habrá que hablar en otro momento sobre la diferencia entre Clásico y Best seller, sobre qué hace que un libro sea considerado literario y hasta la insondable pregunta de ¿Qué es la literatura? Pero esos son otros temas, temas pendientes para los próximos artículos.

                                                                                                                         


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Carlos Alberto Alcaide García

Le gusta el cine y la literatura, más la segunda que el primero. Es profesor de literatura en el Pre' y alumno del actual centro de formación literaria Onelio Jorge Cardoso.


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