Adiós a la Liga de dos

Una vez más, el Atleti rompe pronósticos y derrota al Real Madrid más caro de la historia. Un gol en los primeros minutos del partido le bastó a los pupilos de Simeone para maniatar a los merengues y manejar el partido, con mucha dificultad y sufrimiento, y levantar esa Copa que solo es relevante en dependencia de quien la gane.

Los rojiblancos perdieron a dos pilares como Diego Costa y Filipe Luis, además de Adrián, pero en cambio trajeron a Mario Mandzukic, Antoine Griezmann, dos monstruos del gol, acompañados también por Siquiera (Granada), Raúl Jiménez (América), Miguel Angel Moyá (Getafe) y Ángel Correa (San Lorenzo); sí, no son grandes nombres, ni conocidos pero Simeone conoce bien su trabajo, y sabe qué necesita su equipo, al punto de que ya ganó el primer trofeo de la temporada.

Luis Enrique, actual entrenador del Barça, da como favorito a los colchoneros, y no es hipocresía, el ex azulgrana es consciente de su rival, del equilibrio del club madrileño y de las genialidades del Cholo. Ya el Barça dejó escapar el título hace un año en su propio terreno, ante el rival que parte como favorito este año.

El Real Madrid, como siempre, priorizó la teoría de las camisetas y los cromos a la de un equipo equilibrado. Se quieren deshacer de Di María y Khedira, pero mantienen a Xabi Alonso en la plantilla, un jugador al que apenas le quedan par de balas en el tambor. Traen a James, para complicarle más la vida a Ancelotti en la delantera, y sacan a Morata, uno más de los eternos prospectos que no tienen futuro en el primer equipo. También traen a Kroos, un buen fichaje, inteligente para equilibrar la media, solo si vas a deshacerte de los más útiles y dejar a los prescindibles.

Además, no refuerza la defensa, confían en Pepe, un hombre tan bueno como irregular, capaz de salvar un juego hoy y hacerse expulsar al siguiente. Solo Ramos parece un pilar, pues Varane no acaba de explotar. A Arbeloa lo tienen en el dique seco, y por increíble que parezca, Coentrao sigue saliendo como titular por encima de Marcelo.

Ahora a los de Simeone les queda aguantar, resistir como cada año los embates de la prensa, que les critica desde todos los ángulos posibles, como si fuesen el villano de turno que quiere desplazar a los dos galanes de una telenovela que ya aburre.

Hoy ya comienza la Liga española, y si las cosas van como espera los fans, tendremos una nueva lucha entre tres grandes, dos armados con millones, y el otro a golpe de corazón.