La diabetes mellitus constituye actualmente un problema generalizado en todo el mundo. Existen alrededor de 415 millones de personas con esta enfermedad en nuestro planeta; 318 millones presentan intolerancia a la glucosa o prediabetes, para nada inocua, con riesgo aumentado de presentar diabetes en un futuro.
La enfermedad cardiovascular es la causa principal de complicación y fallecimiento en estos enfermos; también las complicaciones microvasculares tienen un impacto significativo.
NEUROPATÍA AUTONÓMICA CARDÍACA
En los pacientes diabéticos existe una complicación de la enfermedad llamada neuropatía autonómica cardíaca. Se relaciona con desenlaces fatales. Aunque se presenta con relativa frecuencia, puede transcurrir inadvertidamente durante mucho tiempo debido a la ausencia de manifestaciones clínicas hasta etapas avanzadas. Es una afección frecuente en los pacientes con diabetes mellitus, aunque a menudo no es diagnosticada oportunamente.
Existe una amplia variación en la prevalencia de esta complicación. Varía entre 17 y 66 % en pacientes con diabetes tipo 1; y entre 31 y 73 % en aquellos con diabetes tipo 2, según estadísticas.
Los factores capaces de favorecer esta complicación son comunes a otras complicaciones vasculares diabéticas; incluyen el control de las glicemias, la duración de la diabetes, sobre todo si no está bien controlada, y otros riesgos de enfermedades cardiovasculares como la obesidad y el tabaquismo.
Las glicemias elevadas juegan un papel importante en la aparición de las complicaciones microvasculares de la diabetes y tienen un impacto desfavorable sobre la evolución de la neuropatía autonómica cardíaca y su progresión en el tiempo. Por el contrario, cuando se mantiene un control estricto de las glicemias ha sido observada una disminución significativa y mantenida en la incidencia de esta complicación neurológica del corazón. Un buen control metabólico de la diabetes resulta importante en su prevención.
Una concentración de hemoglobina glucosilada mayor de 7,5 % es un factor de riesgo adicional independiente, o sea, sin relación con los otros para esta neuropatía.
POSIBLES CAUSANTES
Los factores de riesgo cardiovasculares, como la obesidad, el tabaquismo, la hipertensión arterial y el aumento de las grasas en sangre han sido asociados con la aparición de la neuropatía autonómica cardíaca. Las complicaciones microvasculares comparten mecanismos comunes y la presencia de ellas, como son la retinopatía diabética o la microalbuminuria, puede anunciar la existencia de la neuropatía.
Las glicemias elevadas, cuando no existe un adecuado control metabólico de la diabetes, pueden activar diferentes vías relacionadas con la instauración de la neuropatía autonómica periférica, pues se afecta la regeneración normal de las neuronas.
Entre otras explicaciones, el llamado estrés oxidativo, afín con un inadecuado balance entre los radicales libres y los antioxidantes, induce daño en el ADN del interior de las células y la acumulación de productos neurotóxicos. También se considera que la neuropatía puede producirse como resultado de una enfermedad autoinmunitaria de determinados ganglios, los llamados neurovegetativos, así como por causas genéticas.
La inflamación y el conocido como síndrome de apnea obstructiva del sueño, así mismo se relacionan con las complicaciones micro y macrovasculares de la diabetes mellitus.
LAS PRIMERAS MANIFESTACIONES
La neuropatía autonómica cardíaca presenta síntomas solo en etapas avanzadas de la enfermedad. El nervio llamado vago, habitualmente es el primero en ser afectado. La taquicardia en reposo, con una frecuencia cardíaca fija entre 90 y 130 latidos por minuto, sin variaciones al inspirar o espirar, se asocia con neuropatía grave y con severa afectación de los nervios del corazón.
Por eso la frecuencia cardíaca con el paciente acostado reposando puede ser utilizada como diagnóstico indicador y pronóstico en pacientes con esa neuropatía. Una taquicardia pertinaz aun en reposo se vincula con mayor riesgo de desenlace fatales y de complicaciones cardiovasculares.
La tolerancia reducida al ejercicio puede ser una manifestación de la presencia de esta complicación en el paciente diabético. La afectación de los nervios del corazón disminuye la tolerancia al ejercicio al reducir el incremento apropiado del volumen de sangre expulsada por el corazón y la frecuencia cardíaca, presentes normalmente durante la actividad física.
La hipotensión ortostática, reflejada en el paciente al pasar de la posición de acostado a la de pie, es definida como una reducción de la cifra de la presión arterial sistólica, o la llamada máxima, mayor de 20 mm Hg, o una reducción de la presión arterial diastólica, llamada mínima, mayor 10 mm Hg, está considerada como una manifestación tardía de la neuropatía.
Las formas más graves incluyen las arritmias cardíacas, fallecimientos repentinos, isquemia del miocardio silenciosa o sin dolor, etc.
Los síntomas pueden incluir mareos, desvanecimientos, vahídos, presíncopes y síncopes. Algunos medicamentos pueden agravar estos síntomas.
Existen pruebas especiales para diagnosticarla oportunamente, pues su detección precoz es vital para el éxito terapéutico. Existen datos donde se sugiere cómo la afectación neurológica del corazón puede ser reversible si es tratada poco tiempo después de su inicio. Los objetivos del tratamiento son el control de los síntomas y el freno a la progresión de la enfermedad.
OBJETIVOS
Los objetivo de abordar este tema tan complejo y extenso en una apretada síntesis es orientar a los lectores no especializados en la importancia de mantener un estilo de vida saludable para prevenir la neuropatía autonómica cardíaca y otras complicaciones de la diabetes mellitus.
Modificar los estilos de vida de los diabéticos a favor de cada cual es mantener cada día un control intensivo de la glicemia y un enfoque efectivo y suficiente para la erradicación del peso corporal excesivo, así como conservar en límites normales las cifras de la presión arterial y las grasas de la sangre. Los ejercicios físicos adecuados deben ser orientados por un personal especializado.
Entre las modificaciones del estilo de vida se ha demostrado cómo el incremento de la actividad física mejora los síntomas de disfunción autonómica en los diabéticos.
El control intensivo de la glucemia puede reducir la incidencia de la neuropatía autonómica cardíaca en un 50 % a los seis años de seguimiento en la diabetes mellitus tipo 1, en comparación con el tratamiento convencional.
Por lo tanto, un diabético bien cuidado todo el tiempo por sí mismo es garantía de la prevención de las complicaciones derivadas de este enfermedad, entre ellas la neuropatía autonómica cardíaca.
Zoila
9/3/18 16:32
Pese a lo difícil del tema, el Dr. Quirantes me lo hace fácil de entender sin bajar calidad científica
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.