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viernes, 22 de noviembre de 2024

Cocina de Cuba

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Aprende a asar correctamente las saludables verduras

Hay diferentes maneras de cocinar la verduras, pero asarlas es una de las formas más sanas, simples y sabrosas de cocción...

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 14/11/2018
3 comentarios
Ajíes asados
Mientras más pequeños sean los pedazos de los vegetales, más rápidamente se asarán.

Existen vegetales que se prestan más a ser asados en el horno, entre ellos se encuentra la papa, la berenjena o el pimiento. En el mundo vegetal también existen muchas otras opciones para preparar en el horno hogareño, como la cebolla y el ajo, capaces de enriquecer su sabor después de pasados por el horno.

Para incorporar como platos predilectos, las verduras menos demandadas como la col o el brócoli, habitualmente cocidos al vapor, cuando se asan adquieren un atractivo sabor para los comensales. Cuando se asan, los sabores más dulzones son concentrados, transformándose en alimentos crujientes en su exterior y con el interior tierno y sabroso.

ANTES DE INTRODUCIRLAS EN EL HORNO

Para obtener un excelente asado de verduras, previamente se debe decidir si vamos a asar las de un solo tipo o se van a mezclar diferentes variedades, pues cada una de ellas necesita tiempos de cocción distintos. Los vegetales con un mayor contenido de agua se asarán más rápido en relación con los más duros y con mayor almidón; las papas siempre necesitan más tiempo.

Para comenzar, se deben lavar concienzudamente, secar, pelar y eliminar las partes no utilizables. Algunas como la berenjena o la calabaza no hace falta pelarlas, pero hay quien las prefiere sin cáscara. Después se deben cortar y trocear en piezas del mismo tamaño, para garantizar una cocción pareja y uniforme; en general, lo ideal es cortarla toda en cuadraditos del tamaño de un bocado. Mientras más pequeños sean los pedazos, más rápidamente se asarán.

Si se desea obtener la masa tierna y jugosa de verduras, por ejemplo, del pimiento o la berenjena, se deben asar enteros con la cáscara. Las de tamaño más pequeño, como los rábanos o las zanahorias, quedan muy sabrosas al asarse enteras.

PARA SABORIZAR LAS VERDURAS

Para obtener un plato muy apetecible se aconseja sazonar y añadir sabores adicionales. Los mejores se obtendrán del aceite de oliva, preferentemente virgen extra, las hierbas como el romero, el tomillo o la salvia y las especias. La selección está en dependencia del gusto de cada cual. Una o dos cucharadas de aceite de oliva por bandeja es una adecuada cantidad para que las verduras cojan sabor y textura sin acabar muy grasientas.

Los vegetales ya picados se deben colocar en una fuente honda y añadirle las hierbas y el aceite, y después mezclar todo bien, con las manos bien limpias, frotándolas con los dedos. Salpimentar de manera opcional, pero sin excesos. Cuidado con la sal si hay hipertensión arterial.

EL RECIPIENTE

Lo indicado es seleccionar una fuente plana de fondo recto. Así se evita afectar el resultado final debido al agua que sueltan las verduras, capaz de vaporizarse. La fuente debe ser de un material no demasiado oscuro, pues se calientan más en relación con los de color claro o transparente.

Es importante no llenar mucho la fuente pues los alimentos necesitan cierto espacio libre a su alrededor para que fluya el aire y, repetimos, evitar el vapor de la humedad que desprenden. Las verduras deben ocupar una sola capa, sin superponerse.

LA TEMPERTURA

Se debe escoger el máximo calor posible, pero sin exagerar, pues pudieran quedar quemadas por fuera y crudas por dentro. Llegar a 200ºC es una buena temperatura promedio para cualquier verdura, pues se obtendrá un exterior bien dorado, ligeramente caramelizado y crujiente.

Se deben remover bien dos o tres veces durante el proceso de horneado, pues si se dejan de un solo lado todo el tiempo el resultado final será disparejo. Es necesario asegurarnos de que todos los pedazos se cocinan por igual y con un color y textura uniforme.

Cuando se conoce que un horno tiende a calentar más por un lado que por otro, a mitad de cocción se debe sacar la fuente y cambiarla de posición para conseguir que todas las partes sean asadas a la misma temperatura.

Después de pasados 25 o 30 minutos se puede comprobar el punto de cocción de las verduras; puede ampliarse hasta casi una hora según el tamaño y el tipo de verdura seleccionada.

A LA HORA DE SERVIRLAS

Son más sabrosas acabadas de hacer y aún calientes. Lo que quede se puede recalentar, porque aunque pierdan algo de textura y sabor, se reutilizan en sopas, cremas o tortillas para elevarles su sabor y calidad nutritiva.

RECETA DE ASADO DE PAPA Y ZANAHORIA CON ESPECIAS

Es una receta ideal para acompañar los asados de carne. Aunque queda tan sabrosa que muchas veces se prioriza en detrimento del plato fuerte.

Ingredientes:

- 2 papas grandes

- 4 zanahorias,

- 1 cebolla mediana

- Aceite de oliva, preferentemente virgen extra

- Unas ramitas de tomillo

- Medio vaso de agua

- Pizca de sal, opcional

- Según el gusto, añadir un chorrito de vino de calidad

Preparación:

- Pelar las papas y las zanahorias.

- Mientras, se precalienta el horno a 190º.

- Se corta la cebolla en cuartos.

- Las zanahorias se pican por la mitad de forma longitudinal.

- Las papas se pican en trozos de tamaño mediano. Al cortarlas de esta forma, los tiempos de asado de las hortalizas utilizadas son similares, en torno a unos 45 minutos para estar bien hechas, doradas, crujientes en su exterior y bien tiernas por dentro.

- Una vez cortadas las colocamos en una fuente de horno, las sazonamos añadiendo por encima dos o tres cucharadas del aceite de oliva virgen extra pues ayuda a que se doren.

- Se coloca por encima unas ramitas de tomillo y se añade medio vaso de agua para que desde el principio las papas y zanahorias se cocinen y estén más tiernas.

- Quien lo desee puede añadir algo de vino tinto de calidad que aportará un delicado aroma.

- Pasados unos 20 minutos, el agua se habrá evaporado prácticamente y podemos abrir el horno, dar la vuelta a las distintas piezas y ver cómo van, para calcular el tiempo total. Cada horno es diferente, pero prácticamente con 45 minutos nuestra guarnición estará lista para disfrutar.

Es ideal para acompañar los platos cárnicos asados, tanto los de pollo, carne, o pescado. Pero ellos solos quedan tan ricos que muchas veces se prepara como receta vegetariana.


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Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.

Se han publicado 3 comentarios


Manuel
 16/11/18 13:03

Definitivamente que es preferible comer asado que frito, nos evitamos de esa manera la ingesta de aceites o grasas innecesarias. Sobre todo el asado de los pimientos es una buena opción, ya que los pimientos tienen la facultad de elevar nuestra temperatura corporal mediante la capsaicina para acelerar nuestro metabolismo y quemar una mayor cantidad de calorías en un menor período de tiempo.

Chef René
 14/11/18 18:46

Coincido plenamente con La Mora. Como me ha gustado este artículo.

Mora
 14/11/18 11:46

Que bueno el artículo. Porque además de comer comida saludables, para tener salud y bajar de peso también se debe aprender a cocinar saludablemente también.

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