Acostumbrados estamos a ver historias de hombres hechos a sí mismos, y eso está bien, siempre resultan interesantes, pero cuando aparecen películas o series basadas en hechos reales que narran la vida de mujeres empoderadas, todas las miradas se enfocan en ellas.
Entonces, no es difícil calcular el alcance que ha tenido “Self Made”, también conocida como “Madame C.J. Walker, una mujer hecha a sí misma” por su título en español.
Esta es una miniserie de Netflix, de apenas cuatro capítulos, estrenada en marzo de este año y que se basa en la vida de Sarah Breedlove, una lavandera afroamericana, quien derrota a la miseria y funda un imperio de la belleza que la convierte en la primera millonaria por esfuerzo propio en Estados Unidos.
A semejanza de Enola Holmes, sobre la que hablamos recientemente por acá, esta miniserie está también basada en una novela, específicamente en “On her Ground” de la periodista y escritora estadounidense A'Lelia Bundles, tataranieta de Breedlove.
Madam C.J. Walker, natural de Luisiana, Estados Unidos, nació en 1897, criada en el seno de una familia dedicada a la barbería, mientras que ella trabajaba lavando ropa. Era consciente de las problemáticas de pelo que sufrían las mujeres afroamericanas de la época, y por eso buscó establecer su propio negocio de productos de belleza para el cabello.
La protagonista de “Self Made” cambió su apellido de soltera por el de su esposo Charles Walker, a quien la unió algo más que el matrimonio: el negocio que tuvo ella como vendedora de productos para el cabello.
Como explico, sus inicios fueron muy modestos, y aunque empezó como una vendedora de puerta por puerta, Madame C.J. Walker llegó a tener su propio salón de belleza y traspasó fronteras con su empresa hasta países latinos como Cuba, Panamá y Costa Rica.
Con su astucia y perseverancia, Sarah se convirtió en un referente en el mundo de los negocios, que supo respaldar, además, causas justas, como el empoderamiento femenino y el activismo por los derechos civiles de los ciudadanos afroamericanos de su país. Llegó a ser considerada como la primera mujer afroamericana millonaria que labró su fortuna desde cero por el libro Récord Guinness.
Falleció en 1919, pero tanto su historia como su legado han continuado vigentes gracias a la compañía MCJW, cuyos productos son comercializados a través de Sephora, actualmente.
SELF MADE, LA MINISERIE
Los directores a cargo de este audiovisual fueron Kasi Lemmons y DeMane Davis, quienes trabajaron junto a la guionista Nicole Asher. Destacan entre los nombres de los ejecutores productivos de “Self Made” los de la actriz Octavia Spencer y el basquetbolista LeBron James.
No es la primera vez que el deportista participa como productor, sino que también ha fungido en este puesto en cintas como “Space Jam 2”, “Million Dollar Mile”, “More than Athlete”, entre otros.
Fotograma de la serie
Significativo igualmente es el trabajo que hace desde la fotografía la estadounidense Kira Kelly, nominada a un premio Emmy en 2017; desde el diseño de producción, Britt Doughty, quien ha trabajado en la serie “Suits”; y por el diseño de vestuario, Karyn Wagner, de quien conocemos por su trabajo en “The Notebook”.
La actriz protagonista principal es Octavia Spencer en el papel de Madame C.J. Walker, y ya mencionada también como productora ejecutiva; su coprotagonista es interpretada por Tiffany Haddish en el rol de Leila Walker, hija de la empresaria y heredera de su compañía.
Como personajes secundarios aparecen los actores americanos Blair Underwood (Charles Walker, esposo de Madam C.J. Walker), Garret Morret (Cleophus, padre de Charles) y la británica Carmen Ejogo (Annie Turnbo, empresaria y, en la serie, antagónica de Madam C.J. Walker).
A través de los cuatro capítulos, de entre 45 o 50 minutos de duración, “Self Made” narra la lucha de Sarah por establecer su emporio a principios del siglo XX en un Estados Unidos con arraigados problemas de racismo, desigualdad de género y machismo.
Los directores de la serie dejaron saber que inicialmente esta producción estaba pensada para 10 episodios, pero debió limitarse a "mostrar lo que era importante", de ahí que se enfocaran principalmente en la historia familiar del personaje, que, a fin de cuentas, componía gran parte de su vida.
Por orden, los capítulos se titulan así: La pelea del siglo, Por sus propios medios, La chica Walker, y Crédito a la raza; en ellos, se comienza contando cómo Sarah está decidida a vender el producto capilar de Addie y dejar de ser una simple lavandera, pero se enfrenta a una brutal realidad.
Debe luchar para abrir su propia fábrica y cumplir su sueño, lo que la lleva a buscar el apoyo de los empresarios negros locales y del famoso Booker T. Washington. Sus ambiciosos planes de expandir su imperio la conducen a Nueva York y dan lugar a una serie de traiciones que ponen en peligro todo lo construido. Ya, finalmente, los problemas de salud, un conflicto con sus empleados y una tragedia cercana a su corazón llevan a Sarah a tomar medidas claves para proteger su futuro y su legado.
Es más que claro el mensaje femenista y de empoderamiento femenino que posee “Self Made”, y este no se queda sólo en la historia, donde también se hace referencia a las preferencias sexuales de su hija Laila; sino que, además, la miniserie cuenta con una amplia participación de mujeres, comenzando por su directora afroamericana, DeMane Davis quien, entre otros trabajos, ha escrito episodios para la serie How to get away with murder.
La serie destaca por el guion, por su banda sonora, la producción, los personajes, la vestimenta remontada a aquella época, la narrativa y las actuaciones, factores que la hicieron una buena opción para disfrutar en medio de la cuarentena, pero también para cada persona que sueña con emprender, porque sin lugar a dudas, esta es una historia inspiradora.
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